CRÉDITOS
ALEJANDRO ÁNGEL LÓPEZ ABRIZ
TÍTULO: COLORS
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Universciencia, Año 20, N
o
59, 1 de enero - 30 de abril de 2022, es una publicación arbitrada, de periodicidad
cuatrimestral, editada por la Universidad Estatal de Oriente, A. C., Campus Puebla, a través de la Dirección de
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Dr. Emigdio Larios Gómez
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UNIVERSCIENCIA CONSEJO EDITORIAL
índice
estrategias de estudio de la interacción micorrízica
arbuscular en los manglares y aproximación
a la perspectiva de escalas
thai Khan ramírez-viga
págs. 7 - 23
reconociendo el acoso sexual callejero como
violencia de género hacia la mujer en méxico 2021
josé guadalupe loera camacho
diana alejandra canul rosado
págs. 25 - 44
uso de base de datos e información científica en el
contexto universitario
marco antonio martínez gonzález
págs. 45 - 49
págs. 63 - 77
el papel de la división sexual del trabajo en la
construcción del género masculino
regina esparza Quesada
oscar andrés grijalva loya
maría josé maldonado de la cruz
ximena reyes-martínez
daniel zahid sandoval núñez
mayleth alejandra zamora echegollen
el desarrollo de líneas de investigación en necesidades
educativas especiales y su relación con las políticas
públicas de américa latina y el caribe
victoria eguibar-ramírez
andrea pozos flores
págs. 79 - 97
págs. 51 - 62
subsunción y memoria colectiva
mayleth echegollen guzmán
Universciencia
ISSN: 1665-6830
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 2.0 Genérica (CC BY-NC-ND 2.0)
https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.0/deed.es
Universciencia
Enero-abril - Año 20 - Núm. 59 - 2022
http://revista.soyuo.mx/index.php/uc
universcienciasoyuo.mx
universciencia@soyuo.mx
Recepción: enero-2022
Aceptación: febrero-2022
Pág. 7-23
Resumen
La micorriza arbuscular es una asociación simbiótica establecida entre hongos y
aproximadamente dos tercios de las especies de plantas. Esta asociación se encuentra
presente en manglares, humedales costeros de elevada importancia ecológica y
económica. La función e importancia de la micorriza arbuscular en estos ecosistemas
son aun escasamente comprendidas. El presente artículo corresponde a una
investigación de tipo documental y una aproximación a las estrategias de estudio de
la micorriza arbuscular en los humedales, con particular enfoque en los manglares,
bajo la perspectiva de escalas de organización biológica. El estudio de la micorriza
en los manglares se halla en gran medida aún en una etapa de caracterización de las
especies involucradas y del medio ambiente en el que se desenvuelven. El registro de la
efectividad de los hongos micorrizógenos arbusculares y la dependencia de las especies
vegetales de manglar a la asociación con los mismos, así como la conceptualización
del estudio de dicha asociación bajo la perspectiva de escalas, resultan fundamentales
para la comprensión de su funcionamiento e impacto en estos ecosistemas.
Palabras clave: humedal, manglar, niveles de organización de organismos, micorriza
arbuscular, dependencia micorrízica, efectividad.
Abstract
Arbuscular mycorrhiza is a symbiotic association formed by fungi and approximately
two thirds of plant species. This association is found in mangroves, coastal wetlands
of high ecological and economic relevance. Function and signicance of arbuscular
mycorrhiza in these ecosystems are not fully comprehended. This article corresponds
to a documental investigation and an approximation to the study strategies of
arbuscular mycorrhiza in wetlands, focusing on mangroves, under the biological
levels of organization perspective. Arbuscular mycorrhiza study in mangroves is yet
in a characterization stage of the species involved and the environment in which they
develop. Gather information about arbuscular mycorrhizal fungi effectiveness and
mangrove plant species dependency to them, as well as conceptualizing the study
of this association under the biological scales perspective, are key to improve the
comprehension of its impact and functioning in these ecosystems.
Key words: wetland, mangrove, biological levels of organization, arbuscular
mycorrhiza, mycorrhizal dependency, effectiveness.
7
estrategias de estudio de la interacción micorrízica arbuscular en los
manglares y aproximación a la perspectiva de escalas
* La fotografía de portadilla fue tomada
y proporcionada por la autora Thai Khan
Ramírez-Viga.
1
Facultad de Ciencias, Universidad Nacional
Autónoma de México. Doctorante. Ciudad de
México, México. E-mail: tk.ramirezv@gmail.com
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-2724-9282
Google Scholar: https://scholar.google.com/
citations?user=EF6AVEsAAAAJ&hl=es
thai Khan
ramírez-viga
1
study strategies for arbuscular mycorrhiza in mangroves and an
approximation to scales perspective
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
que la asociación micorrízica arbuscular prevalece
en ellos (Radhika y Rodrigues, 2007), por lo que el
estudio acerca de su función e importancia ha ido
incrementándose. Estudios experimentales sugieren
que los hongos micorrizógenos arbusculares
son simbiontes ecaces e importantes en los
humedales, dado que proveen benecios en cuanto
a la toma de nutrimentos y a su vez incremento
de biomasa y tolerancia al estrés a las plantas con
las que se asocian (Ramírez-Viga et al., 2018); sin
embargo, aún queda mucho por comprender a
nivel población, comunidad y ecosistema.
Dentro de los humedales se pueden nombrar
muchos hábitats diferentes, incluyendo ecosistemas
de inundación permanente, inundación temporal,
con inuencia de salinidad al encontrarse en las
costas o sin ella al encontrarse tierra adentro, lóticos
o lénticos, hallados en zonas tropicales, templadas
y frías (Kent, 2001). Ejemplos de humedales son
las marismas, los pantanos, los arrozales y los
manglares.
Los manglares son humedales establecidos
en costas tropicales y subtropicales (Spalding,
Kainuma y Collins, 2010), por lo que los organismos
que en ellos habitan reciben presiones ambientales
derivadas de la inundación y la salinidad; además,
su medio abiótico puede llegar a ser muy dinámico
debido a que el nivel del agua en el sustrato (y por
lo tanto el nivel de salinidad y una serie de otras
condiciones edcas, como la disponibilidad de
nutrientes y el nivel de oxígeno en el sustrato) suele
variar de manera contrastante de acuerdo con la
estacionalidad (por ejemplo, temporadas de lluvia y
sequía) y de acuerdo al nivel de la marea (Tomlinson,
1986; Moreno-Casasola, Peres-Barbosa y Travieso-
Bello, 2006, Rzedowski, 2006; Rahaman et al.,
2013; Hossain y Nuruddin, 2016; Ramírez-Viga et
al., 2020a).
INTRODUCCIÓN
2
La micorriza arbuscular es una asociación
establecida entre hongos microscópicos (Spatafora
et al., 2016) y aproximadamente dos tercios de las
especies de plantas (Helgason y Fitter, 2009). De
esta asociación, los hongos, que son heterótrofos y
simbiontes obligados, se benecian con la obtención
de carbohidratos producto de la fotosíntesis que
llevan a cabo las plantas; mientras que estas, a su
vez, se benecian de la extensión de su zona de
adquisición de agua y nutrimentos (Clark y Zeto,
2000; Smith y Read, 2008), que pueden llegar a ser
escasos en el suelo. Los hongos pueden entregar
hasta el 80% de fósforo y el 25% de nitrógeno de
la planta (Marschner y Dell, 1994). De esta manera,
la asociación micorrzica arbuscular inuencia
la adecuación de las plantas individuales (Koide,
2010), pero también inuencia la estructura de
las comunidades vegetales (Van der Heijden et al.,
1998) y el movimiento de materia y energía en los
ecosistemas (Klironomos et al., 2000). Sin embargo,
aún no se comprenden del todo los factores que
controlan su funcionamiento (Johnson, 2010).
Esta asociación se encuentra presente en los
ecosistemas terrestres, tales como bosques y selvas,
jugando un papel fundamental en muchos de ellos
(Kohout, et al. 2015), pero hasta hace algunos años
se discutía su función en ecosistemas inundados o
inundables, debido a que los hongos formadores
de micorriza necesitan oxígeno para subsistir
(elemento que puede llegar a ser escaso en el suelo
de tales ecosistemas). A estos ecosistemas hallados
en la transición entre la tierra y el agua, en los cuales
el agua supercial se halla usualmente a nivel del
suelo, o bien, este se encuentra cubierto por un
nivel somero de agua, se les denomina humedales
(Kent, 2001). En años recientes se ha encontrado
2
Artículo original y derivado del proyecto de investigación titulado:
“Ensayo de la candidatura. La asociación micorrízica
abuscular en los manglares. Avicennia germinans como
modelo de estudio” en el Posgrado en Ciencias Biológicas.
Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de
México. Ciudad de México, México.
8
EstratEgias dE Estudio dE la intEracción micorrÍzica arbuscular En los manglarEs y aproximación
a la pErspEctiva dE Escalas - thai Khan ramÍrEz-viga
Los mangles, son especies arbóreas que se
establecen en los manglares y que cuentan con
adaptaciones que les permiten prosperar en estos
ambientes tan particulares. Los mangles se asocian
de manera natural con los hongos micorrizógenos
arbusculares (Kumar y Ghose, 2008; D’Souza y
Rodrigues, 2013a; D’Souza y Rodrigues, 2013b;
Gupta, Bihari y Sengupta, 2016), lo cual sugiere
no solo que estos últimos se encuentran también
capacitados para sobrevivir en las condiciones de
estos humedales, sino que, además, el impacto de
su presencia sería observable en todas las escalas
de organización de los organismos, a partir de
nivel individual observado sobre el desempeño
de las plantas con las que se asocian, hasta el nivel
población (conjunto de individuos pertenecientes
a la misma especie), comunidad (conjunto de
poblaciones que interactúan entre sí) y ecosistema
(comunidades de organismos que interactúan con
su medio ambiente, interactuando de este modo
factores bióticos y abióticos).
Los manglares son ecosistemas de
fundamental importancia ecológica, que además
brindan numerosos servicios ecosistémicos al
hombre (Ramsar, 2006). El manglar es considerado
uno de los ecosistemas más productivos del
planeta, debido a que las corrientes de agua
(mareas, ríos y escurrimientos terrestres) aportan
nutrimentos y sedimentos desde el continente
u otros ecosistemas vecinos (pastos marinos y
arrecifes de coral), y modulan el intercambio de
los mismos, además de agua y organismos (Yáñez-
Arancibia, Twiley y Lara-Domíngiez, 1998; Botello
et al., 2010). Los manglares sirven como sistemas
naturales de control y barrera contra inundaciones
e intrusión salina, control de la erosión, protección
a la costa de huracanes, mantenimiento de los
procesos de acreción, sedimentación y formación
de turba, adems de fungir como ltro biológico
(por remoción de nutrimentos y toxinas) (Agraz-
Hernández et al., 2006) y sostener una compleja
cadena alimenticia (Botello et al., 2010). Estos
ecosistemas son el hábitat de especies de peces,
crustáceos y moluscos de importancia ecológica
y comercial, y constituyen zonas de refugio y
alimentación de fauna silvestre amenazada y
en peligro de extinción, así como de especies
endémicas y migratorias (Feller y Sitnik, 1996;
Agraz-Hernández et al., 2006; Botello et al., 2010).
Además de la pesca, el manglar es aprovechado
por el hombre para la obtención de madera para
construcción o leña, la extracción de sal, de taninos
(utilizados para el curtido y tinción), hojas y corteza
para uso medicinal, sin contar el uso recreativo,
estético, cultural y educativo que se le da (Agraz-
Hernández et al., 2006).
A pesar de su importancia, los ecosistemas de
manglar se hayan en zonas de particular interés para
cambio de uso de suelo y explotación de recursos,
lo cual los ha puesto en riesgo, pese a los esfuerzos
de conservación internacionales. Dicho riesgo se
extiende también a las pesquerías, las zonas costeras
habitadas ante el impacto de tormentas y huracanes,
además de los ecosistemas que colindan con ellos,
pues el ujo de materia se haya en estrecha asociación
(Díaz, 2011). El estudio de la micorriza arbuscular
en los manglares se ha incrementado en años
recientes ante: 1) el reconocimiento y difusión de la
importancia de estos ecosistemas, 2) los hallazgos
de la prevalencia de los hongos micorrizógenos
arbusculares en ellos, y 3) la perspectiva de que el
manejo de esta asociación pudiera ser de utilidad
en la restauración de los sistemas perturbados. Para
aclarar dicha perspectiva, es necesario incrementar
la comprensión acerca de su funcionamiento e
importancia en los manglares.
9
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
A la fecha, una cantidad considerable de
estudios a nivel mundial han registrado la presencia
de la micorriza arbuscular en los manglares,
abundando en mayor medida estudios en China
e India. En México, hasta hace una década, esta
resultaba un área de investigación escasamente
abordada, pero el interés en ella ha crecido en los
últimos años, contando ya con algunos estudios de
campo publicados (Ramírez-Viga et al., 2020 a, b;
Martínez-Hernández et al., 2021). Dado lo anterior,
se considera pertinente una reexión con respecto
al análisis de la función de la micorriza arbuscular
a través de escalas en los manglares, partiendo de
algunas generalidades de los humedales.
DESARROLLO
El presente artículo corresponde a una investigación
de tipo documental, siendo una aproximación a las
estrategias de estudio de la micorriza arbuscular
en los humedales, con particular enfoque en
los manglares, bajo la perspectiva de escalas de
organización biológica. Para ello, se tomaron en
cuenta los siguientes niveles de organización:
individuo, población, comunidad y ecosistema,
considerando la propuesta de Johnson et al. (2006)
y Johnson (2010). La búsqueda de literatura se
llevó a cabo sin delimitación temporal para libros
y artculos publicados en revistas cientcas, en
idioma español e inglés, utilizando las palabras
clave: manglar, mangle, hongos micorrizógenos
arbusculares, micorriza arbuscular, humedales,
efectividad, dependencia micorrízcica, población,
comunidad, ecosistema.
RESULTADOS
Estrategias para el estudio de la micorriza arbuscular en los
manglares
Los hongos formadores de micorrizas arbusculares,
o también llamados hongos micorrizógenos
arbusculares (HMA), se asocian con las plantas
y a dicha asociación se le denomina micorriza
arbuscular. Las esporas de los HMA (estructuras de
resistencia y reproductoras asexuales) germinan en
el suelo y forman hifas (lamentos, ramicados o no,
de tamaño microscópico), que reunidas forman el
cuerpo vegetativo de los hongos: el micelio (Oxford
University Press, 2021). Por medio de las hifas, los
HMA se unen a las raíces de las plantas y dentro
de estas forman estructuras de distribución (hifas
intraradicales), almacenamiento (vesículas, que
son hifas “hinchadas” llenas de cuerpos lipídicos),
resistencia (esporas intraradicales) e intercambio
simbiótico (arbúsculos, que son hifas intraradicales
ramicadas en forma de “rbol”) (Smith y Smith,
1997; Peterson, Massicotte y Melville, 2004; Smith
y Read, 2008). A la proporción de espacio de la raíz
de la planta ocupada por los HMA se le conoce
como porcentaje de colonización micorrízica o
porcentaje de colonización radical.
La estimación del porcentaje de colonización
radical por parte de los HMA es una técnica
ampliamente utilizada para el estudio de la
asociación micorrízica arbuscular en sistemas
naturales y experimentales (McGonigle et al., 1990).
La colonización micorrzica es una manera conable
(Hart y Reader, 2002a) para determinar la densidad
de ocupación en la raíz por el hongo (Hernández-
Cuevas et al., 2008) y ha resultado una valiosa
10
EstratEgias dE Estudio dE la intEracción micorrÍzica arbuscular En los manglarEs y aproximación
a la pErspEctiva dE Escalas - thai Khan ramÍrEz-viga
medida para identicar la presencia de la asociación
micorrízica arbuscular en numerosos ecosistemas
de humedal (Mohankumar y Mahadevan, 1986;
Carvalho, Caçador y Martins- Loução, 2001; Bauer
et al., 2003). La mayoría de los estudios realizados
en campo en ecosistemas de manglar reportan tal
medida, a menudo acompañada de la densidad
de esporas (número de esporas en determinada
cantidad de suelo) en la rizósfera de los hospederos
(Lingan, Tholkappian y Sundaram, 1999; Sengupta
y Chaudhuri, 2002; D’Souza y Rodrigues, 2013a;
Wang et al., 2014; Hu et al., 2015; Ramírez-Viga et
al., 2020 a, b; Gaonkar y Rodrigues, 2020; Martínez-
Hernández et al., 2021).
Con la revisión del porcentaje de colonización
radical, es posible saber si los HMA se encuentran
en las raíces de las plantas de interés en forma de
micelio diferenciado en estructuras fúngicas (hifas,
vesículas, arbúsculos, enrollamientos y esporas) y
en qué proporción. Ello representa una primera
aproximación hacia el conocimiento de los HMA
en el sistema estudiado (Hernández-Cuevas et al.,
2008), pero no reeja la efectividad (entendida como
grado de benecio) del endóto (el hongo) sobre el
hospedero (la planta). Algunas veces hasta un 10%
de colonización puede marcadamente incrementar
el crecimiento de la planta, de modo que cantidades
bajas de infección no necesariamente implican
pobre funcionalidad (Mosse, 1981; Cuenca, 2015).
El porcentaje de colonización falla como
variable predictiva de la efectividad porque es el
resultado de dos procesos interdependientes: el
crecimiento de la raíz y la invasión fúngica exitosa;
procesos que a su vez dependen de los genotipos
involucrados, de la cantidad y distribución del
inóculo (estructuras a partir de las cuales puede
originarse una nueva colonización de hongos
en las raíces) en el suelo (Allen, 2001). Treseder
(2013) llevó a cabo un meta-análisis para explorar
la relación entre el crecimiento y contenido de
fósforo en los tejidos de las plantas asociadas con
HMA, y encontró que conforme se incrementa la
extensión de la colonización radical por parte de los
HMA, estas dos variables de respuesta a menudo se
incrementan, sin embargo, también identicó una
variación sustancial entre los diferentes ensayos, por
lo que no termina de ser una variable conable para
hacer inferencias con respecto a la funcionalidad.
Aun con la limitante antes señalada, el
porcentaje de colonización brinda información
importante: 1) si la planta es susceptible de establecer
la asociación y qué porcentaje de ocupación tiene el
hongo en sus raíces bajo determinadas condiciones,
2) si algún factor suprime la colonización por
completo, entonces se puede inferir que es
perjudicial para el establecimiento de la asociación,
y 3) la presencia de arbúsculos y enrollamientos
indica que la asociación es funcional al momento de
la cosecha (aun cuando el intercambio simbiótico se
puede realizar también en las hifas intracelulares).
La información que ofrece este método es un
punto de partida que permite contrastar distintas
condiciones que pueden inuenciar la infección
por parte de los HMA.
Hart y Reader (2002b) aconsejan
complementar la información que arroja el
porcentaje de colonización intrarradical, con
medidas del micelio extrarradical (conteo de
micelio externo) (Miller y Jastrow, 1992; Brundrett,
Melville y Peterson, 1994) y establecen que esto es
importante para aproximarse a una representación
más precisa de la comunidad de HMA bajo estudio.
Esta es una variable que convendría explorar para
ampliar la comprensión de la micorriza arbuscular
en los manglares.
11
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
La micorriza arbuscular en los manglares a través de escalas.
El estudio de la efectividad y dependencia mocorrízicas bajo
esta perspectiva
Los hongos micorrizógenos y las plantas que se
asocian con ellos formando la micorriza, llevan
a cabo funciones importantes que pueden ser
observadas a distintas escalas de organización, por
ejemplo, los hongos micorrizógenos inuencian
el estatus nutrimental de sus hospederos
(individuo) (D’souza y Rodrigues, 2017), el
tamaño y jerarquía reproductiva de las poblaciones
vegetales (población) (Koide y Dickie, 2002)
y el almacenamiento de carbono en el suelo y la
estabilidad de los suelos (ecosistema) (Neergaard
y Petersen, 2000; Wang et al., 2016); asimismo,
las poblaciones de hongos micorrizógenos y de
plantas interactuantes inuencian la estructura de
las comunidades (Gange, 1993).
El papel y el funcionamiento de la micorriza
arbuscular en los humedales no son completamente
comprendidos hasta la fecha. Se ha reportado la
asociación en tales ecosistemas y se ha relacionado
su variación con las condiciones de inundación,
fertilidad o salinidad registrados en los mismos, pero
pocos estudios se han llevado a cabo con respecto
a la efectividad de los HMA y la dependencia
micorrízica de las plantas de humedal silvestres, y
aún menos en especies arbóreas (Turjaman et al.,
2008; Lamar y Davey, 1988; Ramírez-Viga et al.,
2018). En cuanto a los manglares, se ha encontrado
que algunas especies de mangle al asociarse con los
HMA se benecian de una absorción ms eciente
de fósforo, nitrógeno y potasio, mayor vitalidad
de sus raíces (habilidad de absorción, síntesis,
oxidación y reducción de la raíz) e incremento de
biomasa (Wang et al., 2011; Xie et al., 2014; D’souza
y Rodrigues, 2017). A la fecha no se han publicado
estudios de este tipo con las especies de mangle que
se distribuyen en México.
Johnson (2010) y Johnson et al. (2006)
proponen que los resultados de la investigación
de relaciones HMA-planta individuales pueden ser
analizados a través de una serie de modelos que
ayudan a extrapolar la información que se genera
de manera restringida (en nivel individuo) a niveles
más altos de organización (población, comunidad
y ecosistema). Estos autores establecen que los
estudios de las relaciones micorrízicas, a través de
escalas, facilitan el entendimiento de los mecanismos
y consecuencias de su funcionamiento. Además de
que los modelos analizados por Johnson et al. (2006)
brindan herramientas para analizar la información
existente, plantean un antecedente de cómo podría
dirigirse la investigación de la micorriza de manera
que esta extrapolación e interpretación sean cada
vez más fáciles de llevar a cabo. Los autores postulan
que el uso de esta perspectiva conduce a la creación
de modelos más descriptivos y predictivos, capaces
de guiar las decisiones de manejo.
Existen dos experimentos elementales para el
estudio de la micorriza arbuscular en los humedales
bajo la perspectiva de Johnson et al. (2006): la
dependencia micorrízica y la efectividad de los
HMA (Menge et al., 1978; Janos, 2007). El análisis
de la efectividad permite medir el benecio que las
plantas reciben de sus simbiontes micorrizógenos,
esto puede observarse en términos de generación
de biomasa (y parámetros que conducen a ello
como la adquisición de nutrimentos o la tasa
fotosintética) o de adecuación (cuando se extienden
los experimentos hasta la edad reproductiva de las
plantas). El benecio de la asociación es dependiente
de varios factores, tales como el estatus nutrimental
del suelo, la identidad de los simbiontes y cualquier
12
EstratEgias dE Estudio dE la intEracción micorrÍzica arbuscular En los manglarEs y aproximación
a la pErspEctiva dE Escalas - thai Khan ramÍrEz-viga
factor que modique la adquisición de los elementos
de intercambio simbiótico (salinidad, inundación,
cantidad de luz, etcétera) (Hoeksema et al., 2010;
Johnson, 2010; Ramírez-Viga et al., 2018). Por
otro lado, los taxas de plantas varían grandemente
en cuanto a qué tanto dependen de los HMA para
la adquisición de fósforo, y esto inuencia sus
respuestas al enriquecimiento (o decremento) de
los recursos aéreos y subterráneos (Johnson, 2010);
los ensayos que evalúan este aspecto se denominan
experimentos de dependencia micorrízica. El único
estudio publicado que a la fecha ha evaluado la
dependencia micorrízica en una especie de manglar
es el de Xie et al. (2014), encontrando que Kandelia
obovata es dependiente de la asociación.
Al brindar información acerca de los
benecios que obtiene la planta de la asociación
con los HMA, la evaluación de la dependencia
micorrízica y la efectividad, representan un punto de
partida para explorar el balance y el funcionamiento
de la micorriza en los ecosistemas. Establecer estos
experimentos permite probar el efecto de los
HMA sobre las plantas bajo distintos escenarios
ambientales y de interacciones bióticas, lo cual
facilita aproximarse a las condiciones en las que la
asociación se desarrolla en la naturaleza, y permite
realizar interpretaciones con respecto a procesos
que ocurren realmente en los ecosistemas que se
tratan de comprender. La selección de las variables
de respuesta adecuadas en los experimentos de
efectividad resulta fundamental para atender
esta cuestión. El uso de un esquema que facilite
contrastar información y la selección de variables
relevantes seria probablemente de ayuda.
En la Figura 1 se presenta un esquema
que puede utilizarse como base para el diseño de
estos experimentos para las especies de humedal
y de manglar. Al esquematizar el conocimiento del
sistema de estudio, pretende facilitar la comparación
y selección de variables relevantes. Los valores
de las variables y la identidad taxonómica de los
simbiontes involucrados en la micorriza arbuscular,
potencialmente serán diferentes dependiendo
del humedal que se pretenda estudiar; asimismo,
pueden cambiar de acuerdo con la estacionalidad
ambiental. Con este esquema se puede analizar la
información existente y también puede guiar en el
diseño de los experimentos. Una vez que se tiene
clara la pregunta a resolver en el estudio, se puede
comenzar a diseñar el experimento tomando en
cuenta este esquema y avanzando por pasos:
1. Determinación del nivel de organización
requerido para evaluar los efectos de la asociación.
Por ejemplo, si es a nivel individual, se colocaría el
nombre de las especies que se van a involucrar; si
se tratara de un análisis a nivel poblacional o a nivel
comunidad, se completara con echas la posible
dirección de las inuencias. Las interpretaciones en
sentido de presión selectiva se podrían realizar del
mismo modo.
2. Selección de variables. Colocar en los
espacios correspondientes los valores que se han
reportado para las distintas variables de interés en
los sistemas naturales y analizar si son intervalos
muy amplios o no, tratando de detectar si hay
grandes variaciones espaciales y estacionales en el
humedal de interés y plantear si se requiere (y es
posible dentro de los alcances del estudio) establecer
más de un escenario de fertilidad, inundación o
salinidad, por ejemplo. Este ejercicio facilita la tarea
de seleccionar, siempre de acuerdo con el objetivo
y los alcances del estudio, las variables moderadoras
y de respuesta más relevantes para el sistema de
estudio.
3. Examinar esquemas con los distintos
escenarios. Esto con la nalidad de contrastar las
13
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
posibles interacciones que se presentarán en el
sistema y los posibles resultados.
Figura 1. Esquema para el análisis de
funcionamiento de la micorriza arbuscular
a través de escalas
Fuente: elaboración propia.
El esquema de la Figura 1 resalta las variables que,
de acuerdo con las revisiones de Johnson (2010)
y Johnson et al. (2006), se ha encontrado son más
relevantes para la asociación micorrízica arbuscular
(con énfasis en las que son relevantes para los
humedales costeros) y permite la predicción de
inuencias (y la consideración de los efectos
sinérgicos de agregar la interacción entre variables
que a su vez afectan a otras). A continuación, se
describen los elementos de dicha gura.
La micorriza es la asociación de plantas y de
hongos micorrizógenos arbusculares (HMA), por lo
que, tal como en Johnson, Graham y Smith (1997) se
representa como la intersección entre los recuadros
correspondientes a cada simbionte. Esta interactúa
a través de los simbiontes con su medio (edco y
aéreo) recibiendo inuencias de diversos factores
(echas negras) y afectando su medio de vuelta
(echas grises). La expresión de la micorriza puede
observarse en ambos simbiontes y varía de acuerdo
con los genotipos implicados. Del mismo modo, de
acuerdo con dicha expresión varia su efecto sobre
el medio y el efecto que el medio tiene sobre de los
simbiontes. Diferentes taxas de plantas interactúan
con diversos taxas de hongos (números en
subíndices denotan diferentes taxas) y los resultados
serán particulares de la combinación (taxas más
abundantes son representados con tamaño de
fuente más grande y taxas menos abundantes
con tamaño de fuente ms pequeño). Con echas
punteadas se representan interacciones que podrían
ser de particular importancia en los humedales
costeros, como los manglares, considerando en el
esquema a especies con aerénquima en sus raíces y
con capacidad de exclusión de sales. Las variables
dentro de un mismo bloque interactúan entre sí y las
echas denotan interacción a través de bloques. Los
ujos de inuencia se mueven en distintos niveles:
a nivel individual (por ejemplo, la interacción
de una planta, considerando que recibe efectos
de los HMA), a nivel poblacional (por ejemplo,
considerando que en HMA1 es una población que
cuenta con individuos que interactúan entre sí), a
nivel comunidad (interacción de plantas y hongos y
con la dems biota; pudiendo agregar ms echas
para representar las inuencias entre las especies
a examinar) y a nivel ecosistema (al interactuar las
distintas comunidades con su entorno abiótico).
Al examinar e ir llenando el esquema de la
gura 1 (añadiendo complejidad con las relaciones
entre individuos y poblaciones) se va colectando
información acerca del ecosistema de interés. Para
estudiar a la simbiosis micorrízica arbuscular a
través de escalas, Johnson (2010) y Johnson et al.
(2006) proponen una serie de elementos que son
relevantes de registrar. En los siguientes párrafos se
14
EstratEgias dE Estudio dE la intEracción micorrÍzica arbuscular En los manglarEs y aproximación
a la pErspEctiva dE Escalas - thai Khan ramÍrEz-viga
parte de ellos para establecer un panorama general
del estudio de dicha simbiosis en los manglares:
(a) Caracterización del sistema en cuanto a la identidad de
los simbiontes
La mayoría de los estudios de campo en ecosistemas
de manglar registran la identidad de las plantas y de
los HMA asociados a sus rizósferas, es decir, los que
se hallan en la periferia de las raíces (Gopinathan,
Mahesh y Durgadevi, 2017; Gaonkar y Rodrigues,
2020; Ramírez-Viga et al., 2020 a, b; Martínez-
Hernández et al., 2021); sin embargo, aunque
potencialmente todas las especies de la rizósfera
podrían colonizar las raíces de la planta de interés,
no se tiene la certeza de cuáles están y cuáles no están
interactuando con ella al momento de la cosecha.
Dado lo anterior, algunos estudios han registrado
la identidad de los simbiontes que se encuentran
dentro de las raíces de especies vegetales que se
establecen en los manglares (Wang et al., 2011;
Wang et al., 2015; Deepika y Kothamasi, 2021).
Asimismo, ya se han comenzado a manejar algunas
especies fúngicas y vegetales en experimentos de
efectividad y dependencia micorrízica (Wang et al.,
2011; Xie et al., 2014; D’souza y Rodrigues, 2017).
(b) Caracterización nutrimental
Esto implica la caracterización del ambiente
edco, incluyendo la proporción C:N:P en los
tejidos y metabolismos de los organismos. De
acuerdo con Johnson et al. (2006), esta proporción
puede ser una variable de respuesta poderosa para
elucidar las dinmicas de relaciones interespeccas
y procesos ecosistémicos. La información de las
proporciones C:N:P en los humedales es muy escasa
(Wigand y Stevenson, 1994). Diseñar estudios
donde se exploren tales proporciones y contrastar
la información resultante con los modelos
estequiométricos existentes, representaría un paso
importante en la búsqueda de entendimiento del
papel de la micorriza en los sistemas de manglar.
(c) Identicación de factores bióticos y abióticos (además de
los nutrimentos) que afectan los resultados de la simbiosis
Para las plantas de humedal, la fertilidad del suelo,
la inundación, la salinidad y la fenología pueden ser
las variables más relevantes en cuanto a su efecto
sobre los resultados de la simbiosis. Ipsilantis y
Sylvia (2007), por ejemplo, encontraron que el
impacto de la asociación en las plantas de humedal
es una función de las interacciones complejas
entre los ensamblajes de especies de HMA, las
especies de plantas y las condiciones hidrológicas.
La caracterización del medio abiótico en el que
se desenvuelve la micorriza arbuscular en los
manglares, ha sido una tarea ampliamente abordada
por diversos investigadores (Gopinathan, Mahesh
y Durgadevi, 2017; Ramalho et al., 2017; Ramírez-
Viga et al., 2020a; Gaonkar y Rodrigues, 2020)
y representa la base para el diseño de estudios
experimentales.
(d) Encontrar el sentido de las interacciones entre individuos
y poblaciones cuando existe un efecto de la micorriza
Con respecto a esto, saber qué tan dependientes
son las especies de humedal seguramente dará una
primera idea de qué tanto impacto puede tener
la micorriza a nivel poblacional y comunidad. La
reciprocidad entre especies genera interdependencia
de las poblaciones de plantas y de hongos, y tiene
15
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
consecuencias importantes en las dinámicas de
comunidad y coevolutivas (Johnson et al., 2006).
Algunos estudios en humedales ya han abordado
el efecto de la simbiosis a nivel comunidad. Eberl
(2011) en un humedal de California encontró que
las asociaciones micorrzicas pueden inuenciar
la producción de biomasa en plantas invasoras
del género Spartina y esto puede contribuir a un
éxito de invasión incrementado. Tang et al. (2009)
reportaron que la estimulación de la micorriza con
CO
2
puede impactar la interacción competitiva de
pastos C4 con plantas de arroz C3. En los manglares,
el estudio de Deepika y Kothamasi (2021) reporta
que la identidad de las plantas hospederas posee un
papel principal en la formación de las comunidades
de HMA.
(e) Identicación del impacto de la micorriza a nivel
ecosistémico
Por ejemplo, la cantidad de biomasa fúngica (intra y
extrarradical) en los humedales para estimar qué tan
extensas son sus redes y si son equiparablemente
importantes como reservorios de carbono a lo
que son en los ecosistemas terrestres, o estimar
su función en la estructura de los suelos de los
manglares que pueden poseer pocas partículas de
adhesión (Aguilera, 1989). En los manglares ya
se ha comenzado a estudiar la contribución de la
glomalina a las reservas de nitrógeno y carbono del
sustrato (Wang et al., 2018; Tian et al., 2020).
Los modelos de cadenas trócas pueden
ayudar a relacionar las interacciones nutrimentales
entre las plantas y los hongos micorrizógenos con
las interacciones entre otros organismos (Johnson et
al., 2006). Estas relaciones podrían incluir parásitos
y patógenos, herbvoros, bacterias benécas,
artrópodos que oxigenan el suelo en los manglares,
etcétera. En los manglares, el estudio de Yu et al.
(2021) podría considerarse una aproximación a esta
perspectiva, sugiriendo una cooperación positiva
de los HMA con diazótrofos, misma que podría
promover la eciencia de jación de N en estos
ecosistemas.
Incorporar las dinmicas de las redes trócas
en los modelos a nivel población y comunidad
puede mejorar la habilidad de los investigadores
y manejadores para predecir los resultados de las
interacciones entre especies. Esto es importante
para el uso de la micorriza en los escenarios de
restauración, porque muchos tipos de disturbio
afectan la disponibilidad de nutrientes y la estructura
de la comunidad del suelo (Johnson et al., 2006);
por ejemplo, Wang et al. (2014) encontraron que
la descarga de aguas residuales puede reducir
los potenciales benecios de los HMA en los
ecosistemas de manglar.
Existe un gran sesgo de información con
respecto a los estudios de tipo experimental para
las especies arbóreas de humedal y particularmente
de manglar. La escasez de trabajos experimentales
probablemente se debe a la complicación
logística de establecer experimentos con distintos
tratamientos de fertilidad, inundación o salinidad
durante un periodo largo de tiempo para obtener
patrones claros, sin embargo, en el caso de las
especies que se manejan para reforestación, el
estudio podría acotarse al tiempo en el que las
plántulas son introducidas al campo. Por otro lado,
se han reportado efectos positivos de la asociación
en especies arbóreas de manglar ya a los dos meses
de vida (Wang et al., 2010), por lo que estudios de
al menos seis meses posiblemente seran sucientes
para obtener información útil.
16
EstratEgias dE Estudio dE la intEracción micorrÍzica arbuscular En los manglarEs y aproximación
a la pErspEctiva dE Escalas - thai Khan ramÍrEz-viga
CONCLUSIÓN
El registro de la efectividad de los hongos
micorrizógenos arbusculares y la dependencia de las
especies vegetales de manglar a la asociación con los
mismos, así como la conceptualización del estudio
de dicha asociación bajo la perspectiva de escalas,
resultan fundamentales para la comprensión de su
funcionamiento e impacto en estos ecosistemas.
En los manglares tales estudios son aún muy
escasos y en México no se ha publicado ninguno
de dependencia micorrízica ni de efectividad a la
fecha.
En los humedales, el estudio de la micorriza
arbuscular comienza a ofrecer una perspectiva a
diferentes escalas de organización, pero en caso
de los manglares, siendo aún la investigación
exploratoria en muchas áreas, el panorama se centra
en la caracterización de los simbiontes, y el registro
del porcentaje de colonización y la densidad de
esporas bajo las condiciones ambientales en campo.
Los estudios a niveles más altos de organización
son recientes y escasos, por lo que se requiere
incrementar la complejidad en el estudio de la
micorriza de los manglares y siendo estos un tipo
de humedal, bien se podría partir de los patrones
registrados en otros humedales con características
similares para el diseño de los estudios.
Agradecimientos
A la Dra. María Patricia Guadarrama Chávez, por
su revisión al artículo y valiosas sugerencias.
Al Dr. Francisco Xavier Chiappa Carrara, a la
Dra. María Patricia Guadarrama Chávez, a la Dra.
Silvia Castillo Argüero y al Dr. José Alberto Ramos
Zapata, pues bajo su tutela se desarrolló parte de
esta investigación.
Dr. Jorge Alejandro López Portillo Guzmán,
la Dra. Silvia Castillo Argüero, la Dra. Sara Lucía
Camargo Ricalde, el Dr. Guillermo Pedro Ángeles
Álvarez y el Dr. Francisco Javier Álvarez Sánchez,
quienes, en función de sinodales de candidatura
al grado de doctora en ciencias, sugirieron la
perspectiva tomada como directriz en la presente
investigación.
Al Posgrado en Ciencias Biológicas de la
Universidad Nacional Autónoma de México, ya
que dentro de las actividades establecidas en el
programa se realizó parte de la investigación para
este artículo.
Al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología
por la beca otorgada durante los estudios de
posgrado en la institución antes nombrada.
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Universciencia
ISSN: 1665-6830
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 2.0 Genérica (CC BY-NC-ND 2.0)
https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.0/deed.es
reconociendo el acoso sexual callejero como violencia de género
hacia la mujer en méxico 2021
recognizing street sexual harassment as gender-based violence
against Women in mexico 2021
josé guadalupe
loera camacho
1
diana alejandra
canul rosado
2
Resumen
El propósito de esta investigación es la recopilación de los datos que las mujeres
ofrecieron con respecto al tema del Acoso Sexual Callejero (ASC), situación que
viven rutinariamente en las calles, para poder determinar si esto es considerado un
acto de agresión o no para ellas. El ASC es una interacción que se da entre dos o
más personas desconocidas en un espacio público, sin embargo, dentro del contexto
cultural de México, esto se ejerce continuamente en las calles de cada ciudad sin
excepción y se ha ido normalizando como parte del mismo acervo cultural. Esta
investigación empleó el tipo de investigación: descriptivo-correlacional, con diseño
ex post-facto, el instrumento de recolección de datos consistió en la aplicación de
un cuestionario a una muestra de 65 mujeres en la ciudad de Cancún, Quintana
Roo, México de diferentes edades, ocupaciones y en general, con características muy
diversas. Asimismo, de que las mujeres dieron su opinión sobre un tema tan complejo,
podría decirse que para algunas de ellas la entrevista funcionó como una forma de ser
escuchadas o así en contraparte, para mostrar su desacuerdo con este tema.
Palabras clave: abuso sexual, violencia de género, violencia.
Abstract
The purpose of this research is to collect the data that some women offered regarding
the issue of the Street Sexual Harassment (SSH), a situation they experience with
frecuency on the streets, in order to determine if this is considered dan act of
aggression or not for them. The SSH is an interaction which occurs between two or
more unknown people in some public spaces; however, within the cultural context of
Mexico, this is continuously exercised in the streets of each city with no exceptions
and has been normalized a part pf it (cultural heritage). For this research, we used
the descriptive-correlational research type, with the ex-post-factor design, the data
collection instrumental consisted for application of a questionnaire to a sample of 65
women in Cancun City, Quintana Roo, Mexico from different ages, occupations and
in general, with any diverse characteristics. In addition to the fact that women gave
their opinion on such a complex issue, it could be said that for some of them, the
interview worked as a way of being listened to or thus in counterpart, to show their
disagreement with this problem.
Key words: sexual harassment, gender violence, violence.
Universciencia
Enero-abril - Año 20 - Núm. 59 - 2022
http://revista.soyuo.mx/index.php/uc
universcienciasoyuo.mx
universciencia@soyuo.mx
Recepción: enero-2022
Aceptación: febrero-2022
Pág. 25-44
1
Universidad de Oriente-Cancún. Estudiante
de Licenciatura. Quintana Roo, México.
E-mail: jloeracamacho@gmail.com ORCID:
https://orcid.org/0000-0002-6239-7870
Google Scholar: https://scholar.google.es/
citations?view_op=new_prole&hl=es
2
Universidad de Oriente-Cancún. Estudiante
de Licenciatura. Quintana Roo, México. E-mail:
alejandrac_rosado@gmail.com ORCID:
https://orcid.org/0000-0002-6239-7870
Google Scholar: https://scholar.google.es/
citations?hl=es&user=Z-mQnz4AAAAJ
25
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
INTRODUCCIÓN
3
El fenómeno del acoso sexual callejero ha ido
tomando importancia recientemente conforme al
incremento de las personas que lo han padecido y lo
han expuesto principalmente en redes sociales, de
igual forma, hay opiniones que niegan lo anterior,
por lo que inevitablemente se ha vuelto un tópico
en controversia en los últimos años. Si bien, aunque
la señalización de este tipo de violencia no ha
tenido la fuera suciente, no signica que no haya
estado presente desde hace tiempo, puesto que para
muchas mujeres esto es algo que ha permanecido
siempre, y para algunas otras esto ha sido parte
del juego de atracción o seducción a manera de
halagos, cumplidos, etcétera. En el contexto de
la población mexicana, se ha podido observar el
escaso conocimiento que se tiene acerca del tema,
puesto que no se cuenta con las sucientes bases de
datos o estadísticas registradas sobre los incidentes
de acoso sexual en espacios públicos, creando el
contraste al compararlo con la creciente incidencia
de las anécdotas que se han dado a conocer, en su
mayoría, a través de sitios web, redes sociales y otros
grupos de apoyo que permiten la total libertad de
expresión para las mujeres.
Por ello, la presente investigación tuvo por
objetivo conocer ampliamente las implicaciones
del acoso sexual callejero, conceptualizándolo
mediante la descripción de las interacciones
y conductas que son componentes de esta y
analizándola desde una postura de género, ya que
la muestra estuvo solo conformada por mujeres.
De esta manera, existiendo antecedentes y respaldo
cientco, se espera la expansión de la información
sobre este tema y sus características a grandes
rasgos; sirviendo como preámbulo para la creación
o reforzamiento de programas de prevención e
intervención por parte de las organizaciones en
México, que se dedican al amplio trabajo sobre la
violencia sexual y de género.
La violencia como componente de los roles de dominio en la
sociedad
La violencia es un tópico que ha sido estudiado desde
hace décadas con la intención de crear y englobar
un concepto que pueda facilitar su estudio, lo que
ha resultado una tarea bastante complicada, puesto
que hay deniciones que parecen quedarse cortas.
Es a partir de esta idea, que se decide la creación de
nuevas ramicaciones relacionadas a la violencia,
que presentan características en común, pero a su
vez, cuentan con detalles únicos que las distinguen
de entre otros y que exigen la atención desde la
clasicación adecuada; tales como: la violencia de
tipo psicológica, física, sexual, patrimonial, por
decir algunas. Pero antes de nombrarles, se tiene
que estar consciente de su existencia y, asimismo,
reconocer la ocurrencia del fenómeno, sus rasgos
únicos y comenzar a contemplarlo como objeto de
estudio.
La historia de la violencia proviene de un
origen casi imposible de determinar, ya que se
debe partir desde el momento en el que esta se
ha considerado como tal, existiendo desde antes
de haber sido conceptualizada siquiera, por lo
que escarbar en la violencia hacia la mujer es aún
más complicado, puesto que tiene relación directa
con la percepción de la mujer en la sociedad, los
roles que le han sido asignados con el paso del
tiempo y cómo ha ido ocurriendo el cambio de la
no normalización de la violencia al ir resaltando
la importancia de los derechos de las mujeres y el
cuestionamiento de los roles mencionados.
3
Artículo original y derivado del proyecto de investigación titulado:
Reconociendo el Acoso Sexual Callejero como Violencia de Género
hacia la Mujer en México 2021, Quinta Roo, México.
26
Reconociendo el Acoso sexuAl cAllejeRo como ViolenciA de GéneRo hAciA lA mujeR en méxico 2021 -
josé GuAdAlupe loeRA cAmAcho, diAnA AlejAndRA cAnul RosAdo y jAime montAlVo ReynA
En una entrevista hecha a Michelle Perrot en
la revista Label France (como se citó en González,
2008), no dudó en señalar que existía un terreno
todavía poco explorado, que era el de la “violencia
contra el cuerpo de las mujeres -el cuerpo violado,
violentado, utilizado, explotado- que está escondido
por el pudor tradicional y por consiguiente por el
rechazo de las mujeres que se sienten culpables”
(p. 19). Es decir, hasta apenas el siglo XX con el
nacimiento formal del feminismo, de pensadores
y activistas, es que se empieza a considerar
como importante la atención de la violencia
hacia las mujeres, resaltando primeramente, el
cuestionamiento de las tradiciones y creencias
sociales en el que se exponía la idea de que la forma
de vida que las mujeres estaban viviendo no tenía
por qué ser así necesariamente, puesto que producía
malestar y al ser un problema como muchos otros,
seguro también habría una solución.
Ahora bien, la violencia se ha mantenido
presente debido a la arraigada creencia del dominio
que ha existido entre los mismos seres humanos,
del sometimiento de un sujeto a otro, algo que se
ha visto a lo largo de la historia, como en las guerras
entre diversas civilizaciones enemigas para imponer
ideologías políticas, religiosas, sociales, económicas
o simplemente ocupar territorios, por lo que se
puede deducir que la violencia no es algo que nace
exclusivamente con el propósito de sobrevivir, sino
que es algo que se aprende a través de las enseñanzas
culturales (González, 2008). En México, donde se
aterriza la investigación realizada, es importante
resaltar que el sistema hegemónico que ha regido
en el país por muchos años ha propiciado que la
violencia hacia la mujer sea puesta en práctica con
bastante incidencia, dejando implícita la idea de
que esto es normal, minimizando o ignorando que
existan consecuencias negativas en las
víctimas, ya que es una ideología que ilustra a la
perfección el punto explicado.
De igual forma, resulta importante destacar
la clara inuencia que ejerce la cultura en la que
se desarrolla la sociedad para la formación de
cada hombre y mujer que residen en ella. En este
sentido, la enseñanza es la principal transmisora
de los valores y principios individuales, estos se
van adquiriendo de generación en generación,
no solamente por medio de la educación formal,
sino también mediante la enseñanza que las
familias y los padres inculcan en casa, así como las
expectativas que depositan en sus hijos de acuerdo
a su sexo, asumiendo su género, sentando las bases
de posteriores juicios sobre sus roles.
De esta forma surge una clara diferenciación:
mientras que el sexo es una categoría
biológica, con el concepto de género se hace
referencia a la construcción social del hecho
de ser hombre o mujer, las expectativas y
valores, la interrelación entre hombres y
mujeres y las diferentes relaciones de poder
y subordinación existentes entre ellos en una
sociedad determinada. (Arellano; citado en
Aguilar et al., 2013, p. 209)
Así, al asumir que sexo y género son dos conceptos
igualitarios se establecen las normas e ideas
generalizadas para cada sexo; es decir, se construyen
las identidades de género, y esta es la causa de
que a un hombre se le atribuyen expresiones
comportamentales y pensamientos con respecto a
un estereotipo, creando los roles de género, que se
enseñan de generación en generación y se adaptan
a las nuevas normalidades que se establecen en la
sociedad.
27
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
La violencia de género contra la mujer y sus bases culturales
Hay varias teorías en relación a las causas de la
violencia hacia la mujer, algunas mencionan la
normalización social de los roles y estereotipos de
ambos sexos que, en conjunto con la estructura de
una ideología desigual, inclina la balanza hacia un
solo lado. Se considera que esta estructura o sistema
de pensamiento ha permanecido durante décadas y
ha contribuido en gran medida para mantener el
círculo violento en la que se ha envuelto la mujer
mexicana.
La concepción de la masculinidad se
convierte en otro factor importante dentro de la
construcción social de los papeles asignados, por
ejemplo, la idea de la jerarquía de poder dominante
cayendo sobre el género masculino en una familia
y, por lo tanto, este se convierte en el que toma
las decisiones importantes. Así, al ser un jerarca, es
dueño de ciertos privilegios a los cuales la mujer
no tendría acceso, como la distribución de las
tareas domésticas que en gran porcentaje aún son
responsabilidad de las mujeres, la crianza de los hijos,
la oportunidad de inltrarse en el mbito laboral,
por decir algunos. Con estos ejemplos, no se hace
una aseveración de forma generalizada en relación
a que todas las familias mantengan esta dinámica;
sin embargo, el paradigma de pensamiento muestra
que aún existen condiciones y desigualdades en
cuestión de género, tanto familiares, laborales, así
como sociales; quizás no antepuestos por una ley
porque esta misma se ha abierto a las necesidades
de las mujeres, pero s se encuentran reejados en
las estadísticas de mujeres que han sido víctimas
de algún acto de agresión o maltrato por parte de
algún hombre, sea familiar o desconocido.
Asimismo, hay que considerar que la
perspectiva de género ha cambiado con el paso
del tiempo, beneciando a los grupos menos
favorecidos, es decir, se ha ido adecuando a las
necesidades sociales y adaptando las características
paradigmáticas sobresalientes en cada época, y
así como ha ido cambiando hasta ahora, también
podría continuar haciéndolo con el transcurso del
tiempo mediante la apertura del sistema de creencias
sociales de lo que se construye y se aprende, por
lo que muy posiblemente pueda ser desaprendido,
refutado o modicado.
En resumen, la violencia de género es un
fenómeno social y cultural que se ha estudiado
a profundidad recientemente; sin embargo, es
un hecho que afecta a las mujeres día a día. Es
necesario tener en claro las implicaciones de este
tipo de violencia para ser utilizada como objeto de
estudio de las ciencias sociales y psicológicas que
giran alrededor de esto. Para denirlo en palabras
concretas, Huacruz (2011) como se citó en Barreto,
M. (2017), menciona: “La violencia de género se
puede denir como el ejercicio excesivo de fuerza
que produce daño a quien la recibe y se expresa
en el marco de las relaciones asimétricas de poder
entre hombres y mujeres” (p.262); es entonces una
relación de poder basado en los estereotipos y roles
previamente establecidos cultural y socialmente.
El acoso sexual callejero como objeto de estudio
En los últimos años se ha profundizado respecto
a la necesidad de abordar el acoso sexual callejero
como un fenómeno social, el cual las mujeres son
quienes más externan haberlo vivido. En el artículo
titulado “¡Tu ‘piropo’ me violenta! Hacia una
28
Reconociendo el Acoso sexuAl cAllejeRo como ViolenciA de GéneRo hAciA lA mujeR en méxico 2021 -
josé GuAdAlupe loeRA cAmAcho, diAnA AlejAndRA cAnul RosAdo y jAime montAlVo ReynA
De igual forma, es importante abarcar como
retomar la implicación de los espacios públicos
es importante, puesto que, en la gran mayoría de
las mujeres es necesario tomar precauciones cada
día para poder transitar libremente por las calles o
quizás para no tomar ciertos rumbos. En el artículo
titulado “El espacio público como territorio
sexuado: el caso del acoso callejero desde un
enfoque de género” (Martín, 2014), la autora se da a
la tarea de hacer un análisis de los espacios públicos,
el sentido de territorio y la corporeidad como una
problemática en conjunto que ha facilitado que
esta interacción se propicie y lo asocia a una forma
de ejercer violencia de género. El espacio público
adquiere complejidad, debido que ahí se generan
diversas conductas derivadas de cada una de las
personalidades individuales que deambulan en el
día a día; sin embargo, el espacio público no es un
lugar enteramente material, es el simbolismo de la
comunicación y la forma de relacionarse con otros,
de la expresión de cada integrante de la sociedad.
El postulado del cual parte este trabajo menciona
que las mujeres han sido marginalizadas del espacio
público.
Acciones en el mundo y en Mxico
Un gran paso para comenzar a hacer cambios a
nivel estructural sobre la violencia de género, tiene
que ver con las manifestaciones de activistas a
favor del feminismo. Se alcanza a estimar que este
movimiento a favor de las mujeres tuvo sus inicios
entre los años cincuenta y sesenta del siglo XX, e
incluso a veces se menciona que fueron siglos atrás;
sin embargo, no fue sino hasta principios de los
años noventa cuando México y el resto de América
Latina se comprometieron con las mujeres a
denición de acoso sexual callejero como forma
de violencia de género” (Arancibia, et al, 2017),
los autores se proponen la meta de denir esta
interacción como un tipo de violencia y maximizar
el efecto que produce en las mujeres. En dicho
proceso se concentran cinco aspectos analíticos
fundamentales para poder denir el acoso sexual
callejero: la connotación sexual, la interacción
entre desconocidos, la ocurrencia en un espacio
público, el potencial de generar malestar y la
unidireccionalidad de la dinámica.
Estos cinco aspectos analíticos se tomaron
en cuenta para lograr hacer un encuadre del acoso
sexual callejero del presente estudio y así integrarlo
en un contexto cientco y, por consiguiente,
promover la iniciativa de la investigación de sus
causas, consecuencias y efectos a nivel individual
y social.
No se puede pasar por alto el hecho de que
el acoso puede interpretarse de manera subjetiva,
de acuerdo a cómo lo percibe cada mujer y al nivel
de gravedad que representa para cada una de ellas,
puesto que la propuesta que se hace es que podría
haber mujeres que discriminan ciertas conductas
de esta interacción y no las consideran como tal,
a pesar de que sea evidente para otras. En un
estudio realizado por Llerena (2016) en estudiantes
mujeres de una universidad privada de medicina,
se determinaron las percepciones y actitudes que
estas tenían frente al acoso sexual callejero, para
ello, se utilizaron diversos cuestionarios, dos tipos
de escalas: acerca de los mitos sobre la agresión
sexual y el acoso callejero para medir la prevalencia
de este último; y el nivel de aceptación de dichos
mitos. Los resultados arrojaron que el 91% de las
mujeres armaron haber sido acosadas al menos
una vez al año, lo que es considerado un porcentaje
bastante alto.
29
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
Esta autora arma que el acoso sexual callejero
permanece debido a la impunidad y complicidad
de ciertas autoridades en diversas instituciones.
Es así como la violencia de género es algo que no
se ha dejado atrás. En una sociedad cada vez más
desarrollada y competitiva, las mujeres aún cargan
con ciertas condicionantes que las limitan. La
violencia dirigida de hombres hacia mujeres, ya sea
en situación de pareja o en un ámbito general, sigue
siendo una manera de dominio que perjudica a la
mujer actualmente.
Uno de los países pioneros en aprobar una
ley contra el acoso sexual callejero, aunque no
se estableciera como tal bajo este concepto, fue
Nueva Zelanda en 1981, castigando a toda aquella
persona que intimide u hostigue a otra en una vía
pública. Desde esa fecha no se había realizado
ninguna otra acción legal contra este tipo de
violencia hasta el 2014, en el país de Bélgica; de ahí
en adelante, países como Francia, Portugal, Reino
Unido y Holanda le siguieron el paso. En América
Latina se pueden mencionar como pioneros a Perú,
Argentina y Costa Rica, todos ellos han procurado
implementar multas y castigos para estos delitos
que han ido creciendo. En México, a pesar de
que ya existen ciudades donde han comenzado a
querer erradicar estas conductas que afectan a la
población femenina, en la mayor parte de ellas
siguen quedando impunes los agresores, alentando
de una u otra manera a continuar perpetrando a las
víctimas, debido a que tienen el conocimiento de
que no obtendrán castigo alguno.
DESARROLLO
Planteamiento del problema: se presupone que el
acoso sexual callejero (ASC) es un acto de violencia
hacer valer sus derechos y tomar acción respecto
a situaciones que amenazaban su integridad física
y moral. Con la creación de instituciones como el
Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES)
en 2001 se comienza a promover el trabajo para la
erradicación de la violencia por parte del gobierno
mexicano, así como disminuir la discriminación y
la búsqueda de la equidad y la igualdad de género.
Debido a la gran utilidad de la Encuesta
Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones
en los Hogares ([ENDIREH], 2003) que realiza
en INEGI (2004), y una vez evaluada como
proyecto estadístico, se decidió llevar a cabo otro
levantamiento de datos en 2006, que incluyó otras
formas de violencia hacia las mujeres, tanto en lo
familiar como en ámbitos distintos al doméstico
(donde se incluían la parte laboral, escolar, centros de
esparcimiento, sitios de reunión, calles en general),
por ende, también contempló agresores distintos al
cónyuge (INEGI, 2015). Gracias a estudios como
el mencionado, se ha podido sustentar información
importante que sirve para dar a conocer la violencia
de género en formas y lugares que anteriormente no
eran percibidos y, a su vez, ayudar a crear iniciativas
o programas para la población más afectada. Según
el INEGI (2015): “En el Estado de Quintana Roo
se registra que al menos 153 010 mujeres sufren
alguna clase de violencia en la calle, cines, escuelas,
deportivos, transportes y lugares de trabajo” (p. 49),
lo que muestra un índice alto de mujeres que han
padecido algún tipo de violencia en algún espacio
público.
González, R. (2013) citada en Barreto, M.
(2017) menciona: “Algunas investigaciones sobre
violencia de género en los centros de educación
superior mexicanos, consideran que el silencio
institucional es el principal problema” (p. 265).
30
Reconociendo el Acoso sexuAl cAllejeRo como ViolenciA de GéneRo hAciA lA mujeR en méxico 2021 -
josé GuAdAlupe loeRA cAmAcho, diAnA AlejAndRA cAnul RosAdo y jAime montAlVo ReynA
Objetivos especcos
Identicar las conductas asociadas al acoso
sexual callejero.
• Analizar la categorización del acoso sexual
callejero como violencia de género.
Relacionar la cosicación sexual de la mujer
como causa del acoso sexual callejero.
El acoso sexual callejero es un concepto que
engloba una serie de acciones no consensuadas,
el cual incluye en particular las nalgadas, besos
sin consentimiento, tocamiento de partes íntimas,
frotación de genitales, fotografías, persecuciones,
exhibicionismo, silbidos, masturbación frente a
otra persona, miradas jas por ms de 20 segundos,
propuestas de acto sexual y piropos, proviniendo de
una interacción entre desconocidos en un espacio
público, dirigido hacia una o varias mujeres.
Muestra: accidental no probabilística a 65
mujeres de la ciudad de Cancún, Quintana Roo,
México.
Escenario: calles, plazas, estaciones de
autobús y otros espacios públicos de Cancún.
Materiales e instrumentos: cuestionario
para determinar el acoso sexual callejero. Datos
generales de la encuestada, listado de conductas,
escala de frecuencia, Escala de Acoso cuantitativa
(0 al 10) y apartado con testimonios voluntarios de
encuestadas.
Variables: edad, escolaridad, ocupación de
las encuestadas, acoso sexual callejero, violencia
de género, 12 conductas de acoso sexual callejero
deliberado, debido que atenta con el espacio
personal y el bienestar de las mujeres en los espacios
públicos, por lo que se ven delimitadas en los
espacios públicos, atacadas y cosicadas; de ah el
enfoque de género. Por consiguiente, se elaboraron
las siguientes preguntas de investigación: ¿qué es
el acoso sexual callejero (ASC)?, ¿qué conductas
son consideradas por las mujeres como ASC? ¿qué
tan común se da este tipo de interacción hacia las
mujeres? ¿existen mujeres que no consideran el
ASC como violencia de género? ¿qué características
en común tienen estas mujeres que sí reconocen
esta dinámica cómo violencia?
Tipo de investigación: descriptivo-
correlacional.
Diseño de investigación: ex post-facto, no se
tiene el control sobre las variables, además de
observar el fenómeno después de ocurrido
por medio del cuestionario. El propósito del
uso de un cuestionario para esta investigación
servirá como instrumento estandarizado,
para denir el término buscado y dar una
descripción clara de la idea que se planteó al
iniciar esta investigación.
Objetivo general
Reconocer las implicaciones del acoso sexual
callejero como parte de la violencia de género en el
marco de convivencia de la sociedad en Quintana
Roo, México.
31
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
Para esta investigación se denió un enfoque
cuantitativo debido a que se hizo un muestreo
utilizando porcentajes y estadísticas para indagar
en el tema y correlacionar las variables; además, la
cuestión planteada requiere una denición concreta
del tema del acoso sexual callejero por parte de las
propias mujeres que han experimentado esto.
RESULTADOS
De las 65 mujeres encuestadas: 46 de ellas rondaban
entre los 17 y 25 años de edad (70.7%), 12 de ellas
se encontraban entre los 26 y 39 años (18.4%) y
siete entre los 40 y 54 años (10.7%) (ver Grca
1). En el cuadro 1 es posible ver la escolaridad de
las encuestadas: nueve de ellas habían estudiado
hasta la secundaria (13.8%), 29 hasta el nivel
preparatoria (44.6%), y el 27 restante la licenciatura
o posgrado (41.5%). Dentro de las profesiones
mencionadas, 54 de ellas mencionaron tener un
empleo formal, que variaba desde vendedoras para
tiendas departamentales, recepcionistas, cajeras,
una artesana, una técnica en uñas y estilismo,
incluso una encargada de una tienda “sex-shop”.
Además, de las 54 mujeres, 13 de ellas trabajaban
como profesionistas: una química clínica, una
médica cirujano, una chef, una más laborando
en el departamento de recursos humanos de una
empresa, una guía de turistas, una nutrióloga,
una Licenciada en Finanzas, una enfermera,
una dentista, una contadora y tres gerentes
de empresas; 8 más de las encuestadas eran
estudiantes y las tres restantes eran amas de casa.
(nalgadas, besos no consensuados, tocamiento de
partes íntimas, frotación de genitales, fotografías,
persecuciones, exhibicionismo, silbidos,
masturbación frente a la vctima, miradas jas
por más de 20 segundos, propuestas de acto
sexual y piropos), pregunta para determinar si
son consideradas o no como acoso las conductas
anteriores, escala sobre la frecuencia de ocurrencia
del acoso, Escala de Acoso, zonas urbanas de
ocurrencia del acoso.
Procedimiento: las encuestas levantando
datos con mujeres de distintas edades, en lugares
públicos de los alrededores de la ciudad de Cancún
(plazas públicas, parques, estaciones de autobús,
centros comerciales, avenidas principales, etcétera).
En primera instancia se recolectaron datos
generales incluyendo edad, escolaridad, ocupación
y zona de residencia. Las conductas que se eligieron
fueron las 12 mencionadas anteriormente. A cada
encuestada se le preguntaba si consideraba cada una
de estas acciones como acoso, a lo que cada una
daba su respuesta (“Sí” o “No”). Seguidamente,
se les preguntó a las participantes si alguna vez les
había ocurrido algo de lo enlistado, y se enumeraba
en rangos variando desde ninguna, de 1 a 3 veces,
4 a 6 veces, 7 a 10 veces y más de 10 de veces.
Posteriormente se les preguntaba sobre los tres
lugares, espacios o zonas de Cancún donde les haya
pasado alguna experiencia acorde. Para continuar
se aplicó una Escala de Acoso (del 0 al 10), en
donde cada encuestada tendría que responder de
manera subjetiva (siendo 0 muy poco o inexistente
y 10 demasiado) qué tan acosadas se habían sentido
el último año y, para nalizar el cuestionario, se
les pidió de manera opcional a las encuestadas
si deseaban compartir un testimonio de alguna
circunstancia que hayan vivido relacionada al acoso.
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josé GuAdAlupe loeRA cAmAcho, diAnA AlejAndRA cAnul RosAdo y jAime montAlVo ReynA
orden; sin embargo, este número resultaba
proporcionalmente bajo al de las mujeres que
opinaron lo contrario.
Cuadro 2. Conductas y total de mujeres que
las consideran acoso (ordenadas
de mayor a menor)
Conductas Sí es No es
acoso
Nalgadas 65 0
Tocamiento de partes íntimas 65 0
Frotación de genitales 65 0
Besos sin consentimiento 64 1
Fotografías sin consentimiento 64 1
Persecuciones 64 1
Masturbarse frente a ti 64 1
Propuesta de acto sexual 62 3
Exhibicionismo 62 3
Miradas jas (20 segundos o ms) 57 8
Silbidos 54 11
Piropos 49 19
Fuente: elaboración propia.
En cuanto a la experiencia individual por conducta
(ver Cuadros 3 y 4), se observa que, a pesar de
lo mencionado anteriormente, los silbidos, los
piropos y las miradas son de hecho las interacciones
que más han padecido las encuestadas, seguido
de la frotación de genitales y el exhibicionismo
como cuarto y quinto lugar respectivamente; en
caso contrario, los besos no consensuados y el
tocamiento de partes íntimas como las que menos
frecuencia tuvieron en las encuestadas.
Gráca 1. Categoría por edades de las
encuestadas
Fuente: elaboración propia.
Cuadro 1. Escolaridad de las encuestadas
Escolaridad Total Porcentaje
Secundaria 9 13.8%
Preparatoria 29 44.6%
Licenciatura o postgrado 27 41.5%
Fuente: elaboración propia.
Se hizo el conteo total de las 65 encuestadas,
sumando cada una de las respuestas de las mujeres
y las conductas, para determinar cuáles de estas
se consideraban como acoso y cuáles no (ver
Cuadro 2). Los resultados reejan que las nalgadas,
el tocamiento de partes íntimas y la frotación de
genitales contra el cuerpo de la víctima, fueron
las conductas que sin lugar a duda son consideras
por todas como acoso sexual callejero; en caso
contrario, los piropos, los silbidos y las miradas
fueron las menos citadas como acoso en ese
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universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
Cuadro 4. Conductas que más han padecido
las encuestadas en números (mayor a menor)
Conducta Sí les ha
pasado
No les ha
pasado
Silbidos 57 8
Piropos 51 14
Miradas jas (20 segundos o
más)
49 16
Frotación de genitales 41 24
Exhibicionismo 40 25
Persecuciones 37 28
Propuestas de acto sexual 27 38
Nalgadas 26 39
Fotografías sin consentimiento 22 43
Masturbación frente a ti 20 45
Tocamiento de partes íntimas 12 53
Besos sin consentimiento 6 59
Fuente: elaboración propia.
Cuadro 3. Conductas que más han padecido
las encuestadas (de mayor a menor)
Conducta Sí les ha
pasado
No les ha
pasado
Silbidos 88% 12%
Piropos 78% 22%
Miradas jas (20 segundos o
más)
75% 25%
Frotación de genitales 63% 37%
Exhibicionismo 61% 39%
Persecuciones 57% 43%
Propuestas de acto sexual 41% 59%
Nalgadas 40% 60%
Fotografías sin consentimiento 34% 66%
Masturbación frente a ti 30% 70%
Tocamiento de partes íntimas 15% 85%
Besos sin consentimiento 9% 91%
Fuente: elaboración propia.
Cuadro 5. Frecuencia de conductas ordenadas por cantidad de veces ocurridas
de forma individual
Frecuencia total Nunca les ha ocurrido 1-3 veces 4-6 veces 7-10 veces Más de 10 veces
Nalgadas 39 24 2 - -
Besos sin consentimiento 59 5 1 - -
Tocamiento de partes íntimas 53 9 1 - 2
Frotación de genitales 24 22 4 2 13
Fotografías sin consentimiento 43 19 3 - -
Persecuciones 26 27 10 - 2
Exhibicionismo 25 29 9 2 -
Silbidos 8 8 6 2 41
Masturbación frente a ti 45 20 - - -
Miradas jas (20 segundos o ms) 16 12 7 5 25
Propuestas de acto sexual 38 18 5 - 4
Piropos 14 5 5 5 36
Fuente: elaboración propia.
Ahora bien, por frecuencia en cada una de las
conductas reejados en el Cuadro 5, aparecen los
silbidos, los piropos y las miradas las que se han
experimentado más de 10 veces en general; sin
embargo, es interesante percatarse cómo cada
conducta fue considerada y ninguna pasó
inadvertida en gran parte de las mujeres encuestadas.
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Reconociendo el Acoso sexuAl cAllejeRo como ViolenciA de GéneRo hAciA lA mujeR en méxico 2021 -
josé GuAdAlupe loeRA cAmAcho, diAnA AlejAndRA cAnul RosAdo y jAime montAlVo ReynA
En los Cuadros 7, 8 y 9 se muestran los datos por
frecuencia de acoso por cada conducta, divididos
en los tres grupos mencionados: 17 a 25 años,
26 a 39 años y 40 a 54 años. En el primer grupo
(17 a 25 años), las conductas que más han vivido
son las miradas, los silbidos y los piropos, seguido
de las persecuciones; en el segundo grupo (26
a 39 años), las conductas que más frecuentes se
reportaron fueron las mismas que el primer grupo,
sumado además el exhibicionismo. Por último,
El Cuadro 6 se segmentó por rangos de edades
(ver Grca 1), para realizar a mayor profundidad
el análisis de los resultados obtenidos ahora con la
variable de edad. Se aprecia un dato signicativo: en
los rangos de edad de 40 a 54 años, las conductas
que han generado controversia como las miradas,
los silbidos y los piropos, los porcentajes parecen
igualarse o incluso rebasar las mujeres que sí
consideran estas conductas como acoso a las que
no, aspecto muy diferente en las mujeres con menor
rango de edad.
Cuadro 6. Sí y no lo consideran acoso divididos por rangos de edad
Conductas y clasicación
por edad
17-25 años
(sí es
acoso)
17-25 años
(no es
acoso)
26-39
años (sí
es acoso)
26-39
años (no
es acoso)
40-54 años
(no es
acoso)
40-54 años
(no es
acoso)
Nalgadas 46 0 11 1 7 0
Besos sin consentimiento 46 0 11 1 7 0
Tocamiento de partes íntimas 46 0 12 0 7 0
Frotación de genitales 45 1 12 0 7 0
Fotografías sin consentimiento 43 3 12 0 7 0
Persecuciones 46 0 12 0 6 1
Exhibicionismo 45 1 12 0 5 2
Silbidos 40 6 11 1 3 4
Masturbación frente a ti 46 0 12 0 6 1
Miradas jas (20 segundos o
más)
42 4 11 1 4 3
Propuestas de acto sexual 45 1 11 1 6 1
Piropos 35 11 9 3 3 4
Fuente: elaboración propia.
en el tercer grupo (40 a 54 años) se mencionaron
las mismas conductas que se mencionan en los
grupos anteriores, pero opciones como besos sin
consentimiento, persecuciones, exhibicionismo y
masturbación no se quedaron muy lejos. En general,
se resalta nuevamente la presencia de conductas
que, aunque pudieran ser menos tangibles que otras
de la misma lista, es probable que la escala de acoso
ayude a obtener una respuesta más clara.
35
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
Cuadro 7. Frecuencia de conductas de acoso ocurridas en el rango de edad de 17 a 25 años
Frecuencia 17-25 (46 total) 1 (ninguna vez
les ha pasado)
2 (1-3
veces)
3 (4-6
veces)
4 (7-10
veces)
5 (más de 10
veces)
Nalgadas 28 17 1 - -
Besos sin consentimiento 42 4 - - -
Tocamiento de partes íntimas 39 7 - - -
Frotación de genitales 19 13 3 2 9
Fotografías sin consentimiento 28 15 3 -
Persecuciones 18 20 8 - -
Exhibicionismo 19 20 5 2 -
Silbidos 5 4 3 2 32
Masturbación frente a ti 35 11 - - -
Miradas jas (20 segundos o ms) 7 10 6 4 19
Propuestas de acto sexual 25 14 5 - 2
Piropos 8 4 2 4 28
Fuente: elaboración propia.
Cuadro 8. Frecuencia de conductas de acoso ocurridas en el rango de edad de 26 a 39 años
Frecuencia 26-39 (12 total) 1 (ninguna vez les ha
pasado)
2 (1-3
veces)
3 (4-6
veces)
4 (7-10
veces)
5 (más de 10
veces)
Nalgadas 7 5 - - -
Besos sin consentimiento 11 - 1 - -
Tocamiento de partes íntimas 9 1 1 - 1
Frotación de genitales 4 5 1 - 2
Fotografías sin consentimiento 9 3 - - -
Persecuciones 8 2 1 - 1
Exhibicionismo 3 9 - - -
Silbidos 3 - 3 - 6
Masturbación frente a ti 9 3 - - -
Miradas jas (20 segundos o ms) 3 1 1 1 6
Propuestas de acto sexual 7 3 - - 2
Piropos 2 1 2 1 6
Fuente: elaboración propia.
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Cuadro 9. Frecuencia de conductas de acoso ocurridas en rango de edad de 40 a 54 años
Frecuencia 40-54 (7 total) 1 (ninguna vez les ha
pasado)
2 (1- 3
veces)
3 (4-6
veces)
4 (7-10
veces)
5 (más de 10
veces)
Nalgadas 4 2 1 - -
Besos sin consentimiento 6 1 - - -
Tocamiento de partes íntimas 5 1 - - 1
Frotación de genitales 1 4 - - 2
Fotografías sin consentimiento 6 1 - - -
Persecuciones 2 3 1 - 1
Exhibicionismo 2 1 4 - -
Silbidos 2 1 - - 4
Masturbación frente a ti 2 5 - - -
Miradas jas (20 segundos o ms) 4 1 - - 2
Propuestas de acto sexual 5 2 - - -
Piropos 4 - 1 - 2
Fuente: elaboración propia.
En la Grca 2 se muestra la Escala de Acoso, en
la que se realizó una subdivisión por número de
personas que mencionaron el nivel de acoso que
habían padecido el último año. El número que
más se mencionó fue 8, seguido de 7 y después 5.
A su vez, se concluyó un promedio general, cuyo
resultado total fue 5.93. Es importante especicar
que, a pesar de que la Escala de Acoso se medía
en términos subjetivos, los parámetros que se
manejaron para la aplicación de esta misma fueron
muy claros (0 como haberse sentido poco acosada
y 10 como muy acosada).
De igual forma, se les pidió a las encuestadas
que mencionaran tres zonas o espacios públicos
en Cancún, en donde se hayan sentido más
acosadas, entre las que más destacaron fueron:
el crucero, plaza “Las américas”, el transporte
público (autobuses, taxis, etcétera), el parque de
“las palapas” y las estaciones de autobús de plazas
concurridas.
Gráca 2. Escala de Acoso del 0 al 10 (siendo
0 nada y 10 bastante, para medir qué tan
acosadas se han sentido el último año)
Fuente: elaboración propia.
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universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
Testimonios
A continuación, se citan algunos de los testimonios
voluntarios que compartieron algunas de las
encuestadas:
“Una vez estaba caminando por el parque de las
palapas y frente a m venan caminando dos chavos
al pasar a mi lado uno de ellos me dio una nalgada,
mi primera reacción fue voltear y darle un golpe en la
cara, para lo cual se fueron”.
“Por mi casa (paseos Kabah, Cancún) tres tipos
me agarraron e intentaron subirme a un auto, pero
forcejeando pude escapar y correr”.
“Una vez un señor se me acercó para pedirme una
dirección, al intentarle explicar volteó hacia atrás para
buscar la dirección, luego de nuevo hacia l, veo que se
está masturbando para lo que despus me fui rápido
de ah”.
“Caminando por la calle un señor del otro lado me vio
y comenzó a masturbarse, me estaba diciendo que vaya
con l, pero solo lo ignor”.
“Una vez me vena siguiendo un coche yendo hacia mi
casa, se orilló frente a m y vi que era un sujeto que se
estaba masturbando”.
“He preferido ya no volver a salir sola para evitar este
tipo de situaciones”.
“Me ha pasado de todo, llevando mis hijos a la escuela
me han perseguido, me han dicho piropos y otras cosas
desagradables”.
“Una vez en un camión me quedé dormida y me
percaté que el señor que estaba al lado de mí comenzó
a tocar mis pechos, me despert súbitamente pero ya
no dije nada”.
“En los camiones me pasa muy seguido, cuando se
llenan se han frotado contra mi cuerpo”.
“Durante mi trabajo unos turistas me estaban
tomando fotos y luego más pasados de conanza
comenzaban a decirme cosas incómodas”.
“El mismo hombre lo vi 3 veces en 3 diferentes
lugares, siempre haca lo mismo, se bajaba de su coche
y se masturbaba frente a m”.
“Un hombre en su moto me comenzó a seguir, se
acercó a m y me estaba ofreciendo $1500 para irme
a un motel con l”.
CONCLUSIONES
El acoso sexual callejero (ACS) es una práctica
vista diariamente en los espacios públicos, tanto de
la ciudad en donde se llevó a cabo este trabajo de
investigación como en muchos otros lugares del país,
e incluso del mundo. Es una situación que viven con
más cotidianeidad las mujeres, independientemente
de sus características individuales. Esta serie de
encuestas que se hicieron fue a mujeres de diversos
rasgos y particularidades, tanto físicas como
económicas, de edad, escolaridad, entre otras, lo
cual comprueba la idea principal antes expuesta;
incluso podría parecer irónico como el ACS no
discrimina hacia quién va dirigido. La mayoría de las
mujeres, independientemente de sus características,
lo consideren o no violencia, la han vivido por
igual, es por esto que se decidió analizar desde un
enfoque de género.
Hablar de acoso es referirse más bien sobre
un tipo de interacción y de diversas conductas
asociadas a esta, no necesariamente de todas en su
conjunto, hubo mujeres que se sintieron acosadas
con menos conductas y con menos frecuencia;
a su vez, otras decían que, aunque habían sido
más frecuentadas en este tipo de ataques, no
demostraban un alto nivel de disconformidad en
la Escala de Acoso. ¿A qué se debe esto? Una de
38
Reconociendo el Acoso sexuAl cAllejeRo como ViolenciA de GéneRo hAciA lA mujeR en méxico 2021 -
josé GuAdAlupe loeRA cAmAcho, diAnA AlejAndRA cAnul RosAdo y jAime montAlVo ReynA
Sumado a todo lo anterior, parece que de
manera general y en un porcentaje amplio, para
algunas fue un poco más complicado categorizar
las micro interacciones; es decir, las conductas
que, aunque no sean tangibles, siguen produciendo
malestar en quien las recibe; la mayor parte de estas
son de modalidad psicológica (piropos, miradas y
silbidos). Para algunas, y en gran parte a las mujeres
más adultas, estas conductas no eran consideradas
como ASC. Una de las hipótesis ante este dato
es que posiblemente tenga que ver con que estas
conductas están disfrazadas, y por lo tanto, pueden
pasar casi desapercibidas; además de que no son
visiblemente demostrables, quedando como un
secreto entre los interactuantes, lo que congura a
la perfección el mismo rol de otros ataques sexuales.
Otro grupo de mujeres mencionaron que los
piropos eran parte de la cultura y que en tiempos
anteriores eran símbolo de elogio. Para algunas, los
piropos no eran considerados como violencia, en
este caso se estaría hablando de consentimiento
(temática y variable para otra investigación), sin
embargo, se retomaron en el actual trabajo por
cumplir con las características de las otras conductas:
no son pedidas o deseadas y provienen de un
desconocido, así que queda cuestionarse: ¿todo lo
que culturalmente es inherente a nosotros como
sociedad, es realmente una cultura de respeto?
Para concluir, es necesario hacer énfasis
en lo que implica la cultura del ASC, puesto que
en una sociedad donde hay pensamientos que
estn amoldndose a la nueva losofa contra la
violencia de género, es necesario voltear a ver con
detenimiento este problema y preguntarse: ¿es el
ASC el preámbulo hacia otro tipo de violencia hacia
la mujer más grave? Probablemente sí, puesto que, si
la educación de los valores se da a partir de cambiar
las conclusiones propuestas por el autor es que la
normalización de estas interacciones juega un papel
importante en este sentido, puesto que el acoso es
algo que se vive rutinariamente y a veces no hay de
otra opción más que la de adaptarse en cuanto a
vestimenta, sitios públicos que evitar, etcétera. Por
ello, se llega a un punto en el cual no hay más que
decir: “Es parte de mí”, “Así es la sociedad” o “Así
crecí y nunca fue mal visto”.
Otra conclusión podría ser que el
consentimiento es un factor que juega mucho en
este tipo de interacción, puesto que cuando una
conducta es aceptada por la mujer en cuestión,
esta deja de considerarla acoso. El tema sobre los
piropos, por ejemplo, se vio encerrado en esta
cuestión: para algunas mujeres hay piropos que
no violentan. Ocurrió algo muy parecido con los
silbidos y las miradas, puesto que podría parecer
que estas no son comprobables, pero para algunas
mujeres hay miradas que sí acosan. Estas tres
conductas se utilizaron para esta investigación por
cumplir con las características en el marco teórico;
en resumen, estas variables son temas abiertos para
otra investigación.
Un dato revelador fue el hecho de que
pareciera que las nuevas generaciones por
categoría de edad, van hacia un nuevo paradigma;
es decir, es importante destacar que aunque no con
todas fue de esta manera, una signicativa parte
de las mujeres más adultas fueron las que menos
decían sufrir conductas de acoso, incluso algunas
mencionaron abiertamente al encuestador que “las
mujeres de hoy en día exageraban”, lo cual da un
índice del cambio de perspectiva de la violencia que
existe hoy día, el cual desde el punto vista particular
del autor “hay una transición de paradigmas y
estamos viviendo ese cambio”.
39
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
la perspectiva de las acciones que aparentemente
son inofensivas como las doce conductas del
acoso, sería más convincente la idea de que se vive
en una sociedad de más respeto hacia las mujeres
y de más intolerancia hacia los que ejercen estas
conductas. El ASC parece que es un tema que se ha
insertado en la cultura de lo socialmente aceptado y
ha permanecido ahí un largo tiempo; pareciera que
poco a poco intenta ser expulsado de esta, más en la
época actual en la que los movimientos feministas
y la deconstrucción de las masculinidades se van
haciendo cada vez más presentes.
La iniciativa de este proyecto de investigación
va dirigida hacia los académicos y todo aquel que
estudia o ha vivido en alguna situación de estas.
Es una invitación no solo a las autoridades sino a
la sociedad y a la familia como organismo celular,
para educar y moldear a las siguientes generaciones
en un espacio de mutuo respeto. Institucionalmente
es también una oportunidad de hacer un giro hacia
este conjunto de acciones y procesos, puesto que se
ha visto con gran indiferencia en cuanto al castigo
a los que ejercen estas conductas, que para la gran
mayoría de las mujeres es considerado un acto
deliberado de violencia. En general, el acoso sexual
callejero es un tema de estudio multifactorial, pero
con un solo origen muy denido: la violencia
de género hacia la mujer. El número de mujeres
que viven situaciones de acoso diariamente sigue
subiendo y es necesario comenzar a hacer eco
e indagar ms en este campo cosicado de las
mujeres.
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violencia%20de%20g%C3%A9nero%20
en,llegar%20a%20presentar%20sus%20
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40
Reconociendo el Acoso sexuAl cAllejeRo como ViolenciA de GéneRo hAciA lA mujeR en méxico 2021 -
josé GuAdAlupe loeRA cAmAcho, diAnA AlejAndRA cAnul RosAdo y jAime montAlVo ReynA
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41
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
ANEXO
CUESTIONARIO DE ACOSO SEXUAL CALLEJERO
Loera, J. y Canul, D., Montalvo, J.
Edad Nivel educativo Ocupación
Lugar de residencia
Encuestador: Marca con una X las conductas que personalmente son consideradas por la mujer
encuestada como Acoso Sexual Callejero.
Sea “Sí” o “No” la respuesta anterior, menciona la frecuencia padecida a lo largo de la vida de tu
encuestada:
1. Ninguna
2. 1-3 veces
3. 4-6 veces
4. 7-10 veces
5. Más de 10 veces
N. Conducta Frecuencia
1 Nalgada Si( ) No ( ) 1 2 3 4 5
2 Besos sin consentimiento en la calle Si( ) No ( )
3 Tocamiento de partes íntimas Si( ) No ( )
4 Frotación de genitales contra tu cuerpo Si( ) No ( )
5 Fotografías sin consentimiento Si( ) No ( )
6 Persecuciones Si( ) No ( )
7 Exhibicionismo Si( ) No ( )
8 Silbidos Si( ) No ( )
9 Masturbación frente a ti Si( ) No ( )
10 Miradas jas por ms de 20 segundos Si( ) No ( )
11 Propuestas de acto sexual de un desconocido Si( ) No ( )
12 Piropos Si( ) No ( )
42
Reconociendo el Acoso sexuAl cAllejeRo como ViolenciA de GéneRo hAciA lA mujeR en méxico 2021 -
josé GuAdAlupe loeRA cAmAcho, diAnA AlejAndRA cAnul RosAdo y jAime montAlVo ReynA
De acuerdo a tu experiencia, menciona 3 lugares o zonas donde has experimentado alguna vez o con mayor
frecuencia alguna situación/conducta de Acoso Sexual Callejero: ______________________________________
________________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________________
Del 0 al 10 indica que tan acosada te has sentido en el último año: ________________________
Menciona alguna experiencia personal en donde hayas sido víctima de acoso (opcional):
________________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________________
Notas: Importante ser objetivo y no mencionar tu punto de vista personal ante el Acoso Sexual Callejero, no
persuadir para que la persona encuestada dé una respuesta concreta.
Toma en cuenta la denición de Acoso Sexual Callejero retomada por los autores de esta investigación en el
apartado “Denición por conrmar”, puesto que, si hay que aclarar las conductas hacia la persona encuestada, la
denición tiene que ser clara (interacción entre desconocidos en un espacio público).
Contacto
Psicólogo José Guadalupe Loera Camacho jloeracamacho@gmail.com
43
Universciencia
ISSN: 1665-6830
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 2.0 Genérica (CC BY-NC-ND 2.0)
https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.0/deed.es
uso de base de datos e información científica
en el contexto universitario
use of database and scientific information in the university context
Resumen
El presente artculo tiene la nalidad de indagar los conocimientos de los estudiantes
universitarios de la Licenciatura en Lenguas Extranjeras, sobre el uso de base de
datos e información cientca en la producción de textos académicos. Se trata de una
investigación cualitativa, transversal-descriptiva. Los resultados obtenidos arrojaron
ciertas limitaciones en el uso de repositorios digitales para la búsqueda de información
cientca, as como la falta de orientación y cultura sobre las normas de citación en
trabajos escolares.
Palabras clave: repositorios digitales, tecnología educativa, cultura digital.
Abstract
This paper aims to investigate the knowledge of university students of the Bachelor
in Foreign Languages, on the use of database and scientic information in the
production of academic texts. It is a qualitative, transversal-descriptive research. The
results showed certain limitations in the use of digital repositories for the search
of scientic information, as well as the lack of guidance and culture on citation
standards in school work.
Key words: digital repositories, educational technology, digital culture.
1
Universidad Veracruzana. Docente investigador.
E-mail: marcomartinezdocencia@gmail.com
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-3346-
9142. Google Scholar: https://scholar.google.
com/citations?user=mGgdcowAAAAJ&hl=es
Universciencia
Enero-abril - Año 20 - Núm. 59 - 2022
http://revista.soyuo.mx/index.php/uc
universcienciasoyuo.mx
universciencia@soyuo.mx
Recepción: enero-2022
Aceptación: febrero-2022
Pág. 45-49
marco antonio
martínez gonzález
1
45
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
INTRODUCCIÓN
2
El desarrollo de la investigación en el contexto
universitario se convierte regularmente en un
sórdido drama. Tanto catedráticos como estudiantes,
en algunas ocasiones, se sienten angustiados por el
desarrollo de trabajos académicos que requieren
reexión y anlisis crtico; asimismo, la búsqueda
de información cada vez se vuelve más compleja
por el trco de datos que en cuestión de segundos
va cambiando.
En este sentido, de acuerdo con la Asociación
Nacional de Universidades e Instituciones de
Educación Superior (ANUIES, 2016), en su plan
de desarrollo institucional 2030: “Las universidades
con mayor grado de consolidación académica
tenderán a constituirse como universidades de
investigación de clase mundial” (p. 38), esto
conlleva a formar entes con alto grado de raciocinio
a benecio de la sociedad mexicana.
Por lo anterior, el modelo educativo de la
Universidad de Oriente impulsa y desarrolla la
creatividad, la innovación y el emprendimiento,
dándole un fuerte énfasis al ámbito de la
investigación, promoviendo su progreso a través
del método constructivista humanista con apoyo
del uso de las tecnologías de la información y
la comunicación, en búsqueda de ampliar las
competencias profesionales para la vida, lo
que conlleva el compromiso de desarrollar de
manera integral al aprendiente, considerando
ejes cognoscitivos, axiológicos y heurísticos
contextualizados. Asimismo, es importante generar
el pensamiento crítico y vincularlo con la vida real,
esa vida a la que se van a enfrentar en el ámbito
profesional, siendo el común denominador de
su praxis la argumentación; es decir, el método
cientco, para lo cual el uso de la tecnologa en
la generación de contenidos es de gran relevancia,
las cuales, según la UNESCO (2021), contribuyen
al acceso universal a la educación, la igualdad en
la instrucción y el ejercicio de la enseñanza, así
como a la gestión, dirección y administración más
ecientes del sistema educativo.
A pesar de las reformas curriculares (una
de las cuales trajo como eje de innovación la
incorporación de las TIC en el proceso educativo)
se ha visto limitada la innovación, ya que aún existe
un rezago en el uso pedagógico de las mismas en
el área de investigación. Desafortunadamente, este
tipo de herramientas tecnológicas son integradas
para hacer ms ecaz el traslado de información,
haciendo uso de las mismas de una manera
rígida, dejando de lado el aprendizaje complejo,
el trabajo colaborativo, la solución de problemas
y una evaluación autentica. Vista de esta manera,
la tecnología educativa se proyecta de una manera
tradicional, lo que exige replantear dicho paradigma,
aplicando una tecnología educativa renovada,
creativa, crítica y cooperativa.
La innovación educativa con TIC ocurre
cuando se desarrolla el aprendizaje signicativo, el
cual se da gracias a la participación del estudiante en
actividades donde se trabajan proyectos colaborativos
y cooperativos, solución de problemas, análisis de
información, entre otros. Por ende, es necesario
dirigir la mirada hacia la formación de personas
críticas, generando perspectivas transformadoras
en las que el estudiante no solo sea capaz, sino que
también transforme la realidad, teniendo un papel,
tal como decía Giroux (como se citó en Fernández,
2007), de intelectual transformativo.
Ahora bien, se tiene claro que la brecha
digital es importante, pero ¿cómo se puede
utilizar para la recolección de información en un
trabajo académico? En una sociedad en la que los
2
Artículo original y derivado del proyecto de investigación titulado:
Uso de base de datos e información cientca en el contexto
universitario, Veracruz, México.
46
Uso de base de datos e información científica en el contexto Universitario -
marco antonio martínez González
conocimientos se vuelven obsoletos en tiempos
cada vez más cortos, se requiere contar con mayores
esfuerzos. A continuación, se analizan algunos
aspectos sobre la gestión del conocimiento.
El papel del docente en la orientación hacia la búsqueda de
información
El conocer y la búsqueda de información ha sido
de gran preocupación en las sociedades humanas,
y va desde las ideas de Platón, lejanas de objetos
concretos, hasta el constructivismo, paradigma
epistemológico en la que el individuo o los grupos
sociales fabrican el conocimiento; por lo cual, el
papel del docente en la gestión del conocimiento es
relevante. En el campo de la producción de textos
de divulgación en el ámbito universitario, es posible
encontrar con un sinfn de dicultades al momento
de iniciar una investigación: la falta de hábitos
del estudiante en la redacción, emisión de juicios
reexivos, argumentación y la no menos importante
búsqueda de información dedigna que fortalezca
el trabajo; es aqu donde la gura del docente tiene
un papel trascendental por su interacción directa
con la producción y la difusión del saber, resultando
de gran importancia, en su rol de formador e
investigador, la formación de los profesionales que
demanda la sociedad en un mundo globalizado,
complejo y en constante transformación, incitando
a la comunidad universitaria a encontrar respuestas
a sus múltiples cuestionamientos.
Por ello, el docente debe valerse de procesos
sistemáticos y lógicos que permitan la construcción
de proyectos encaminados a la solución de anomalías
en los diversos campos disciplinares, promoviendo
la competencia investigativa, como la selección de
contenidos sólidos, avalados por el gremio de la
ciencia. De acuerdo con Hernández (2009): “La
educación superior se plantea una serie de retos, en
un mundo en constante transformación; conectarse
sistemáticamente a uno de sus componentes
para estudiarlo será una práctica constante de
académicos e investigadores comprometidos
con el devenir del conocimiento” (p. 1). Por tal
razón, el docente universitario debe promover un
pensamiento divergente a través de la producción
del conocimiento y formación de personas y
profesionales competentes, responsables del manejo
de la información en sus campos académicos.
El acercamiento a la información sobre el
conocimiento cientco hace de los recursos de
acceso abierto una herramienta fundamental en la
comunidad universitaria. El acceso abierto implica
la posibilidad de disponer de cualquier tipo de
material de manera gratuita, constituyendo una
fuente poderosa de información por sus benecios,
accesibilidad y ventajas económicas al momento
de desarrollar textos académicos; especcamente,
investigaciones. Por lo anterior, es importante el
papel del asesor, ya que este permitirá orientar
sobre la selección de textos que argumenten
ciertos paradigmas o posturas del investigador
con información validada por la comunidad
especializada en el campo de conocimiento a tratar.
La Universidad de Oriente, a raíz de los
cambios que se están operando a nivel mundial,
los cuales demandan innovaciones en la forma en
cómo se relacionan las actividades de generación,
transmisión y aplicación del conocimiento, busca
fortalecer, a través del programa de formación
de investigadores, las capacidades de innovación,
desarrollo cientco y tecnológico para responder
de manera más acelerada a las demandas de la
sociedad del conocimiento, centrándose en la
atención a problemas y temas cientcos cruciales
para la viabilidad del país, en un contexto global.
47
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
De ahí la importancia de la formación
en el contexto universitario, en donde
desafortunadamente se presupone que la
alfabetización en estos aspectos ya fue abordada
en niveles escolares anteriores, por lo que el
reforzamiento de esta habilidad queda relegada a
la toma de cursos propedéuticos, talleres, etcétera.
Según Neri (2021): “Estudios conrman que es
poco frecuente que los profesores destinen parte
de su clase a la realización de lecturas dirigidas o
a la elaboración de escritos en tiempo real, mucho
menos al análisis de los productos de aprendizaje”
(p. 1). Debido a lo anterior, es relevante visualizar
las dicultades que se presentan en la producción
de un texto académico, permitiendo de esta
manera contar con un enfoque de las correcciones
necesarias que habrn de realizarse, a n de obtener
un producto de calidad.
DESARROLLO
Esta investigación tiene un enfoque cualitativo, y está
directamente involucrada con los actores a estudiar,
pues posee un punto de vista interno, pero siempre
con una perspectiva analítica como observador
externo al fenómeno. El diseño implementado en
el estudio fue transversal-descriptivo de tipo no
experimental. Se utilizó una muestra intencional,
cuya población de objeto de estudio fueron 12
estudiantes de 4° cuatrimestre de la Licenciatura en
Lenguas Extrajeras, de la Universidad de Oriente
campus Veracruz.
El instrumento aplicado fue un cuestionario
de 8 preguntas, validado a través del método de
juicios de expertos, mismos que vericaron la
viabilidad del mismo.
RESULTADOS
De acuerdo con el análisis expuesto, posterior a la
aplicación del instrumento, se pudieron encontrar
los siguientes aspectos.
Con respecto a los sistemas de información
utilizados por los estudiantes, expresan que
utilizan internet para buscar información de
sus actividades académicas, teniendo como
primera opción Google, seguido de libros
(en la mayoría de los casos electrónicos), y en
menor medida, artculos cientcos.
Para la búsqueda de información del campo
de su profesión, desconocen bases de datos
especializadas, por lo que regularmente
recurren a Google.
Expresan que otro de los problemas a los
que se enfrentan es el desconocimiento de las
normas de citación de trabajos académicos,
en este caso el estilo APA, ya que, a pesar de
tratar de poner referencias en sus proyectos,
lo hacen de manera empírica (en todos los
casos, se auxilian de programas digitales
para elaborar sus referencias, sin embargo,
desconocen si están correctas; por otro
lado, existen carencias en la redacción de
citas); por ende, sugieren mayor capacitación
en ese rubro, considerando como opción
que se vuelva un hábito su uso en todas las
experiencias educativas de su trayectoria
curricular.
48
Uso de base de datos e información científica en el contexto Universitario -
marco antonio martínez González
CONCLUSIÓN
Los resultados obtenidos en esta investigación
permiten emitir que la implementación de
una cultura de búsqueda de información en
repositorios digitales en esta era del conectivismo
es relevante en la formación de profesionales; sin
embargo, faltan desarrollar hábitos de lectura y
escritura convirtiéndose en un ejercicio cotidiano
en el quehacer universitario. No hay duda que la
producción de textos académicos puede ser latente
y bien desarrollada en esta población; sin embargo,
aún se requiere de esfuerzos continuos en la
concientización en cuanto al uso de la tecnología,
y darle un uso didctico con nes de divulgación,
porque quizá se utilicen recursos tecnológicos, pero
no de la forma adecuada. Algunas recomendaciones
sugeridas son las siguientes:
Capacitar a la población académica con
respecto al uso de repositorios digitales.
Promover la cultura de la búsqueda de
información cientca.
Dar un seguimiento minucioso a los trabajos
académicos elaborados por los estudiantes.
Distribuir un manual normativo en todo el
contexto universitario sobre la elaboración
de trabajos académicos.
Orientar al estudiante para buscar la
información que necesitan (dónde
encontrarla, cómo obtenerla y cómo
analizarla).
Culturalizar la búsqueda de información
en los siguientes ejes: búsquedas genéricas,
hibridas, académicas y avanzadas.
Como se mencionó en el fundamento
teórico, el docente tiene que ser ese ente motivador
e innovador para que el desarrollo integral del
universitario sea satisfactorio en todo sentido.
Mientras el estudiante sea motivado, podrá tener
mayores oportunidades de logro académico.
REFERENCIAS
Asociación Nacional de Universidad e Instituciones
de Educación Superior (ANUIES) (2016).
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es.unesco.org/themes/tic-educacion
49
Universciencia
ISSN: 1665-6830
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 2.0 Genérica (CC BY-NC-ND 2.0)
https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.0/deed.es
subsunción y memoria colectiva
subsumption and colective memory
Resumen
En el marco de una relación desigual y de subordinación entre el campo y la ciudad
con base en la noción de la subsunción de los territorios del planeta a la forma
capitalista, y por tanto en los diversos planos global, nacional, regional y local, se
plantea la recuperación de la memoria colectiva de los movimientos comunitarios, a
partir de la ya larga experiencia de organización de las cooperativas de la Sierra Norte
de Puebla, la cual, planteamos, se nos presenta como un modelo de contrasubsunción
y autonomía. El proyecto de la cooperativa Utopía de los Bosques y la organización
de cooperativas en Tlamaya Grande, tienen como referencia dicha experiencia; aquí se
presentan los primeros avances de la investigación en curso, resultado de la realización
de entrevistas estructuradas, pláticas informales y observación participativa.
Palabras clave: Sunsunción, memoria, contrasubsunción.
Abstract
Within the framework of an unequal and subordinate relationship between the
countryside and the city, based on the notion of the subsumption of the planet’s
territories to the capitalist form, and therefore at the various global, national, regional
and local levels, the recovery of the collective memory of community movements
is proposed, based on the already long experience of organizing cooperatives
in the Sierra Norte de Puebla, which, we argue, is presented to us as a model of
countersubsumption and autonomy. The project of the Utopía de los Bosques
cooperative and the organization of cooperatives in Tlamaya Grande, has this
experience as a reference. The rst advances of the ongoing research are presented
here, as a result of conducting structured interviews, informal talks and participatory
observation.
Key words: Subsumption, memory, countersubsumption.
1
Benemérita Universidad Autónoma de
Puebla. Profesora-investigadora. Doctorado.
Puebla, México. E-mail: mayleth.echegollen@
correo.buap.mx ORCID: https://orcid.
org/0000-0003-3339-8177 Google
Scholar: https://scholar.google.com/
citations?user=rILDFjkAAAAJ&hl=es
Universciencia
Enero-abril - Año 20 - Núm. 59 - 2022
http://revista.soyuo.mx/index.php/uc
universcienciasoyuo.mx
universciencia@soyuo.mx
Recepción: febrero-2022
Aceptación: marzo-2022
Pág. 51-62
mayleth
echegollen guzmán
1
51
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
INTRODUCCIÓN
2
Desde hace unos cuarenta años, comenzaron a
aparecer en la Sierra Norte de Puebla organizaciones
de base comunitaria cuyo objetivo fue, desde sus
inicios, detonar procesos de desarrollo comunal en
un contexto de extrema pobreza y en contraposición
a las formas caciquiles tradicionales que han
legitimado, desde hace siglos, formas extremas de
sobreexplotación del trabajo.
Esos procesos iniciados en pequeñas
comunidades y municipios, como el de San Miguel
Tzinacapan, se han ido expandiendo, motivando
a otras comunidades a seguir su ejemplo, lo que
en la última década ha signicado una lucha
social y política organizada contra las empresas
trasnacionales, las cuales basadas en amplias
concesiones gubernamentales se han abocado a
la extracción de recursos minerales y otros, con
el uso de tecnologías como la extracción a cielo
abierto, y el fracking, las cuales requieren de ingentes
cantidades de agua, siendo altamente nocivas
para los sistemas ecológicos y bioculturales de la
región. El Proyecto Utopía de los Bosques surge
en el contexto de esas luchas, especcamente en
esa región del estado reconociendo que hay otras
similares en otras partes del territorio de la entidad
poblana, como la Sierra Negra o la Mixteca.
Como un antecedente importante, se puede
mencionar la intervención nociva del INMECAFE
(Instituto Mexicano del Café) a partir de los años
ochenta, así como la caída internacional del precio
del café en la década de los noventa, las cuales
produjeron en las comunidades y municipios
productores del país, y en particular en la Sierra Norte
de Puebla, una crisis económica, social y cultural
de largo alcance, frente a la cual las comunidades
respondieron con la implementación de otro
modelo de cultivo involucrando la recuperación de
los saberes ancestrales de las comunidades, proceso
facilitado por los antecedentes de organización
comunitaria de la cual es pionera la cooperativa
Tosepan Titataniske, de origen nahua-totonaca, dos
de las siete etnias que predominan en la entidad.
El presente texto representa la mirada desde
las Ciencias Sociales, sobre un proceso en marcha,
cuya investigación comenzó a mediados del año
2019, parcialmente interrumpido por la pandemia.
En primera lugar, se tratarán de bosquejar las
principales referencias conceptuales que conguran
dicha mirada, después se hará alusión a una breve
historia de los procesos de organización comunitaria
en la Sierra Norte que vienen dándose desde hace
cuarenta años, después se describirá brevemente un
proyecto agroecológico y biocultural de algún modo
desprendido de esa historia, llamado Utopía de los
Bosques, nalmente se presentarn los resultados
parciales de la investigación y se intentarán algunas
conclusiones.
DESARROLLO
Subsunción o la incorporación del campesino al proceso
capitalista
El concepto de subsunción, planteado en el
Capítulo VI Inédito de Marx, constituido por un
borrador que no fue incorporado en la versión nal
del tomo I de El Capital, excepto al parecer en la
versión francesa (Marx, 1971), permite explicar y/o
comprender las formas en las que se profundiza
y expande el capitalismo a nivel planetario, y
especcamente en América Latina.
En términos generales, pensamos la
subsunción como un proceso de incorporación de
territorios y poblaciones al régimen de acumulación
2
Artículo original y derivado del proyecto de investigación titulado:
proyecto de la cooperativa “Utopía de los Bosques y la organización
de cooperativas en Tlamaya Grande, Puebla, México.
52
SubSunción y memoria colectiva -
mayleth echegollen guzmán
de capital. Esta incorporación paulatina, no lineal,
supone dos aspectos distintos pero en estrecha
relación, por un lado, la implantación de la forma
salarial, la cual en general conlleva la transformación
de las sociedades agrarias en sociedades urbanas
industriales dentro de la cuales queda un reducto
de comunidades campesinas insertas de manera
desigual y subordinada a las necesidades de
producción y consumo de las ciudades, a las
demandas locales, regionales, nacionales y globales
de los mercados, a la sobreexplotación de su
fuerza de trabajo, generalmente estacional; y a un
despojo material y simbólico, paulatino y a veces
inadvertido, pero consistente. Por otro lado, está
la incorporación de la población a las formas de
división técnica del trabajo, con lo cual se subsume
a aquella en el aprendizaje y orientación tecnológica,
dictada por el régimen de acumulación.
En México, estos dos procesos arrancaron
con los programas fuertes de industrialización
desde las décadas treinta y cuarenta del siglo
pasado, los cuales produjeron una transformación
radical del perl sociodemogrco de la población.
Al nalizar el siglo XX, haba en el territorio
nacional entre un 25 y un 27% de población rural,
en contraste con el 89 % que había al iniciar el siglo,
representado actualmente por un 22 % dentro de
la cual se ubican las comunidades indígenas, de
aproximadamente 62 etnias, hablantes de más de
300 variantes dialectales, constituida por 7,177,185
personas, de las cuales 11.78 % no hablan español
(INEGI, 2022).
En ese sentido, se puede pensar la
transformación sociodemogrca como un proceso
de subsunción, en el que se va generalizando
la forma salarial, como subsunción formal,
posibilidad de la extracción de plusvalía absoluta; y
se van implantando las formas tecnológicas propias
del régimen de acumulación de capital, las cuales
posibilitan la extracción de plusvalía relativa, como
subsunción real. De este modo la persistencia de
formas de organización comunitaria tradicional,
dentro de las cuales se conservan tecnologías de
origen precapitalista, se convierten en una “atroa”
de la subsunción real, la cual tendría que derivarse
de la subsunción formal (Marx, 1971, pp. 58-60).
Los procesos de subsunción capitalista
iniciados hace 500 años con la conquista y
colonización de todo el planeta, tienen así, como
último reducto a las comunidades de pobladores
originarios en una expansión ininterrumpida, que,
aunque han pasado por diversas fases, sigue siendo
en esencia la misma, en aras de los regímenes de
acumulación sucedidos a lo largo de la historia de la
modernidad capitalista. Este proceso ha signicado
siempre, y sigue signicando, el antagonismo con
las prácticas ancestrales de los campesinos, que
tienden a la conservación de las aguas y los bosques,
base de su reproducción social en una lógica no
mercantil.
Se comprende, entonces, que sea de interés
de los programas gubernamentales, derivados de
una organización estatal propiamente capitalista, el
ir disolviendo las formas precapitalistas persistentes
a manera de ir subsumiendo a la población rural, y
rural indígena, junto con sus territorios, muchos de
ellos como los de la Sierra Norte de Puebla, ricos
en recursos bióticos.
Este es el caso, sólo para mencionar
algunos, que vienen a cuento de la llamada
“revolución verde”, implantada como una forma
de modernización del campo, tanto en México
como en otras latitudes del planeta; y del Instituto
Mexicano del Café, instancia creada en 1958 para
la comercialización de dicho producto (Ceccon,
2008). Como veremos más adelante, esta agencia
53
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
gubernamental ha sido la causa de uno de los más
grandes desastres ecológicos y socioeconómicos,
aún no debidamente conocido en el plano nacional,
pero estrechamente documentado en la experiencia
de los campesinos, como es el caso que aquí se
relata.
Puede decirse que tanto la expansión
tecnológica, vía INMECAFE, hacia las zonas
cafetaleras indígenas, como la subsecuente caída de
los precios internacionales, están relacionadas con
lo que Harvey (2004, p. 36) llama “ajustes espacio-
temporales”, que vienen realizando las empresas
capitalistas, desde la década de los setentas, con el
n de enfrentar las crisis de sobreacumulación y la
caída tendencial de la tasa de ganancia. Es decir,
esos ajustes son necesarios para proseguir en los
procesos de subsunción, condición necesaria
para la reproducción ampliada de capital y el
mantenimiento de la ganancia. Esta nueva forma
en el régimen de acumulación, Harvey la ha
denominado “acumulación por desposesión”,
sólo para distinguirla de la llamada acumulación
originaria, aunque el autor documenta cómo el
despojo abierto o encubierto es la constante en la
forma capitalista y de algún modo continuación de
la misma.
De acuerdo con la Secretaría de Economía
del estado de Puebla, existen actualmente en
territorio poblano 310 concesiones mineras y para
hidroeléctricas, al servicio de aquéllas instaladas en
al menos 15 municipios de la Sierra Norte, y en
cinco municipios del sur de la entidad (Panorama
Minero del Estado de Puebla, 2021, pp.13-23).
La Tosepan, una alternativa al despojo
La cooperativa Tosepan Titaniske, en español
“Unidos Venceremos”, se ha organizado
formalmente, desde 1980, como Cooperativa
Agropecuaria Regional Tosepan Titataniske,
motivada entre otras cosas por la crisis de los
precios del café, pero, sobre todo, debido a los
abusos de los productores e intermediarios cuyas
ganancias se basaron durante muchos años en una
sobreexplotación de la fuerza de trabajo de los
pobladores originarios de esa región (Macip, 2009).
La cooperativa, tiene como antecedente,
pequeñas organizaciones surgidas en San Miguel
Tzinacapan, entre 1976 y 1981, tales como una
Sociedad de Producción Rural, una Sociedad de
Solidaridad Social, Centros Rurales de Educación
Bsica, nanciados éstos últimos por el CONAFE
(Consejo Nacional de Fomento Educativo), el
Taller de Rescate de la Tradición Oral, e incluso
un Centro de Investigación; todos ellos impulsados
por PRADE (Proyecto de Animación y Desarrollo)
grupo interdisciplinario y mixto, iniciado por un
grupo de cinco mujeres, de diferentes profesiones,
sostenidas con apoyos familiares y de amistades
solidarias, quienes se habían instalado en la
comunidad, desde 1973. (Almeida y Sánchez, 2014,
pp. 73-81)
Aunque en principio motivados por
conseguir el abasto de azúcar a precios más bajos,
pasaron a la creación de un Benecio de café,
bodegas comunitaria y asoleaderos para pimienta
y café, granjas de producción pecuaria, avícola,
porcícola y caprina. (Ibid, 78-79). Actualmente, la
organización agrupa a 34, 000 familias, con un total
de 250,000 socios, de 410 cooperativas locales, de
26 municipios de la sierra nororiental de la entidad
poblana. Y la ampliación del proyecto no ha sido
sólo territorial, ya que ha habido una evolución
en términos conceptuales, lo cual se referirá más
adelante.
54
SubSunción y memoria colectiva -
mayleth echegollen guzmán
No obstante los benecios económicos, no
se pudo evitar un proceso de estraticación interna,
congurndose una élite indgena y masculina, que
dio como resultado el desprendimiento parcial, de
lo que había sido la Comisión de Comercialización
de Artesanías al interior de la Tosepan, cuyas
integrantes, todas mujeres indígenas, con base
en los resultados de un diagnóstico participativo,
deciden formar en 1992, la Sociedad de Solidaridad
Social Masehualsiuamej Mosenyolchicahuanij; las
mujeres habían concluido que su permanencia
en la Tosepan “no favorecía su empoderamiento
como sujeto social”, debido a la prevalencia de los
sistemas tradicionales en las relaciones de género
(Martínez, 2000, p.162- 164).
Al inicio, las integrantes se organizaron para
vender sus productos: el tejido en telar de cintura,
el bordado a mano y la cestería de jonote -un
rbol cuya corteza se transforma en bra vegetal-.
Pero el proyecto creció más allá de lo económico
y ahora tienen el hotel Taselotzin, un local, varias
tortillerías y una farmacia tradicional. Las mujeres
encontraron una voz, un espacio para ayudarse y
transformar su comunidad.
3
El Kuojtatiloyan (monte/bosque útil) y la memoria colectiva
En la Sierra Norte de Puebla, los pueblos nahuat
o maseual, han realizado desde tiempos antiguos
un manejo de su territorio, creando paisajes
bioculturales en los que se combinan áreas de milpa,
potreros, cañaverales, acahuales, bosques y áreas
forestales de origen humano; que son el resultado
de la manipulación del proceso de regeneración
ecológica y de especies nativas e introducidas,
silvestres y cultivadas o en proceso de serlo.
Éstas últimas, verdaderos jardines productivos,
se conocen en la lengua masehual como “montes
útiles” o “Kuojtakiloyan” (Toledo, 2015).
4
Entre los años 2000 y 2005, a partir de la
realización de talleres y de procesos de investigación
participativa, un conjunto de investigadores tanto
profesionales como locales provenientes de las
propias comunidades organizadas en la Tosepan y
en la Masehualsiuamej, incidieron en una dinámica
de reconstrucción de la historia mediata de las
comunidades y en un proceso de recuperación
de los conocimientos ancestrales, transmitidos de
generación en generación. Podemos, desde luego,
plantear que estos eventos son, sin duda, efecto de
los procesos de organización anteriores los cuales
permitieron su profundización y la consolidación
progresiva de algunas de sus dimensiones. También
suponen la sistematización por parte de los mismos
participantes, de los contenidos vertidos en las
actividades de investigación y reexión, en las que
son a un tiempo sujetos y objetos de las mismas.
El evento referido como una especie de
parteaguas detonante de estos procesos, fue la
llegada a la zona del INMECAFE (Instituto
Mexicano del Café), organismo creado en 1958 y
desaparecido en 1989. A continuación, se presenta
un fragmento del Testimonio recogido por Patricia
Moguel en uno de los talleres:
…. “Muchos hemos adoptado propuestas
tecnológicas que son contrarias a nuestras
formas de producir y de respetar nuestra
naturaleza. Por ejemplo cuando una de estas
fue la del INMECAFÉ cuando nos propuso
que le quitáramos la sombra a nuestros
cafetales en los lugares más planos, y en
nuestras zonas montañosas que sólo dejáramos
una o dos especies como los chalahuites y
esto empobreció mucho nuestros suelos y
además nuestros ingresos. Observamos que sí
aumentamos la producción por algunos años,
3
Citado en “El caso de la organización Maseual Siumej
Mosenyolchicauanij, integrada por mujeres indígenas de Cuetzalan,
Puebla. https://youtu.be/n8QcUAXGF9M, junio 05, 2018;
Consulta: 6/03/19.
4
Todas las citas de este apartado, a menos que se indique lo contrario,
son de Toledo, Victor (2015). El Kuojtakiloyan. México: UNAM/
CONACYT.
55
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
pero estuvieron más expuestos a las heladas, a
las plagas y a las enfermedades”… (p.22)
Este y otros testimonios son muy signicativos
porque las versiones difundidas por la prensa
y otras instancias, es que el precio del café se
vino abajo debido al oligopolio que mantenía el
INMECAFÉ, pero poco se ha dicho acerca del
problema tecnológico, por un lado, la técnica
referida del mantenimiento o no de la sombra, y
por el otro, el uso persistente de agroquímicos.
…Ahora sabemos que la propuesta de
modernización que nos trajeron hace más
de treinta años [tuvo] un costo muy alto. Por
un lado el fuerte grado de contaminación
de nuestros suelos y agua por el uso de
agroquímicos que aplicamos. Por otra parte,
la eliminación de muchas plantas y sobre todo
de árboles dentro de nuestras parcelas para
dejar sólo los chalahuites como sombra del
café. (Ibid, p.22)
La investigación agroecológica más reciente,
corrobora el hecho de que el uso de agroquímicos
degrada de tal modo el suelo, que se hace más
vulnerable a las plagas, y además llega un momento
en el que deja de ser productivo. Del mismo modo,
la investigación especializada constata que las
técnicas ancestrales de los pueblos maseuales, es
la mejor manera de cultivar no sólo el café, sino
muchas otras plantas:
… La forma como nosotros los náhuats
hemos aprendido a manejar nuestra naturaleza
y aprovechar los recursos que obtenemos de
ella, nos recuerda el gusano “cien pies” que
camina no sobre dos, cuatro o seis pies como
lo hace la inmensa mayoría de los animales
que existen, sino sobre muchos pies […].
Pero ¿qué queremos decir con esto? Quiere
decir que nosotros creemos que no debemos
caminar o depender de sólo un recurso como
es lo que los del INMECAFE nos quisieron
imponer con respecto al café para mejorar
nuestros ingresos. Nuestras comunidades
aprendieron a manejar sus recursos a partir
del criterio de la diversidad […] Los precios
del café siempre han sido muy inestables.
Cuando tuvimos heladas o sequías, nos
decían nuestros abuelos, pudimos hacerle
frente a la disminución de nuestros ingresos
que procedían del café tan sólo porque
vendíamos otros productos como nuestra
pimienta, cítricos, plátano y muchas otras
frutas y plantas procedentes de nuestro
kuouktakiloyan”… (Ibid, p.24)
Es decir, la forma tradicional de cultivo entre
los pueblos nahuas es justamente contraria a la
lógica promovida e implementada por el mercado
neoliberal, esto es, basado en las llamadas “ventajas
comparativas”, de acuerdo con las cuáles se
establece el monocultivo del producto que puede
competir mejor en el mercado internacional, el cual
supuestamente opera en función de la oferta y la
demanda, aunque está documentado el predominio
monopólico de las empresas trasnacionales.
(Moguel, 1992)
Aunque la llegada del INMECAFE a estas
comunidades es anterior a la doctrina neoliberal,
la lógica del monocultivo ya era predominante
en los programas de modernización agrícola
en el país, desde la llamada “revolución verde”
(Ceccone, 2008) y que, efectivamente, se basó en
un desconocimiento e incluso menosprecio de las
formas tradicionales de cultivo. Y estas son las que
están siendo recuperadas por los maseuales.
56
SubSunción y memoria colectiva -
mayleth echegollen guzmán
[…] El “uso múltiple” del que hablan los
cientcos que nosotros hacemos de nuestra
tierra y sus recursos, esto quiere decir, que
está basado en el conocimiento y experiencia
no sólo de muchísimos maseuales, sino de
nuestros antepasados, quienes a lo largo
de cientos de años lograron experimentar
y probar cuales eran los conocimientos
valiosos y cuales no […]…nuestros pueblos
aprendieron con sus prácticas cotidianas de
cientos de años, que el éxito de un cultivo
depende de una buena selección de semillas,
del tipo de suelos, del grado de inclinación
de nuestras pendientes, de la orientación
de nuestras parcelas con respecto al sol y
vientos, del grado de humedad, de que se
elija correctamente los tiempos de la cosecha
y siembra en función de las lluvias y sequías
que tengamos y de los ciclos lunares […]
(Testimonio recogido por Patricia Moguel,
2015, p. 25)
Ahora, también, los especialistas han comprobado
que la combinación de cultivos en varios sistemas
productivos agrícolas, hortícolas, cría de animales,
ganadería, etc., es la mejor manera de mantener
nutrida la tierra, evitando su degradación y
manteniendo las defensas naturales contra las
plagas. De igual manera, se ha extendido más la
práctica de los abonos orgánicos en contraposición
al uso de agroquímicos (Cepal/FAO/IICA, 2019)
El rescate de los saberes ancestrales de
los náhuats les ha dado una nueva conciencia de
sus propias capacidades, así como una base de
autonomía, la cual podemos vislumbrar en el
siguiente testimonio de Don Luis Márques:
…”Debemos aprender a ltrar del progreso,
de sus conocimientos y su tecnología sólo
lo que nos conviene. La ciencia con su
tecnología es tan sólo una herramienta que
nos pueden dar veracidad a las acciones
que colectivamente llevamos a cabo que
den solución a los problemas que vamos
enfrentando”… (Testimonio recogido por
Patricia Moguel, 2015, p. 17)
En suma, en el bosque útil, el cafeto se cultiva
dentro del bosque, de modo que los árboles dan
sombra, nutrientes, humedad y un mayor equilibrio
climtico. Adems, se han clasicado 280 plantas
alimenticias, medicinales, ornamentales, leña,
material de construcción, etc. Además está el rescate
de la abeja melipona scaptotrigonamexicana, una
especie nativa que produce una miel con un sabor
peculiar, propiedades y alta calidad nutrimental,
por lo cual está caracterizada como un producto
gourmet, colocada mayormente en los mercados
europeos. En general, los proyectos comunitarios
van encaminados a fortalecer y/o rescatar la
diversidad biocultural, la autosubsistencia familiar,
los mercados locales y la salud ambiental.
El proyecto Utopía de los Bosques
Desde junio de 2018 a la fecha, un grupo de
ciudadanos, académicos y activistas, decidimos
iniciar con este proyecto una estrategia de
conservación de selva y bosques mesólos
presentes en el municipio de Tlapacoya; con ese
n los participantes se han organizado en una
cooperativa de consumo, centrando las actividades
hasta ahora en la comunidad de Tlamaya Grande,
junta auxiliar de ese municipio.
La localidad de Tlamaya Grande está
situada en la sierra nororiental del estado de puebla,
a 725 metros de altitud. Hay 1008 habitantes: 488
hombres y 520 mujeres; del total de la población,
el 1,59% proviene de fuera del estado; la tasa de
fecundidad es de 3,19 hijos por mujer; el 14,68%
57
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
de la población es analfabeta (el 11,07% de los
hombres y el 18,08% de las mujeres); el grado de
escolaridad promedio es del 5.79 (6.14 en hombres
y 5.49 en mujeres) (Pueblos América, 2021, pp. 3,4).
Los principios de este proyecto se encuentran
dentro del cooperativismo y la llamada economía
solidaria, donde una vez logrando la rentabilidad
planeada en forma estratégica y participativa, ésta
se distribuye justa y equitativamente entre los
socios, de acuerdo a sus aportaciones; pero también
buscando que las comunidades originarias de ahí
puedan beneciarse y participar.
Para tal efecto, hasta la fecha se han
organizado otras cuatro cooperativas: la cooperativa
de productores agrícolas, la de ganadería, la de
ecoturismo, y la de productos naturales, y está en vías
de organización una cooperativa para la producción
de miel de abeja melipona, la cual susbsiste de
manera similar a la región de Cuetzalan donde se
encuentra la Tosepan. Con estas organizaciones se
pretende el desarrollo de proyectos de producción
orgánica, directamente del productor al consumidor,
reduciendo el costo de cadenas de valor largas y
contaminantes, generando productos de calidad,
inocuos y útiles de tipo agroalimentario y de otros
tipos como tinturas medicinales, productos de
belleza, extractos y medicamentos. Los ejes del
proyecto son los siguientes:
A) monitoreo de biodiversidad .-formación de
monitores comunitario; b) senderos interpretativos.-
propone dividir los terrenos adquiridos como un
área natural protegida, en zona de conservación,
zona de aprovechamiento y área de educación ; c)
unidad de manejo ambiental (UMA).-análisis de
los recursos presentes de forma profunda para la
evaluación de manchones de selva y bosque, para
decidir sobre la mejor estrategia; d) diagnóstico.-
estudio etnobotánico: resiliencia, vulnerabilidad
y sustentabilidad; e) sistemas agroforestales y
silvo pastoriles comunitarios.-a partir de talleres
estratégicos y participativos para producción: litchi,
vainilla, miel melipona, canela, entre otras; f) huerto
semillero o “casa de la semilla”. generar un huerto
o semillero para obtener semillas 100 por ciento
locales y de especies endógenas, para producir
alimentos y reforestar; g) organización comunitaria
y buen vivir. -diálogo entre las personas del campo
y de la ciudad, a través de actividades como cursos
de cocina tradicional, salud comunitaria, etc.;
h) ecoturismo, turismo comunitario educativo
y responsable, con zonas de campamento para
actividades de ocio, recreación y educación en los
lugares que previos estudios de impacto.
En los proyectos a desarrollar, invariablemente
se dará protección a la naturaleza, es decir ningún
modelo o propuesta, por mucho rendimiento que
represente, se aplicará si esto afecta al bosque y su
entorno.
Un aspecto muy importante en el arranque
del proyecto ha sido el de la “transferencia
tecnológica”, ya que aunque el 40 % de la población
de Tlamaya es de origen indígena, ahí desconocen
el manejo de la abeja Melipona, así que en el
momento en que se identicaron enjambres en
algunas casas de la comunidad, se organizaron en
el mes de julio de 2018, talleres para el aprendizaje
de su manejo, en los que los facilitadores fueron
miembros de la Tosepan, jóvenes de la ya tercera
generación de la cooperativa, quienes con un
gran orgullo relataron que ese conocimiento, que
ahora transmitían, les había sido otorgado por sus
abuelos. En ese sentido, se puede vislumbrar una
58
SubSunción y memoria colectiva -
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fuera de la temporalidad del mercado. El
tiempo de la organización autogestionaria
aparece aún subordinada a ella.
Fragmentación del territorio. Uno de los
problemas es que el bosque, para cuya
recuperación se organizó la cooperativa
Utopía, está dentro de una propiedad
privada; esto refuerza la representación
fragmentada que se tiene de la totalidad del
territorio en el que se asienta la comunidad.
Por tanto, se requiere trabajar en el mapeo y
reconocimiento del territorio. En ese sentido
la cooperativa de Ecoturismo ha estado
realizando una importante labor, en tanto el
recorrido, reconocimiento y recuperación de
los lugares signicativos del territorio.
6
Fragmentación de la memoria colectiva.
Hasta ahora, lo que se ha observado, es que
los habitantes de Tlamaya, que participan
en la organización de las cooperativas, han
manifestado una conciencia de que la historia
reciente de su comunidad está marcada por
un antes y un después del cultivo del café.
Tanto en las asambleas, talleres; como en
pláticas informales, constantemente hombres
y mujeres, hacen referencia a un “antes,
cuando el café sí daba ingresos”, y un ahora,
con la “tierra agotada, y llena de plagas”;
también maniestan el deseo de volver a
sembrar café “como antes”. Es decir, parece
que uno de los ejes de problematización para
avanzar en los procesos organizativos es el
de recuperar colectivamente esta parte dela
historia reciente de la comunidad a n de
asentar las alternativas.
alianza estratégica con la Tosepan, que, además de
ser un modelo de desarrollo local y regional, puede
transmitir y compartir sus saberes y su experiencia
ampliando su impacto en toda la zona.
Como parte del proyecto, y en el eje de
Organización Comunitaria, se han formulado tres
fases: 1) la realización de un censo de la comunidad,
para identicar su estructura social y económica,
la persistencia de formas culturales comunitarias,
y el estado de su situación jurídica; 2) realización
de entrevistas, estructuradas, no estructuradas y a
profundidad; 3) comparación sistemática entre los
grupos organizados y los no organizados, a través
de talleres de investigación participativa.
5
RESULTADOS
Algunas prácticas socioculturales arraigadas en
la comunidad se observan como formas que
tendrían que ser transformadas para avanzar en los
procesos organizativos que tiendan a la autogestión
comunitaria. A continuación, se bosquejan algunas
de ellas.
El asistencialismo. En las entrevistas
estructuradas y en los intercambios informales,
los pobladores de Tlamaya expresaron una
información difusa acerca de las cooperativas
que se han organizado en la comunidad y la
idea de posponer su probable incorporación,
ya que estaban a la espera de su inscripción en
los programasgubernamentales. En muchos
de ellos se advirtió que no podían diferenciar
entre estos últimos y la organización de las
cooperativas.
La lógica del mercado. Se advierte la necesidad
de crear una temporalidad comunitaria por
5
Por cuestiones de espacio no se tratan en este artículo los datos
del censo realizado a lo largo del año 2019; ellos forman parte de
un trabajo de tesis de licenciatura y serán considerados en un texto
futuro.
6
La pandemia desarticuló los planes de esta cooperativa, pero
actualmente ya reinició sus actividades.
59
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Estraticación social. Uno de los elementos
que se ha estudiado de manera particular
es el papel que históricamente ha jugado la
escuela en la comunidad. A reserva de tener
los resultados nales de la investigación,
se observa que la escolarización ha venido
a reforzar los procesos de estraticación
al interior de la comunidad, en el sentido
de que los que han devenido líderes de las
cooperativas son los que tienen una mayor
escolaridad, pero que de por sí pertenecen
a las familias con mayores recursos. Este
hecho se ha convertido en una de los
mayores impulsos para que los padres/
madres de familia promuevan la asistencia de
los/as niños/as y jóvenes a la escuela, lo cual
se convierte en un impulso para salir de la
comunidad.
7
Corriente migratoria. Relacionado con el
tema anterior, está el imaginario migrante, ya
que alrededor de un 60 % de la población
tiene familiares que trabajan y/o residen
en los Estados Unidos. La organización
de cooperativas tendría que convertirse
en una opción para los y las jóvenes
egresados y egresadas de la preparatoria,
en contraposición con el imaginario
profesionalizante que promueve la escuela y
con la inercia de las corrientes migratorias,
la cual se ha presentado hasta ahora como la
mejor opción laboral.
A pesar de los enormes obstáculos y de la
pandemia, hay avances signicativos. La cooperativa
Natura, productora de cosméticos con base en la
herbolaria local ha consolidado su organización
con un total de 30 mujeres, quienes han logrado
7
Es notorio a que a diferencia de otras comunidades de condiciones
y tamaño similar tienen a duras penas una primaria, al contrario de
Tlamaya que cuenta con preparatoria. Además, se ha gestado la idea
de fundar una universidad propia.
sortear conictos internos, adversidades externas
de competencia o críticas. El problema más
acuciante en esta cooperativa es ahora la violencia
doméstica que han comenzado a sufrir algunas de
sus integrantes, en la medida en la que se empoderan
económica y socialmente.
Por otro lado, la cooperativa de ganadería ha
logrado organizar una carnicería, de modo que la
producción de ganado orgánico culmina el ciclo de
producción vendiendo su producto directamente al
consumidor; se ha difundido, al interior de Tlamaya
y en los alrededores, la calidad y el carácter más
saludable de la carne que produce la cooperativa.
La cooperativa de ecoturismo logró
permanecer a pesar de que la pandemia no permitió
sus actividades a lo largo de los años 2020 y 2021,
y ahora las retoman lanzando un nuevo paquete
turístico, en el cual se incluyen los alimentos y el
recorrido por el bosque. Las nueve mujeres de
esta cooperativa han acondicionado sus casas para
recibir a los turistas y les ofrecen las comidas con el
estilo y sazón propios de la comunidad, al mismo
tiempo que realizan talleres de cocina.
La cooperativa de productores es la que ha
avanzado ms lentamente, debido a conictos
internos y malos entendidos. Uno de los factores
ha sido que el presidente de la cooperativa,
joven originario de la comunidad, sustenta
una escolaridad muy por encima de los demás
miembros, de modo que su visión es muy diferente
y expresa cierto desarraigo de las costumbres y las
prácticas propiamente campesinas de las cuales se
ha alejado debido a sus estudios; esta situación ha
producido incomodidad y cierto resabio en algunos
de los demás cooperativistas. Por otro lado, han
tenido algunos problemas para comercializar el
lichi, fruto que se da en abundancia en la región.
60
SubSunción y memoria colectiva -
mayleth echegollen guzmán
de su memoria y su territorio, la cual es la base
de la ampliación de sus saberes en la medida en
la recuperan los cultivos locales, aprenden otro
modo de producir alimentos cárnicos, se apropian
de su territorio con el uso tanto cosmético como
terapéutico de la ora y herbolaria local y regional,
y muestran con orgullo sus bosques y su comida.
Todo ello a partir de procesos de organización y
producción colectiva; no sin conictos y tropiezos,
pero con un gran empeño por mejorar la vida de
sus familias y abrir una brecha en la larga historia de
pobreza, marginación y sobreexplotación.
Por eso proponemos al Kuojtakiloyan como
un modelo de desarrollo local y regional, digno de
ser estudiado, comprendido e imitado, en la medida
de nuestras posibilidades, de manera estratégica y
autónoma con los saberes especializados de la
ciencia moderna.
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No obstante, una joven ingeniera en alimentos,
junto con su esposo, han aprovechado el fruto
para procesarlo como compota y bebida. Durante
el mes de junio llevan a cabo la Feria del Litchi,
en la que se difunden y venden los productos, y se
conjugan todas las cooperativas.
CONCLUSIONES
Este ha sido sólo un breve recorrido por la
historia reciente de las formas en las que los
pobladores originarios de la Sierra Norte de
Puebla han enfrentado la pobreza, el desabasto,
la sobreexplotación, la imposición de tecnologías
ajenas y depredadoras, y han congurado otras
formas de producir alimentos, al mismo tiempo
que conservan los sistemas agroecológicos, y
consolidan las bases de su reproducción social.
En ese sentido, lo que aquí observamos son
procesos de contrasubsunción, la cual se puede
interpretar también como una forma de resistencia
frente al embate capitalista, procesos que tienden,
de manera no lineal, a la producción de formas
de autonomía y autogestión, ya que la subsunción
real supone la dirección de los capitalistas y la
implantación de su hegemonía, atravesando los
procesos de reproducción social de la comunidad.
Por tanto, el Kuojtakiloyan representa
contrasubsunción y autonomía, y los pobladores de
la Sierra Norte nos muestran cómo estos procesos
están estrechamente vinculados con la memoria
colectiva, esto es, con la recuperación de sus saberes
ancestrales, articulados de manera estratégica y
autónoma con los saberes especializados de la
ciencia moderna.
Las cooperativas en Tlamaya Grande han
comenzado el largo proceso de recuperación
61
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
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Universciencia
ISSN: 1665-6830
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 2.0 Genérica (CC BY-NC-ND 2.0)
https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.0/deed.es
the role of the sexual division of labor in the construction
of the masculine gender
Resumen
El presente trabajo tiene como objetivo analizar el papel de la división sexual
del trabajo en la construcción del género masculino como parte de un ejercicio
académico-formativo de la licenciatura en Psicología, de la Universidad Autónoma
Metropolitana, unidad Xochimilco. Para ello, se realizó una entrevista a profundidad
cualitativa y se analizó el material emanado a través de una técnica de interpretación
de sentido. Como resultados, se presenta el trabajo hermenéutico de interpretación
y análisis teórico-metodológico que da cuenta de la construcción discursiva de los
sujetos inscritos a la cultura, la familia, el género y al trabajo.
Palabras clave: género, masculinidad, división sexual del trabajo.
Abstract
This paper seeks to problematize the role of the sexual division of labor in the
construction of the masculine gender as part of an academic-training exercise for
the degree in Psychology from the Universidad Autónoma Metropolitana unidad
Xochimilco. This article also analyzes an interview on campus, which helps achieve
valuable data that analyzes a meaning interpretation technique. The hermeneutical
work of interpretation and theoretical-methodological analysis is presented, which
accounts for the discursive construction of the subjects enrolled in culture, family,
gender and work.
Key words: gender, masculinity, sexual division of labor.
1
Universidad Autónoma Metropolitana unidad Xochimilco. Estudiante de Licen-
ciatura. Ciudad de México, México. E-mail: 2203015947@alumnos.xoc.uam.mx
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3
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4
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5
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Ciudad de México, México. E-mail: danielzahid2001@gmail.com ORCID:
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6
Universidad Autónoma Metropolitana unidad Xochimilco. Profesora. Doctora.
Puebla, México. E-mail: maylethzamora@gmail.com ORCID: https://orcid.
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Universciencia
Enero-abril - Año 20 - Núm. 59 - 2022
http://revista.soyuo.mx/index.php/uc
universcienciasoyuo.mx
universciencia@soyuo.mx
Recepción: febrero-2022
Aceptación: marzo-2022
Pág. 63-77
regina
esparza Quesada
1
oscar andrés
grijalva loya
2
maría josé
maldonado de la cruz
3
ximena
reyes-martínez
4
daniel
sandoval núñez
5
mayleth alejandra
zamora echegollen
6
el papel de la división sexual del trabajo en la construcción
del género masculino
63
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
INTRODUCCIÓN
7
La presente pesquisa es resultado de un trabajo
de investigación trimestral del módulo V “Sujeto
y Cultura” de la licenciatura en Psicología de la
Universidad Autónoma Metropolitana, unidad
Xochimilco. En éste se encontrará una discusión
introductoria sobre el contexto en el cual se escribe
y del que emerge la investigación, al igual que las
discusiones teóricas bajo las que se analizará, más
adelante, el material empírico. Posteriormente,
se presenta la metodología y métodos que son
principalmente de corte cualitativo. Enseguida,
se discuten aquellos resultados obtenidos de la
entrevista cualitativa a profundidad y, nalmente,
se presentan las conclusiones.
Como parte de las actividades formativas, los
y las estudiantes deben realizar una investigación
que busque desarrollar y profundizar en los
procesos simbólicos necesarios para la producción
de subjetividad del ser humano. En otras palabras,
se parte de la premisa de que el ser humano es un
ser simbólico, condición que presenta cuestiones
fundamentales para la comprensión de la
subjetividad y del sujeto (Vargas et al., s/f).
Será a partir del proceso investigativo que
estudiantes y profesores se proponen problematizar
al ser humano como un ser desbiologizado, esto
es, que no se rige por “instintos” ni por impulsos
“naturales” o “biológicos” que, por el contrario,
suponemos que la materialidad -el cuerpo- es
producto de una serie de procesos simbólicos y
sociales que dotan de sentido al sujeto.
Para acercarnos a estas propuestas, se hace
necesario ahondar sobre aquellos procesos de
construcción de la subjetividad que son producidos
por el lenguaje, las construcciones discursivas
familiares, la sexualidad, la identidad de género y
las relaciones de poder.
Así, el problema eje del módulo V “Sujeto
y Cultura”, gira en torno a la construcción de un
sujeto del lenguaje y la construcción discursiva de
la historia familiar. En otras palabras ¿cuáles son los
procesos de naturaleza simbólica que constituyen
al sujeto? y ¿cuál es el papel de la familia en tales
procesos?
Bajo este marco es que esta investigación
busca dar cuenta del papel que funge la división
sexual del trabajo en la construcción del género
masculino, a partir del análisis del discurso del
sujeto y sus nociones en torno a la masculinidad.
No obstante, consideramos que el ejercicio
formativo no debera quedarse en una calicación
o una evaluación, sino ir más allá. De este modo,
proponemos presentar fragmentos del material
emanado de la entrevista cualitativa a profundidad,
con el objetivo de socializar y divulgar una de
las tantas técnicas cualitativas para el análisis
de información. Con ello, buscamos poner a
discusión los resultados construidos y, asimismo,
problematizar el papel de la división sexual del
trabajo en la construcción de la identidad masculina
de un sujeto inscrito en la sociedad mexicana.
La importancia y relevancia social de
reexionar en torno a este tema, se fundamenta en
que la división entre los sexos parece estar “en el
orden de las cosas ”, como si se pudiera adherir a
lo que es normal y natural, hasta el punto de ser
inevitable. Se presenta a un tiempo, tanto en las
cosas como en el mundo social y en los cuerpos y
en los hábitos de sus agentes, que funcionan como
sistemas de esquemas de percepciones, tanto de
7
Artículo original y derivado del proyecto de investigación titulado:
El papel de la división sexual del trabajo en la construcción del
género masculino, Ciudad de México, México.
64
El papEl dE la división sExual dEl trabajo En la construcción dEl génEro masculino - rEgina Esparza QuEsada,
oscar andrés grijalva loya, maría josé maldonado dE la cruz, ximEna rEyEs-martínEz,
daniEl zahid sandoval núñEz y maylEth alEjandra zamora EchEgollEn
pensamiento como de acción (Bourdieu, 1998, p.
10).
En ese sentido, la división sexual del trabajo
no sólo opera desde la objetividad que incentiva
a realizar ciertas tareas, sino, que formula los
esquemas dentro del pensamiento que terminarán
por presentarse y regir en la cotidianidad del sujeto
masculino. En palabras de Pierre Bourdieu (1998):
a través de la división sexual de las legítimas
utilizaciones del cuerpo se establecen los
usos públicos y activos de la parte masculina
-enfrentarse, afrontar, dar la cara, mirar a la
cara, a los ojos, tomar la palabra públicamente-
mientras la mujer que, se mantiene alejada
de los lugares públicos, debe renunciar a la
utilización pública de su mirada. (p. 16)
No obstante, esta inscripción del género en el
sujeto no es espontánea ni aparece de la nada, sino
que emerge y se inscribe a través de la institución
familiar, en donde, tanto hombres como mujeres,
introyectan las premisas de género y su rol acorde
a la división sexual del trabajo. (Lévi-Strauss, 1975;
Castoriadis, 2013)
Como señala Claude Lévi-Strauss (1975),
se logra destacar la premisa que rige dentro de la
unión conyugal e interpela a los sujetos en primera
instancia como un factor que responde a cuestiones
económicas y, en segunda instancia, como el
incentivo de una división sexual que operará en la
subjetividad del hombre y la mujer para establecerse
dentro de ésta. Este proceso de aceptación es
incuestionable “dado que la familia se nos aparece
como una realidad social positiva, tal vez la única
realidad social positiva […]” (1975, pp. 32-33) e
incluso se deende junto a los posicionamientos en
los que sitúa a los sujetos para la realización del
trabajo.
Este efecto tiene lugar debido a su condición
de institución, esto es, la familia se trata de una
“red simbólica, socialmente sancionada en la que
se combinan en proporción y en relación variables
un componente funcional y un componente
imaginario” (Castoriadis, 2013, p. 211). En otras
palabras, la familia es un entramado de prácticas
y discursos simbólicos e imaginarios que orientan,
delimitan e inscriben el sentido del mundo en el
sujeto, en este caso, del género.
8
En esta misma línea, Burin y Meler (1998),
denominan subjetividad sexuada, como aquello que
conforma al ser -socioculturalmente- a partir de su
sexo y las premisas alrededor de éste.
Dicho de otro modo, las autoras parten
de la premisa de la existencia de un proceso
sociohistórico a lo largo de los siglos que moldea
las nociones adjudicadas al hombre y a la mujer
(Burin y Meler, 1998).
Del breve y conciso recorrido histórico
que hacen para dar cuenta de estas nociones,
sobresalen las relaciones de poder y el carácter casi
omnipotente del hombre -en calidad de divino, de
académico, de conquistador, de burgués- que por
el aanzamiento del patriarcado
9
le ha permitido
colocarse en un lugar central, mientras que la mujer
ha sido puesta en un segundo plano (Burin y Meler,
1998).
Burin y Meler (1998) plantean que es a
partir de la Revolución Industrial donde surge un
cambio en el orden de subjetivación. Para entonces,
son los principios del trabajo productivo los que
instauran y dan la calidad de sujeto. Es en este
momento histórico donde ocurre un cambio en la
percepción de la familia, se le empieza a ver como
una institución personal e íntima de la sociedad.
La mujer pasa a ser clave en la esfera privada al
8
Y de muchas otras instituciones. La familia se trata de la institución
mediadora por excelencia y que se encarga de las primeras
socializaciones de la vida de los sujetos (Dubet y Martuccelli, 1998,
Donzelot, 2008).
9
Forma de poder político y social, que organiza, da sentido, orienta y
dirige prcticas y discursos de dominación del polo signicado como
lo masculino sobre el polo signicado como lo femenino (Pateman,
2006; Rich, 1986; de Beauvoir, 2019).
65
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
ser inscrita “naturalmente” a la producción de
sujetos, además de inscribirse a la idea de moral
materna (feminidad domesticada fundamentada en
la lógica del amor) para lograrse sujeto, mientras
que los hombres adherían “lo productivo”, “lo
individualista” y la rivalidad a su codicación
subjetiva (regida por la lógica racional y económica)
para responder y adecuarse a los procesos de la
época (pp. 74,75).
Dentro de este ideal histórico construido, es
decir, de lo que signica socialmente ser hombre y
ser mujer, se logra vislumbrar el ideal del hombre
trabajador, punto clave en la subjetividad masculina
para sustentar una serie de adecuaciones que dieron
lugar a un estereotipo de hombre idóneo que
lograra ejecutar aquellos trabajos ligados a mostrar
su virilidad y sostener la carga de ser quien proteja,
quien sustente y quien mantenga en pie a la familia,
así como aquel que realice tareas de riesgo sin
mostrar señal alguna de queja.
En la misma línea, Lamas (2015) señala
que, el punto de inexión de la masculinidad se
presenta en la muestra de la virilidad exacerbada.
Una virilidad que junto a la ocupación de la
masculinidad de aquellos trabajos en los que “dar la
caraes su principio, justica -desafortunadamente-
la exacerbación del ser “hombre” sobre el ser
“humano”.
De esta forma, se puede entender cómo es
que los hombres, creyendo que pueden soportar
todo, llegan a un punto de quiebre que no tratan
y hacen suya la idea que coloca a la productividad
y el trabajo como sus incentivos de vida, en la que
una conciliación con su familia pasa a un segundo
plano (Lamas, 2015).
De este modo, la masculinidad puede ser
una fuente de malestar, no sólo para quienes están
inscritos a ella. El privilegio que otorga no deja de
ser una trampa que encuentra su contrapartida en la
armación de cada hombre de su virilidad (Lamas,
2015). Por otro lado, la mujer ha quedado relegada a
la producción de hijos y cumplir la función materna
en el ámbito de la nutrición de los hijos, el sostén
emocional y los cuidados personales de estos para
ser lo que la sociedad calicara como una “madre
sucientemente buena” (Burin y Meler, 1998, p.
83).
Para un hombre que vive bajo las normas del
discurso de la productividad y el trabajo, pueden
llegar a presentarse ante él toda una serie de
señales que le indiquen el riesgo que corre y sufre,
sin embargo, por considerar como “natural” su
inscripción a estas normas, puede no darse cuenta
de su condición. Una condición que muchas veces
se esclarece sólo hasta el empeoramiento de la
salud o, en otro caso, cuando la familia resiente
el alejamiento del padre por estar cumpliendo sus
deberes “propios” de la masculinidad.
En ese sentido, se hace menester
problematizar y reexionar desde un marco que
dé cuenta de estos procesos constitutivos de la
subjetividad masculina. No solamente por su
implicación social en tanto que, es este modelo de
masculinidad el que impera en la sociedad actual.
Sino además que, esta aproximación posibilita la
reexión en torno a la teora de género, no sólo en
su formulación binaria -masculino y femenino-, sino
sobre el papel de las instituciones en la producción
de subjetividad para muchos otros géneros
10
ahora
reconocidos, normados e identicados, los cuales
suponemos, que no escapan a las inscripciones
más hegemónicas de los estereotipos del género
binarios.
10
Actualmente existe una serie de discusiones sobre la construcción
de géneros no binarios, as como el género uido y la pansexualidad.
Sírvase de ver: DGDC-UNAM (2019). El gnero no binario más allá
de lo masculino y lo femenino. UNAMirada la ciencia. DGDCUNAM
Divulgación de la ciencia.
66
El papEl dE la división sExual dEl trabajo En la construcción dEl génEro masculino - rEgina Esparza QuEsada,
oscar andrés grijalva loya, maría josé maldonado dE la cruz, ximEna rEyEs-martínEz,
daniEl zahid sandoval núñEz y maylEth alEjandra zamora EchEgollEn
DESARROLLO
De acuerdo con Taylor y Bogdan (1987), la
fenomenología busca atender los fenómenos
sociales desde la propia perspectiva del sujeto,
examinando así la forma en que percibe el mundo.
Por lo que, esta investigación parte del
principio fenomenológico para ahondar en
el discurso del sujeto y dar cuenta de aquellas
nociones y perspectivas que el sujeto tiene acerca de
la masculinidad y la división sexual del trabajo sin
interrumpir la presencia de sentimientos y sentires
propios del sujeto una vez establecido el rapport.
11
La fenomenología se pone en, primer plano,
para el análisis de la subjetividad abordada a
través de la manera en que el sujeto introyecta las
premisas de género alrededor de la división sexual
del trabajo, ya que considera aquellas “fuerzas que
mueven a los seres humanos como seres humanos
y no simplemente como cuerpos humanos” (Taylor
y Bogdan, 1987, p. 16). Es la que considera al sujeto
y sus ideas, sentimientos y motivos internos como
“materia signicativa”.
El método idóneo para abordar nuestra
investigación es de carácter cualitativo, debido al
tipo de análisis e información que se busca obtener,
según Balcázar Nava et al. (2013):
[…] en la recogida de datos, el investigador
dispone de diversas técnicas entre las que se
encuentra la entrevista, que es una técnica
donde se tiene una interacción cara a cara con
la otra persona, mediante preguntas a través
de las cuales se obtienen algunos datos. (p. 57)
En ese sentido, se optó como instrumento de
recolección de información a la entrevista cualitativa
a profundidad. Balczar Nava et al. (2013) dene
a la entrevista como “una técnica dentro de la
metodología cualitativa que se utiliza para obtener
información verbal de uno o varios sujetos a
partir de un cuestionario o guion de temas [...] La
entrevista es una conversación con un propósito”
(p. 58).
Asimismo, como fundamentación teórica,
se retomaron discusiones de la teoría de género
expuestas por autoras como Lamas (1996; 2015),
Burin y Meler (1998), Dio Bleichmar (1985) y
Guttman (1998). Por otro lado, se recuperan las
discusiones sobre la institución familiar de Lévi-
Strauss (1975). Y nalmente, sobre la división
sexual del trabajo, al autor anteriormente citado y a
Pierre Bourdieu (1998).
La entrevista a profundidad se realizó en
la Ciudad de México (CDMX) el 10 de abril del
2022 con una duración de 60 minutos. Se realizó
una transcripción del audio de la entrevista; este
material se dividió en intervalos de 15 minutos para
que cada integrante pudiera realizar una parte de la
transcripción. Se utilizaron diversos métodos para
capturar la información según las preferencias de
cada uno. Entre las técnicas estuvieron el dictado
de voz y la transcripción tradicional, en la que
se escribe la información mientras se escucha la
grabación de la entrevista.
Para la transcripción, se utilizó un código
alfabético para identicar quién tena la palabra a
cada momento de la entrevista. Al inicio de cada
diálogo se encuentra una letra que representa la
inicial del nombre del participante en turno: “O”
para Oscar, “R” para Regina, “X” para Ximena,
“Z” para Zahid y “E” para el sujeto entrevistador.
11
“El rapport se reere al vnculo transferencial que se establece entre
dos personas” (Zamora y Dabdoub, 2021, p. 12) o más personas. En
este contexto, nos referimos al vínculo que se entabla entre los y las
investigadoras y el sujeto entrevistado.
67
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
El entrevistado se trata de un hombre
de 65 años que actualmente vive solo en su
departamento. Estudió la carrera de ingeniería
mecánica y posteriormente laboró en una empresa
de lubricación industrial, donde llegó a ser jefe de
mantenimiento. Después trabajó en una empresa
maquiladora de cajas de cartón para la industria
de cerveza Corona. También formó parte de la
empresa norteamericana Has Chemical, que hace
servicios de administración para la General Motors de
México, donde trabajó hasta los 53 años. Finalmente
abrió un negocio propio, un expendio de pan
bimbo que mantuvo por 10 años. Actualmente está
pensionado por el Seguro Social. En cuanto a su
familia, el entrevistado nunca ha estado casado ni
tiene hijos, pero tiene actualmente un hermano y
dos hermanas con vida.
RESULTADOS
Para el análisis del material de la entrevista se utilizó
la técnica de interpretación por signicado, en
donde él o la intérprete, debe ir “más allá” de lo que
se dice directamente en el discurso para concebir
estructuras y relaciones de signicado que no son
aparentes de modo inmediato en un texto. Lo
anterior se fundamenta en el método hermenéutico
de interpretación de textos, por lo que implica una
explicación de los principios generales que se han
encontrado en cierto párrafo o en el discurso que
son considerados como útiles para el propio análisis
(Kvale, 2008).
La interpretación del signicado de los textos
de entrevista va más allá de una estructuración de
los contenidos maniestos de lo que se dice, hacia
interpretaciones más profundas y críticas del texto.
“Para interpretaciones profundas y críticas del
signicado, son ventajosas las descripciones ricas y
matizadas en las entrevistas, así como las preguntas
interpretativas críticas durante la entrevista” (Kvale,
2008, pp. 142-143).
Para realizar el análisis a partir de la
interpretación por signicado, se usaron las
categorías teóricas para dividir cada aspecto
a analizar de acuerdo con una categoría en
especco y lograr la comprensión de éste. Las
categorías teóricas que empleamos son: género,
sistemas de género, familia, división sexual del
trabajo y masculinidad, las cuales se desarrollan
a continuación junto con el trabajo de análisis de
interpretación del signicado.
Sistemas de género
X: Si, por ejemplo, tu estudiaste ingeniería,
¿no? y en la escuela, ¿En la universidad
había más mujeres en la carrera? ¿Eran más
hombres? Si había mujeres, ¿cómo trataban
ahí a las mujeres?
E: No era más... Había más hombres, siempre
hubo más hombres en la escuela, desde la
vocacional, siempre hubo más hombres
y obviamente si era difícil para ellas eh... el
rol que jugaban en... en...en cuanto a querer
ser este... estudiar la carrera de ingeniería
porque... pues como siempre se dice, ¿no?...
“es muy difícil aprender matemáticas” y dicen
“para las mujeres más”, según, porque...
quieren lo más sencillo, más sencillo [...].
incluso nuestros maestros eh... tenían...
comentarios... eh... en contra de las mujeres
que querían estudiar la carrera, “no mejor
vete estudiar eh... actuación”, “mejor vete
estudiar otra cosa que si vaya a tú... a tú... a
tú… feminidad [...] Es como tú, si fueras... si
te metes a estudiar este... medicina pues ahí si
vas a encontrar muchas doctoras y doctores
es más fácil esa carrera que la de ingeniería
(Extracto de la transcripción de la entrevista).
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El papEl dE la división sExual dEl trabajo En la construcción dEl génEro masculino - rEgina Esparza QuEsada,
oscar andrés grijalva loya, maría josé maldonado dE la cruz, ximEna rEyEs-martínEz,
daniEl zahid sandoval núñEz y maylEth alEjandra zamora EchEgollEn
Bodin (1980, citado en Roudinesco, 2002)
sitúa lo masculino del lado de la razón y lo femenino
del lado del apetito pasional. Se adjudican algunas
características atribuidas a lo femenino como la
pasividad, vulnerabilidad, emocionalidad, dulzura
y el cuidado hacia los demás (Burin y Meler, 2000;
Polaino, 2007, como se citó en Lora del Águila,
2016). Estas características logran vislumbrar
la prevalencia de los sistemas binarios que se
presentaron a lo largo de la vida del entrevistado,
que, al desarrollarse profesional y laboralmente,
se encontró con diferentes escenarios en los que
reinaba un orden jerárquico a la hora de visualizar
las relaciones de su entorno y la convivencia entre
sus pares. Un hecho que contrasta con lo que
plantea Lamas (2013, p. 32) al mencionar que existe
una “dicotomía en la manera en que visualizamos
aquellas asociaciones simbólicas relativas al género,
siempre colocando una diferenciación entre
mujeres y hombres a partir de una signicación
y organización cultural que tiende a generar
relaciones de desigualdad”.
De esta manera, se vuelve necesario pensar
en lo que Braunstein (1979), quien describe como
la adecuación del sujeto a su entorno y la presencia
de dinámicas y situaciones en la vida como agentes
de resonancia que dan pauta a un discurso del
cual el sujeto inscribe su percepción del mundo y
que, además, lo vuelve reproductor y soporte del
material que da sustento a los sistemas de género
presentes en la cotidianidad. Un hecho que guró
al analizar la manera en que el entrevistado adjudica
tareas a lo femenino y a lo masculino.
Masculinidad
O: ¿Cómo era eso de… de estar en casa con
más niñas y..?
E: Pues es que, este de, uno se acostumbra
y te vuelves protector, te vuelves protector
para, para ayudar a tus hermanas, que no
les pase nada, que este, que cuente con uno
como apoyo, es este básicamente lo que hace
que uno conviva bien con la familia (Extracto
de la transcripción de la entrevista).
Entre las signicaciones en torno a lo masculino,
se sostiene que un hombre debe ser valiente
y protector, especialmente cuando se trata de
defender a sus mujeres (sean madres, hermanas,
parejas, etc.). Como menciona Inda (1996, p. 221)
“El sexismo de las debilidades va produciendo un
asistemático pero contundente adiestramiento en
lo que sería deseable de un varoncito: defender a las
hermanas; enfrentar los peligros; ganar en las peleas;
sobresalir en los deportes; en las profesiones; tener
una sexualidad frecuente, etc.”.
O: Okey, y ¿y eso de la protección te, te lo
decían tus papás...?
E: No, fue
O: ¿O fue como propio así tan así?
E: Sale de uno, uno, uno lo hace por instinto
yo creo, porque pues ves, no permites que,
que maltraten a tus, a tus hermanas (Extracto
de la transcripción de la entrevista).
Los sistemas de signicaciones alrededor del género,
como se ha mencionado, están cotidianamente
fundamentados desde la biología, naturalizando
estas cualidades como parte del ser hombre. “Porque
el género está adscrito al rol, estas expectativas de
rol son concebidas como la más pura expresión
de las fuentes biológicas del género” (Bleichmar,
1985, p. 44). Es por lo que el entrevistado, lejos de
considerar una imposición, calica de “instintivas”
estas pulsiones de protección a los demás.
E: Incluso con... si con uno mismo que de su
mismo sexo, pero tienes un rango más que
ellos, se enfrentan contigo para confrontar las
ideas y tú tienes que demostrar que realmente
69
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
sabes más que ellos para que te hagan caso
[…] (Extracto de la transcripción de la
entrevista).
Aquí, a través de sus vivencias, el sujeto
entrevistado nos describe una realidad imperante
sobre la idea del “ser hombre” que impone la
rivalidad y competitividad en busca de más éxito
y ms reconocimiento, a n de conrmarse como
superiores (Burin y Meler, 2000; Polaino, 2007, como
se citó en Lora del Águila, 2016, p. 12) y abandonar
el rol pasivo. Dice Hacker, (1992, como se citó en
Inda, 1996, p. 226) que “la masculinidad es para
los varones más importante que la feminidad para
las mujeres”. Por eso, a veces, ciertos prototipos
de lo varonil parecen maquetas que lindan con lo
grotesco, es decir, hombres unidimensionales a lo
Rambo.
12
E: «yo a trabajar y yo a traer dinero y yo a
juntarme con mujeres y yo a este... a tener
relación de eh, eh, eh con estar con muchas
mujeres» porque es lo que un hombre tiene
que mentalmente está preparado para
eso, ir a tomar y juntarse con una mujer este...
después a la mejor convencerla y que se vaya
a tener relaciones contigo, eso ya... como
que va pasando de moda [...] (Extracto de la
transcripción de la entrevista).
La frase “un hombre tiene que estar mentalmente
preparado para eso” denota lo naturalizado que está
el rol genérico en la identidad del varón y el discurso
del entrevistado, eliminando las particularidades
de los sujetos. “La adecuación al rol genérico ha
sido particularmente ejercida por los varones, que
confunden identidad personal con identidad de género”
(Inda, 1996, pp. 212-213). Entre otras formas, los
hombres refuerzan su virilidad a través de su rol activo
en las relaciones sexuales, a costa de la pasividad sexual
femenina (Fernández, 1993). El hombre activo que
coquetea y depreda a las mujeres es una idea asociada a
la masculinidad y que se logró encontrar en el discurso
del entrevistado.
Familia
Según Burin (1998), el hombre desempeña dos
roles en la sociedad, por lo que tiene dos fuentes de
satisfacción alternas: la familia y el trabajo.
¿Y tu papá cómo era?
E: Mi papá muy trabajador, mi papá era,
pues el centro de la familia, él trabajaba, tenía
varios, varios trabajos para ayudar a solventar
los gastos de la casa […] (Extracto de la
transcripción de la entrevista).
Al padre, al ser considerado como el centro y jefe
de la familia a lo largo de la historia, se le atribuyen
responsabilidades sobre quienes dependen de él, y
se instaura la idea del padre como el proveedor. El
“ideal de trabajo” es constitutivo de la subjetividad
masculina (Burin y Meler, 1998, p. 76). En la “acción
y el límite del esfuerzo se funda una virilidad”,
que es confundida con masculinidad (Inda, 1996,
p. 222), y se coloca a la productividad y el trabajo
como el incentivo de vida de los hombres (Lamas,
2015).
R: […] ¿Podrías contarnos un poco sobre
cómo era la dinámica en tu casa, cuando eras
pequeño?
E: Cuando era pequeño, pues muy bien, yo
tuve la suerte de tener, eh, todavía eh la época
de que tenía, había mu… muchos valores
en la casa, siempre estuvo con nosotros mi
mamá, y mi papá, nunca que me acuerde yo
que yo haya llegado de la escuela y no haya
habido alguien, estem mi mamá, siempre
estaba, siempre hubo que comer […] todos
12
Nos referimos a la célebre película dirigida y protagonizada por
Sylvester Stallone en 1982, donde se fetichiza la gura de un hombre
hiper masculinizado, musculoso, violento, carente de emociones,
rudo, etc.
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El papEl dE la división sExual dEl trabajo En la construcción dEl génEro masculino - rEgina Esparza QuEsada,
oscar andrés grijalva loya, maría josé maldonado dE la cruz, ximEna rEyEs-martínEz,
daniEl zahid sandoval núñEz y maylEth alEjandra zamora EchEgollEn
División sexual del trabajo
O: Eh... ¿tú entonces cómo entiendes, ¿cuál
es el papel de la mujer y cuál es el papel del
hombre?
E: No pues para mí... no hay más... desde el
principio así fue creado el hombre y la mujer,
cada quien con sus eh... tareas que... que fueron
puestas, a lo mejor y... tiene uno que entender
que las mujeres quieren desarrollarse más y
hay que apoyarlas, no puedes cortar la... la
libertad de una persona por tus creencias […]
(Extracto de la transcripción de la entrevista).
La idea de que el hombre y la mujer nacen con
ciertas tareas es un pensamiento fundamentado en
el paradigma de las décadas de los 40 y 50, donde
las explicaciones del género basadas en la biología
eran imperantes (Conway, Bourque y Scott, 1996).
Según Parsons (citado en Conway, Bourque y
Scott, 1996, p. 22) “la división fundamental entre
el comportamiento instrumental de los hombres
y el expresivo de las mujeres trascendía los límites
de las clases y las culturas nacionales”. Dicha
naturalización del género deviene en la creencia de
que hay actividades exclusivas para hombres y para
mujeres. Retomando lo que escribe Lévi-Strauss
(1975) la división sexual del trabajo corresponde
más a consideraciones sociales y culturales que a
consideraciones biológicas, y si bien es importante
situar la universalidad que existe en la repartición
de trabajos acorde a los sexos, el autor expone que
es a partir de consideraciones culturales donde se
debiera jar el anlisis de la manera en que son
repartidas dichas tareas, además plantea que es
“la articialidad que reina en la organización de
la familia donde se nutre esta división sexual del
trabajo” (pp. 31-32 ).
nos respetábamos, respetábamos mucho a la
familia, a papás, mamás, abuelos, tíos, siempre
teníamos mucha, este, respeto por ellos, no
necesitábamos que nos, este… llamaran la
atención, a mí que yo me acuerde, nunca,
nunca en la vida mi mamá ni mi papá me
dieron un golpe, nunca me, todo fue hablado
y bien, o sea que una va eh reaccionando
según como van las cosas en la casa, gracias
a esa, a esa educación fue que mis hermanos
como yo vivimos una vida muy bien ahora,
este, con mucha solvencia económica porque
nos gustó trabajar, y estem… es la base de eso
fue la unión familiar, que nunca nos dejaron
nuestros papás ni un momento (Extracto de
la transcripción de la entrevista).
Se logra ver que el entrevistado adjudica los valores
y las características necesarias para responder en
la sociedad a la educación que le impartieron sus
padres tanto a él como a sus hermanos. Se vuelve
así necesario hacer alusión a lo que Burin y Meler
(1998) dan cuenta sobre “la familia nuclear como
la embajadora de las funciones relacionales y
personales del sujeto” como “la esfera personal e
íntima de la sociedad que cumple con la ampliación
de las funciones emocionales y constitutivas de la
subjetividad y el discurso” (pp. 75-76). En contraste
con el papel de su padre como embajador de las
funciones que ejecuta el varón y la constitución
de su familia con todas las características de
una familia nuclear, se puede inferir que el
entrevistado construye un discurso sobre el trabajo
y el ser productivo que, si bien corresponde a su
identicación con lo masculino -como lo explican
Burin y Meler (1998) “es aanzado por las funciones
que desempeñó su familia en su crecimiento” (pp.
79).
71
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
denen por ser trabajadores, proveedores de dinero
y “mujeriegos”, entre muchas otras características
que no se mencionan en este fragmento de su
discurso. Sin embargo, este último comentario
“como que va pasando de moda”, vislumbra que,
dentro de su subjetividad, hay una resignicación
sobre los mandatos de lo masculino y femenino que
le permite cuestionar las concepciones tradicionales
respecto a la división sexual del trabajo.
R: No, mmm ¿consideras que el identicarte
como hombre, te ha impuesto algunas
condiciones a lo largo de tu vida sobre cómo
tendría que ser tu trabajo?
E: Pues no, yo creo que tú lo, tú lo buscas,
tú sabes... tú cómo de acuerdo a cómo te has
vivido tu vida, tú sabes si te vas a ir a buscar
un trabajo, no necesariamente tienes que irte a
buscar un trabajo de hombre... según porqué
no, no hay ya es más difícil puedes ser una...
un ser masculino, ser hombre y dedicarte por
ejemplo a peluquero y no por ser peluquero
vas a ser dejar de ser hombre o te vas a
comparar a ser más mujer que hombre, no,
si tú eres hombre y te dedicas a algo propio
de una mujer no vas a perder la masculinidad,
siempre y cuando tú la impongas como es, no,
no que después te dejes llevar […] (Extracto
de la transcripción de la entrevista).
Es interesante observar cómo a pesar de que el
entrevistado no cree que hoy en día haya actividades
exclusivas para hombres o mujeres, sí asocia
naturalmente ciertas profesiones y conceptos a
lo que es masculino o femenino. Por ejemplo, la
asociación del ocio de peluquera al campo de la
femineidad en relación con que son las mujeres
quienes comúnmente, se cree, están más inclinadas
por el cuidado de la imagen personal. Podemos
observar a través de este análisis cómo mediante el
género, entendido como “la red de creencias, rasgos
de personalidad, actitudes, valores, conductas y
A raíz de estas distinciones es instaurada la
división sexual del trabajo, en que los hombres son
posicionados en la esfera pública, y les es asignado
el papel de proveedor de la casa; mientras que
las mujeres, desde la esfera privada, se vuelven
responsables del trabajo doméstico y de los hijos.
A pesar de que el entrevistado reexiona sobre los
roles de género establecidos por esta división de
tareas que ejercen violencia sistemática y coartan
la libertad de los individuos, entre su discurso se
aprecia que en su subjetividad aún se encuentra
muy arraigada la naturalización de la división sexual
del trabajo; producto de las complejas interacciones
dentro del sistema social en que se desenvuelve
(Conway, Bourque y Scott, 1996). Sin embargo,
se aprecia un cuestionamiento a las premisas de la
división sexual del trabajo.
E: Todo tiene su... su complemento, su igual,
ya no es tan sencillo separar las actividades de
los hombres y de las mujeres, antes si separaba
muy fácil, «tú a tú cocina, tú a tú casa, tu
planchar y lavar y eso» y «yo a trabajar y yo
a traer dinero y yo a juntarme con mujeres
y yo a este... a tener relación de eh, eh, eh
con estar con muchas mujeres» […] como
que va pasando de moda […] (Extracto de la
transcripción de la entrevista).
Si bien el sujeto entrevistado cuestiona la división
de tareas con base en los roles de género, en su
discurso se remarca que en su subjetividad están
fuertemente instauradas las distinciones de los
roles de género y las actividades que son asociadas
a hombres o mujeres dentro de la familia. Dentro
de su discurso, observamos las exigencias de
las signicaciones sociales hacia las mujeres
para cumplir con su rol doméstico y maternal
(Fernández, 1993); así como la prevalencia de la
premisa de género que dicta que los hombres se
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El papEl dE la división sExual dEl trabajo En la construcción dEl génEro masculino - rEgina Esparza QuEsada,
oscar andrés grijalva loya, maría josé maldonado dE la cruz, ximEna rEyEs-martínEz,
daniEl zahid sandoval núñEz y maylEth alEjandra zamora EchEgollEn
de un amplio espectro de instituciones económicas,
sociales, políticas y religiosas”.
Esta adecuación e introyección de las
premisas de género construidas alrededor de la
división sexual del trabajo se logran entender según
Braunstein (1979) a partir de la adecuación del
sujeto y su discurso a un condicionamiento socio
histórico que, por su parte, las autoras Burin y
Meler (1998) daban cuenta al hablar de la subjetividad
sexuada.
Para el análisis del material de la entrevista se
utilizó la técnica de interpretación por signicado;
en donde él o la intérprete debe ir “más allá” de
lo que se dice directamente en el discurso para
concebir estructuras y relaciones de signicado
que no son aparentes de modo inmediato en un
texto. Se basa en el método hermenéutico de
interpretación de textos, por lo que implica una
explicación de los principios generales que se han
encontrado en cierto párrafo o en el discurso que
son considerados como útiles para el propio análisis.
La interpretación del signicado de los textos de
entrevista va más allá de una estructuración de los
contenidos maniestos de lo que se dice, hacia
interpretaciones más profundas y críticas del texto.
Para interpretaciones profundas y críticas del
signicado, son ventajosas las descripciones ricas y
matizadas en las entrevistas, así como las preguntas
interpretativas críticas durante la entrevista (Kvale,
2008).
Para realizar el análisis a partir de la
interpretación por signicado, se usaron las
categorías teóricas para dividir cada aspecto a analizar
de acuerdo con una categora en especco y lograr
la comprensión de este. Las categorías teóricas que
empleamos son: género, sistemas de género, familia,
actividades que diferencian a hombres y mujeres”
(Burin y Meler 2004, como se citó en Schongut-
Grollmus, 2012, p. 37) se naturalizan algunas
prácticas sociales como los trabajos, profesiones
y/o actividades. Esperando que las mujeres se
dediquen a lo que est socialmente denido a lo
femenino y los hombres a lo socialmente denido
a lo masculino y aun actualmente es mal visto que,
por ejemplo, una mujer sea mecánica, ya que es un
trabajo socialmente denido a lo masculino.
R: Bueno... y siguiendo con estas preguntas
este... ¿Tú te consideras masculino?
¿Consideras que eres un hombre masculino?
E: Si, si, porque respeto... respeto... mi
masculinidad... y respeto a las, a las mujeres
como son... las respeto, nunca les cómo... a
lo mejor suena redundante, no les faltó al
respeto, siempre tengo a la mujer como lo que
es, no... no... claro que siempre decimos “no
las mujeres son así, así son muy necias, son
muy positivas” pues sí, pero, cada quien tiene
su manera de ser por... porque así es la... pues
así es tanto lo masculino como lo femenino,
así son las cosas (Extracto de la transcripción
de la entrevista).
Observamos entre líneas del discurso del
entrevistado la cristalización de estas asociaciones
de ideas respecto a lo masculino o lo femenino,
que han penetrado en su propia subjetividad. Esta
naturalización de los roles y tareas que se inscriben
en lo masculino y femenino se percibe dentro del
discurso del entrevistado y se hace legítima en su
subjetividad de acuerdo al proceso que describen
Conway, Bourque y Scott (1987, p. 23): “La
producción de formas culturalmente apropiadas
respecto al comportamiento de los hombres y las
mujeres, es una función central de la autoridad
social y está mediada por la compleja interacción
73
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
asignadas por medio de instituciones sociales
como la familia. Burin y Meler (1998) al hablar
de la familia nuclear como aanzadora de ciertas
características de la masculinidad, dan cuenta de
que lo productivo, lo individualista y la rivalidad
en el espectro de la masculinidad son propios de
una construcción sociohistórica que responde a un
ámbito cultural más que a algo biológico.
Los autores Conway, Bourque y Scott (1996)
completan este planteamiento al decir que la idea
que establece que el hombre y la mujer nacen con
ciertas tareas y características es un pensamiento
fundamentado en el paradigma de las décadas de
los 40 y 50, donde las explicaciones del género
basadas en la biología eran imperantes, así podría
entenderse la manera en que el sujeto entrevistado
visualiza ciertas características y papeles como algo
natural o innato de la masculinidad.
Asimismo, aparecen los sistemas de género
como un factor que interpela en la subjetividad
del entrevistado, y que encuentra un punto de
denotación en la adjudicación de ciertos papeles
para el hombre y la mujer en torno a la división
sexual del trabajo. Adjudicación que el entrevistado
a naturalizado y sobre la cual identica los rasgos
de la masculinidad para aquellas tareas que ocupan
fuerza y destreza.
CONCLUSIONES
Marta Lamas (2013) menciona que la aparición de
nuevos estudios alrededor del género da cuenta del
dinamismo que ha existido a lo largo de la historia
en la visualización de aquellas adscripciones que
tanto la masculinidad como la feminidad han
sido parte. Si bien ha existido una transformación
y cuestionamiento sobre aquellas funciones,
territorios y trabajos que antes se consideraban
parte de uno u otro sexo, es la persistencia de
división sexual del trabajo y masculinidad. Dentro
del discurso del entrevistado se logran destacar dos
puntos esenciales que engloban las características
de la construcción masculina a partir de la división
sexual del trabajo. El primero corresponde a lo
que las autoras Burin y Meler (1998) denen como
“subjetividad sexuada” y el segundo contrasta con
lo que Bleichmar (1985, p. 44) plantea acerca de
los sistemas de signicaciones alrededor del género
fundamentados desde la biología y naturalizados en
la subjetividad masculina.
Desde la infancia del sujeto se presentaron
dinámicas en la familia que, si bien le permitieron
tener cierta reexividad sobre los cuestionamientos
del rol de género, por ejemplo, al ver que su
madre trabajaba además de ser embajadora de las
funciones maternas en el hogar, hicieron resonancia
en su discurso a partir de las características tanto
masculinas y femeninas que relucían en la ejecución
de los trabajos y tareas que realizaban tanto su
padre como su madre.
De esta manera, el ideal de la masculinidad
inscrita a la división sexual del trabajo, nutrió
aquellas ideas suyas sobre el hombre trabajador,
productivo, protector, que da la cara, que hace valer
su palabra y se hace respetar en la sociedad. Ideas
que el entrevistado considera como características
innatas al ser masculino y que pueden observarse
en paralelo con el ideal de la familia como un
núcleo de perfección e intimidad donde el sujeto
adquiere todas las características necesarias que den
fundamento a su discurso.
Esta relación contrasta con el concepto de
género que denen Burin y Meler (2004, como se
citó en Schongut-Grollmus (2012) al plantearlo
como “la red de creencias, rasgos de personalidad,
actitudes, valores, conductas y actividades que
diferencian a hombres y mujeres” (p. 37). Dichas
características son socialmente construidas y
74
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oscar andrés grijalva loya, maría josé maldonado dE la cruz, ximEna rEyEs-martínEz,
daniEl zahid sandoval núñEz y maylEth alEjandra zamora EchEgollEn
aquellos rasgos detrás de la adjudicación de
éstos que arroja luz a la manera en que el sujeto
es sometido a las premisas de género construidas
sociohistóricamente y que además se han legitimado
por las instituciones.
Si bien, no se ahondó sobre el papel de
las instituciones como la escuela o las empresas
donde el sujeto laboró, se pudo identicar que la
institución de la familia fungió un papel importante
en la instauración de aquellos aspectos que dan
fundamento a la división sexual del trabajo.
De este modo, se hace vigente el
planteamiento de Claude Lévi-Strauss (1975)
que señala como rasgo primordial existente en
todos los tipos de familia a la división sexual del
trabajo. Al ver la familia como un grupo basado en
la dependencia de ambos sexos, la realización de
tareas para cumplir con este rasgo conlleva a pensar
a qué tipo de tareas se adscribe la masculinidad.
En ese sentido, las ideas que constituyen la
identidad masculina se instauran en la identidad
de los sujetos varones a través de las redes de
signicaciones que conforman el imaginario
social, entendido por Fernández (1993) como “los
universos de signicaciones imaginarias sociales
operan como organizadores de sentido de los
actos humanos” (p. 243) de nuestra cultura. Estas
signicaciones, entendidas como producciones de
sentido organizador, se transmiten a los individuos
desde su nacimiento, cuando se les adjudica un
género y posteriormente con la instauración del
núcleo de identidad de género (Bleichmar, 1985).
Dicho de otro modo, en la infancia los niños
aprenden a distinguir las actividades y características
propias de los roles de género masculino o
femenino, tanto en el entorno familiar, con el
ejemplo de guras paternas y maternas; como en
el entorno social.
La división sexual del trabajo da cuenta
de estas distinciones entre lo que conguran los
sistemas de género, y en concordancia, organiza
las actividades económicas indispensables para la
supervivencia conyugal y en familia, estableciendo
la dependencia entre los sexos (Lévi-Strauss, 1975).
Así, la necesidad de ser exitoso y competitivo y
la capacidad de control completo e impenetrabilidad
sobre las emociones (Burin y Meler, 2000; Polaino,
2007, como se citó en Lora del Águila, 2016), así
como el ideal de trabajo, que es “constitutivo de
la subjetividad masculina” (Burin y Meler, 1998,
p. 76) son clave para el posicionamiento histórico
del hombre en la esfera pública, donde residen
sus deberes de acuerdo con los mandatos de la
división sexual del trabajo en nuestra cultura. Por
el contrario, las mujeres son relegadas a la esfera
privada, y su condición de mujeres se reduce al rol
doméstico, maternal y conyugal (Fernández, 1993).
Por ende, a través de esta investigación se
cumplió el objetivo de analizar y comprender
el papel de la división sexual del trabajo en la
conformación de la identidad masculina; se ha
identicado cómo es que el papel de trabajador
empedernido, impuesto al hombre a través de la
división sexual del trabajo, es pieza clave del ideal
de identidad masculina en el imaginario social, ya
que es la más pura expresión de las características
adjudicadas culturalmente a lo varonil.
Esta investigación da cuenta del discurso que
se ha construido alrededor de la división sexual del
trabajo, además, deja en claro que la instauración
de los aspectos y características adheridas a lo
masculino en el orden psíquico del sujeto provienen
desde las prácticas cotidianas en el hogar, el trabajo
y diferentes deberes en los que ocurre esta división
sexual para la realización de tareas.
75
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A la vez, presenta de manera clara que aquellas
premisas acerca de la productividad, cumplimiento
y responsabilidad del hombre en cuanto a su
trabajo son puntos de consideración al momento
de analizar aspectos como: sus ideas de realización
personal, la manera en que se desenvuelven con sus
pares tanto en su trabajo como en la cotidianidad,
su ideal de ser-protector, sus ideas referentes al
lugar del hombre en la familia y el reforzamiento
del mito hombre=fuerza, aguante, soporte,
sacricio. Dejando a la luz que existe un proceso de
desubjetivación como ocurre en el sujeto femenino
al vérsele sólo como productora de hijos y orillada al
cuidado personal, nutricional y emocional de estos,
pero no de la misma manera. En el caso del sujeto
masculino, este proceso lo orilla a percibirse como
productor, proveedor, cuidador, defensor, como
alguien fuerte y resistente al grado de congurar
e introyectar las premisas de su género para
sentirse triunfador por ser ejecutor de las mismas,
reforzando así el discurso de la competitividad y
productividad del hombre.
Mientras la mujer ha sido orillada a ocupar
un lugar de sumisión, dependencia y producción
de hijos, el hombre ha respondido a la calidad
de omnipotente desde lo simbólico de Dios, de
empleador de fuerza e individualista y productivo.
Son estas inscripciones de la masculinidad las
mismas que dan sustento a la lógica racional y
económica de la que el hombre encuentra partida
y resonancia con sus iguales masculinos para
reproducir el discurso.
76
El papEl dE la división sExual dEl trabajo En la construcción dEl génEro masculino - rEgina Esparza QuEsada,
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pdf
77
Universciencia
ISSN: 1665-6830
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 2.0 Genérica (CC BY-NC-ND 2.0)
https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.0/deed.es
Universciencia
Enero-abril - Año 20 - Núm. 59 - 2022
http://revista.soyuo.mx/index.php/uc
universcienciasoyuo.mx
universciencia@soyuo.mx
Recepción: enero-2022
Aceptación: febrero-2022
Pág. 79-97
development of lines of research regarding especial education
necessities and their relationship With latin american
and caribbean public politics
Resumen
La inclusión es un proceso que propone que la totalidad de los alumnos aprendan de la misma
manera sin modicar el proceso de enseñanza; empero este debe seguir un conjunto de pasos
y ltros que responden a las polticas públicas de cada pas. As, esta Revisión Rpida analiza
la relación entre las políticas públicas y las principales líneas de investigación de los países de
América Latina y el Caribe (ALC) con más artículos publicados en materia de atención a las
necesidades educativas especiales (NEE), en el periodo 2019-2020. Para ello, se analizaron
44 artculos identicados en los buscadores académicos: SciELO, Redalyc y Dialnet. Los
resultados reeren que los pases con mayor número de publicaciones en el periodo señalado
son: Cuba, Chile y México, estas se agrupan en cuatro líneas de investigación: “Evaluación
del contexto: familiar, escolar y social en materia de inclusión”, “Análisis de políticas
públicas relacionadas con la inclusión”, “Aplicación de estrategias psicopedagógicas para las
necesidades educativas especiales” y “Formación docente para la Inclusión educativas”. Se
concluye que las líneas de investigación no responden a las políticas públicas implementadas
en cada pas, ya que en su mayora. los artculos reeren a investigaciones documentales o
cualitativas enfocadas a evaluar el contexto escolar y familiar, así como a revisar documentos
enfocados en las políticas públicas.
Palabras clave: política educativa, educación inclusiva, América Latina y Caribe.
Abstract
Inclusion is a process that proposes that all students learn in the same way without modifying
the teaching process; however, it must follow a set of steps and lters that respond to the public
policies of each country. Thus, this Quick Review analyzes the relationship between public
policies and the main lines of research in the countries of Latin America and the Caribbean
(LAC) with more articles published on attention to special educational needs (SEN), in the
period 2019-2020. For this, 44 articles identied in academic search engines were analyzed:
SciELO, Redalyc y Dialnet. The results refer that the countries with the highest number of
publications in the indicated period are: Cuba, Chile and Mexico, these are grouped into four
lines of research: “Assessment of the context: family, school and social in terms of inclusion”,
Analysis of public policies related to inclusion”, “Application of psychopedagogical strategies
for special educational needs” and “Teacher training for educational inclusion”. It is concluded
that the lines of research do not respond to the public policies implemented in each country,
since most of the articles refer to documentary or qualitative research focused on evaluating
the school and family context, as well as reviewing documents focused on public policies.
Key words: political education, inclusive education, Latin America and Caribbean.
1
Universidad de Oriente-Puebla. Estu-
diante. Puebla, México. E-mail: vickye-
guibar@hotmail.com ORCID: https://
orcid.org/0000-0003-1232-9156 Google
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view_op=list_works&gmla=AJsN-F52uI-
no7wkZGYfx5nHo4qyUoad-9R1Koiwj2_xS-
PMuiXC8kEzxQ3Vtta9SdDUrfZ8jKj6xaY-
qbm03P6G7pYx4K6ubKqmA
2
Centro de Estudios Superiores Tercer Milenio.
Licenciada. Docente. Licenciatura. Puebla,
México. E-mail: andy.becquer111@gmail.com
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-0608-
4909 Google Scholar: https://scholar.google.
com/citations?hl=es&user=AClf74EAAAAJ
el desarrollo de líneas de investigación en necesidades educativas
especiales y su relación con las políticas blicas
de américa latina y el caribe
victoria
eguibar-ramírez
1
andrea
pozos flores
2
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universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
INTRODUCCIÓN
3
El proceso de integración educativa se asocia al
concepto de Necesidades Educativas Especiales
(NEE) y se reere al apoyo que se brinda a los alumnos
cuyos aprendizajes dieren de manera signicativa
al del resto del grupo. Según García-Cedillo (2018),
este concepto no se emplea particularmente con
alumnos que presenten alguna discapacidad, sino a
todos los que aprenden por debajo de su potencial,
así como alumnos sobresalientes y con problemas
de lenguaje o aprendizaje; además, el concepto
se asocia a factores personales (discapacidad),
familiares (problemas familiares por violencia, falta
de recursos económicos, etcétera), comunitarios y
escolares (escuelas con escasos recursos, problemas
en el desempeño docente, clima de aula hostil).
Según García-Cedillo y Romero Contreras
(2019), en la mayoría de los países impera una
pedagogía que establece una diferencia entre
alumnos normales y no normales, para lo cual,
desarrollan centros que se especializan en atender
a este último tipo de alumnos y aluden a que en
la escuela regular no se tienen los recursos para
atenderlos, de ahí la importancia de revisar los
lineamientos que desarrollan los distintos países
para lograr una verdadera inclusión.
Ahora bien, en materia de políticas públicas,
debe tomarse en cuenta que en 2015 todos los países
de América Latina y el Caribe se comprometieron
a alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4, y
así garantizar una educación inclusiva, equitativa y
de calidad para el año 2030; y en este sentido, todos
los objetivos relacionados con la inclusión educativa
incluyen garantizar el acceso a educación primaria
y secundaria de forma universal, educación para
el desarrollo sostenible y la ciudadanía mundial,
entornos de aprendizaje, aumento en el número de
becas disponibles para los países en desarrollo, así
como incrementar la oferta de docentes cualicados
(UNESCO, 2017).
En la actualidad, el término de inclusión
educativa ha sustituido al de integración educativa,
sobre todo ahora que se retoma el término
“diversidad”; sin embargo, existe una modalidad
de este enfoque que es la inclusión moderada,
la cual reconoce el concepto de NEE junto con
el de barreras de aprendizaje (García-Cedillo,
2018). Adems, existe un número signicativo de
investigaciones desarrolladas dentro de los países
de América Latina y el Caribe (ALC) que retoman
este término.
En este marco, el derecho a la educación
inclusiva fue establecido en el histórico Artículo
24 de la Convención de las Naciones Unidas sobre
los Derechos de las Personas con Discapacidad
(UNESCO, 2020a). A la fecha, solo ocho países de
América Latina (Argentina, el Estado Plurinacional
de Bolivia, Brasil, Chile, Ecuador, Guatemala,
Honduras y Perú) y cuatro países del Caribe (Aruba,
Curazao, Dominica y Saint Martin) han adoptado
una perspectiva integral de la inclusión en sus leyes
nacionales, aunque la mayoría las focaliza en grupos
especcos; es decir, se mantiene un enfoque de
integración educativa, por ello en el 95% de los
países de la región los ministerios de educación
han formulado leyes centradas en las personas con
discapacidad (UNESCO, 2020a).
A pesar de lo anterior, algunos países de
la región no han cumplido efectivamente sus
compromisos, ya que existen dicultades al
abordar la educación inclusiva para personas con
3
Artículo original y derivado del proyecto de investigación titulado:
Análisis de las tendencias en investigación de las políticas públicas y
las NEE en ALC (2019-2020), Puebla, México.
80
El dEsarrollo dE línEas dE invEstigación En nEcEsidadEs Educativas EspEcialEs y su rElación con las políticas
públicas dE américa latina y El caribE - victoria Eguibar-ramírEz y andrEa pozos FlorEs
discapacidad, como son: falta de recursos adecuados,
denición tarda o insuciente de las necesidades,
formación personal docente inadecuado,
infraestructura inaccesible y falta de tecnología de
apoyo. También debe mencionarse que los países
aún promueven las escuelas especiales, por ejemplo,
en el caso de Chile, en 2018 cuando ya contaba con
su ley de educación inclusiva, existían más de 2,000
escuelas especiales a las que asistía el 5.1% del total
del alumnado, esto porque Chile aún mantiene el
enfoque en atención a la discapacidad (UNESCO,
2020 a).
Aunado a lo anterior, el proceso de inclusión
educativa en sí mismo presenta barreras. Según
Melero (2012), estas se clasican en tres: las polticas
que son normativas contradictorias; las culturales
que implican conceptos y actitudes; y las didácticas,
que reere al proceso de enseñanza-aprendizaje.
América Latina y el Caribe comprenden
una región extensa y basta de diversidad cultural,
lo cual conlleva a que las condiciones para el
desarrollo educativo impliquen un reto para la
inclusión, debido a que se presentan diversas
dicultades sociales, culturales, económicas, fsicas,
etcétera. En este sentido, el primer paso de un
proyecto inclusivo es asumir un trabajo de carácter
político, institucional, colectivo y colaborativo en
las dimensiones del fenómeno: la sociedad, las
políticas, la institución educativa y la familia, que
a su vez se puede clasicar en intraescolares y
extraescolares (REDUCA, 2017).
Los factores intraescolares son variables
ubicadas en el interior de la escuela. Su presencia
hace conictiva la permanencia de los estudiantes
en la escuela, son características propias de la
estructura del sistema educativo y aumentan las
brechas de atención. Estas son: problemas de
convivencia escolar, bajo rendimiento académico,
currculos no apropiados ni exibles, autoritarismo
docente y adultocentrismo, entre otros (REDUCA,
2017).
Los factores extraescolares se asocian con el
entorno en el que se desenvuelven los estudiantes,
estos pueden ser el nivel socioeconómico de
la familia, como también el nivel educacional
alcanzado por los padres y/o la zona geogrca.
Se reere a los factores que pueden facilitar directa
o indirectamente el retiro escolar, aquí también
se incluyen la necesidad de trabajar para entregar
ingresos a la familia y el embarazo adolescente.
(REDUCA, 2017)
Estos factores determinan la permanencia en
la escuela y, de este modo, la brecha de exclusión se
acrecienta; así, los niños y las niñas son más proclives
a ser excluidos de un sistema escolar estandarizado,
sobre todo si existen bajos niveles económicos y
alta vulnerabilidad social, incluyendo una lengua
distinta, un origen rural, ser de población indígena
o tener alguna discapacidad. En este sentido,
Román (2013) menciona que, para abarcar todos
los parámetros en el fracaso escolar, se tienen que
tomar en cuenta los distintos factores que inuyen
en el fenómeno y que va más allá de conocer los
principales indicadores (la repitencia, la deserción
o retraso escolar), ya que su disminución implica
comprender la complejidad tomando en cuenta
un enfoque integral y multidisciplinario. Según los
informes de Unesco y Unicef proporcionados en
2012, las problemáticas se enlistan:
Problema 1: Rezago educativo. En ALC,
en 2008, había 117 millones de niños, niñas y
adolescentes que se encontraban en edad de asistir a
81
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
algún tipo de educación (educación inicial, primaria
o secundaria), sin embargo, 6.5 millones no lo
hicieron y, aunado a ello, 15.6 millones poseían dos
o más años de rezago (REDUCA, 2017).
Problema 2: La dicultad de las zonas rurales
para acceder a la calidad educativa. En este sentido,
el rezago económico de esta zona también limita
el acceso a los estudiantes para una educación
de calidad. El contexto se divide en dos zonas:
las urbanas, que permiten la movilización y la
infraestructura adecuadas; y las zonas educativas
donde los profesores no llegan, no se cuenta con
infraestructura ni con los materiales adecuados
para la adquisición de conocimientos (REDUCA,
2017).
Problema 3: Se evidencian brechas en el
logro de resultados de aprendizaje que perjudican,
sobre todo, a estudiantes pertenecientes a sectores
vulnerados. Así, los países de la región concentran
los niveles más bajos y los peores resultados en las
pruebas de aprovechamiento (REDUCA, 2017).
Es decir, estas 3 problemáticas limitan el
desarrollo de una educación inclusiva en ALC, y
en este sentido, orilla a los gobiernos a generar
estrategias que permitan su solución, pero, como
ya se mencionó, existen contradicciones entre las
políticas propuestas por los países y su aplicación
en la realidad, de manera que estos lineamientos no
son efectivos si las autoridades gubernamentales
no trabajan en conjunto con las instituciones
educativas y la propia comunidad.
Por ejemplo, Chile presentaba para el 2008
un problema evidente en los factores internos a
causa del nivel socioeconómico bajo que se observa
en las zonas más pobres del país, y en este sentido
en las instituciones educativas se encuentran
bajos ingresos económicos en las familias de los
alumnos, familias disfuncionales o monoparentales,
dicultad de ingreso a la escuela secundaria debido
a la escasez de lugares, y las madres con menor
escolaridad aumentan la probabilidad de deserción
en sus hijos. También se identica el poco interés y
motivación por asistir a la escuela, bajo rendimiento
escolar y no hay adaptación durante la transición
entre niveles de estudio; adems, también inuyen
los problemas de comunicación en las familias
(Román, 2013).
Por otro lado, México tiene dicultades
relacionadas con los factores externos a diferencia
de Chile, pues los alumnos se enfrentan a
dicultades relacionadas con el origen étnico, los
problemas económicos, falta de becas, las bajas
expectativas de los docentes en las escuelas de
situación de pobreza, y las grandes distancias entre
los alumnos y las escuelas, aunque también deben
considerarse a las familias disfuncionales o con un
contexto familiar en situación de violencia (Román,
2013).
En este sentido, en ALC el principal
problema es la pobreza, y para hacerle frente se han
creado iniciativas que motivan a diferentes grupos
indígenas o en situación de pobreza extrema a
continuar con su educación, buscando erradicar
la deserción escolar con el apoyo y colaboración
de la Red Latinoamericana por la Educación
(REDUCA), a partir de la implementación del
programa “Prácticas innovadoras en educación
inclusiva”.
Por otro lado, Acedo y Opertti (2012)
proponen cuatro formas de abordar el paradigma
inclusivo en los sistemas educativos: perspectiva
basada en los derechos, a partir de 1948; Respuesta
82
El dEsarrollo dE línEas dE invEstigación En nEcEsidadEs Educativas EspEcialEs y su rElación con las políticas
públicas dE américa latina y El caribE - victoria Eguibar-ramírEz y andrEa pozos FlorEs
aplicación de las políticas públicas; en segundo
lugar, se encuentran las condiciones pedagógicas
para la implementación del enfoque inclusivo en la
región, pues tiene los niveles más bajos y los peores
resultados en las pruebas de aprovechamiento. Esto
también se asocia con la adopción de un enfoque
basado en la discapacidad.
Tomando en cuenta lo anterior, este artículo
se revisan los temas de investigación en materia de
NEE de los países de ALC con más publicaciones
en el año 2019-2020, con el objetivo de conocer
las líneas de investigación en las que se ocupan las
comunidades cientcas y saber si estas responden
a las necesidades señaladas por las políticas públicas
de sus países.
DESARROLLO
Para llevar a cabo esta investigación se realizó una
Revisión Rápida de los artículos en materia de
NEE por los países de América Latina y el Caribe
en el periodo 2019-2020. Las Revisiones Rápidas
son una forma de presentar el conocimiento
de manera sintetizada y tiene elementos de una
revisión sistemtica pero ms simplicada en el
sentido que al ser rápida (tiene una duración en
promedio de seis meses y se requieren menos
recursos), simplica una serie de procesos que son
conocidos como atajos (Tapia-Benavente et al.,
2021). A continuación, se describen las fases de
esta revisión:
Primera fase: Consistió en la formulación
de la pregunta de investigación, en este caso, se
formuló la siguiente ¿Cuál es la relación entre las
investigaciones publicadas por los países que más
a los niños y niñas con necesidades educativas
especiales, a partir de 1900; Respuesta a los grupos
en situación de marginalidad, a partir del 2000;
y Transformando el Sistema Educativo, a partir
de 2005. Dentro de sus conclusiones, retoman
a Ainscow, Dyson y Weiner (2012) y reeren
la importancia de mantener el debate sobre las
políticas de inclusión y tomar en cuenta que mientras
las escuelas especiales se encuentren dentro de
las escuelas regulares no se está contribuyendo a
transformar el sistema educativo en la medida que
no se crean escuelas para todas y todos.
Siguiendo con el panorama actual, en
ALC, los sistemas escolares reejan sociedades
desiguales en términos económicos, y aunque se
han comprometido a reportar datos mediante
encuestas para dar seguimiento a los indicadores
educativos, empero, del 57% de los países que se
comprometieron no siempre se realiza esta acción.
Además, alrededor del 50% de las y los docentes de
Brasil, Colombia y México reportan una necesidad
de capacitación profesional para hacer frente a los
retos de enseñar a alumnos y alumnas con NEE
(UNESCO, 2020a).
Además, durante el contexto de pandemia,
las brechas educativas se acrecentaron pues un
reporte de la UNESCO emitido en agosto 2008,
rerió que ms de 160 millones de niños y niñas de
ALC no habían podido asistir a la escuela debido a
la crisis sanitaria (UNESCO, 2020b).
En conclusión, la aplicación del proceso de
inclusión educativa en ALC presenta, en primer
lugar, dicultades relacionadas con las condiciones
sociales, culturales y económicas de los países,
de manera que estas intereren en el éxito de la
83
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
producen investigación en materia de inclusión
educativa en América Latina y el Caribe, y sus
políticas públicas en el periodo 2019-2020? Para
dar respuesta, se establecieron objetivos especcos
para el análisis documental del periodo establecido:
Identicar a los pases de Latinoamérica y el Caribe
que publican ms artculos cientcos en materia
de inclusión educativa en revistas indexadas; denir
las líneas de investigación a las que responden la
mayoría de los estudios de artículos publicados
en los últimos dos años en materia de inclusión
educativa; y denir el enfoque (cualitativo,
cuantitativo y mixto) de las investigaciones
reportadas en los artículos publicados, para ello, se
incluyó la categoría documenta.
Segunda fase: La búsqueda fue realizada en
los buscadores académicos: Scientic Electronic
Library Online o Biblioteca Cientca Electrónica
Figura 1. Criterio para la selección de artículos
Fuente: elaboración propia.
en Lnea (Scielo), La Red de Revistas Cientcas
de América Latina y el Caribe, España y Portugal
(Redalyc) y el portal de difusión de la producción
cientca hispana de la Universidad de la Rioja,
Dialnet.
Tercera fase: selección de estudios y extracción
de datos. Se seleccionaron únicamente los artículos
relacionados con investigaciones en necesidades
educativas especiales y políticas públicas en idioma
español, de la región de América Latina y el Caribe
en el periodo 2019-2020. Asimismo, se excluyeron
artículos relacionados con investigaciones que
abordaban temas de género, etnia y lenguas
indígenas en el ámbito educativo. Las palabras clave
que se emplearon fueron “Necesidades educativas
especiales”, con el ltro de los años 2019 y 2020
(ver Figura 1).
84
El dEsarrollo dE línEas dE invEstigación En nEcEsidadEs Educativas EspEcialEs y su rElación con las políticas
públicas dE américa latina y El caribE - victoria Eguibar-ramírEz y andrEa pozos FlorEs
Cuarta fase: la evidencia se sintetizó en una matriz
de análisis con los siguientes encabezados: autor(es),
año de publicación, título, tema, resumen del
artículo y referencia. Posteriormente, los artículos
se clasicaron según temas y contenido similares
y se obtuvieron cuatro temas generales que se
consideraron líneas de investigación: “Evaluación
del contexto: familiar, escolar y social en materia
de inclusión”, “Análisis de políticas públicas
relacionadas con la inclusión”, “Aplicación de
estrategias psicopedagógicas para las necesidades
educativas especiales” y “Formación docente para
la Inclusión educativas”. En un segundo momento
se elaboró una segunda matriz donde se incluían
los artculos clasicados (ver Anexo).
Quinta fase: los artículos fueron
incluidos en una base de datos que permitió
realizar grcos para lograr los objetivos de
investigación, estos se muestran en el apartado de
resultados y permitieron llegar a conclusiones.
RESULTADOS
En los primeros resultados obtenidos en los
buscadores académicos, se identicó que en 36
pases que conforman ALC (ver Grca 1), se
observa que Cuba tuvo 47 publicaciones en el
periodo 2019-2020, es por lo que se destaca por ser
el país con más publicaciones; seguido por Chile
con 28; en tercer lugar, se encuentra México con 11;
en cuarto lugar, aparece Brasil con 9 publicaciones;
Colombia con 7; Ecuador con 6; y tanto Argentina
como Perú y Costa Rica con 2. En último lugar
se encuentra Honduras, El Salvador y Uruguay
con una publicación. De los países restantes no se
encontraron publicaciones.
Gráca 1. Países con más publicaciones en materia de inclusión educativa
en América Latina y el Caribe (2019-2020)
Fuente: elaboración propia.
85
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publicaciones en los años 2019 y 2020 son
“Evaluación del contexto: familiar, escolar y social
en materia de inclusión” y “Análisis de políticas
públicas relacionadas con la inclusión”, con la
etiqueta “Políticas Públicas”; y en menor medida
se han realizado publicaciones en “Aplicación de
estrategias psicopedagógicas para las necesidades
educativas especiales” y “Formación docente”.
La Grca 3 muestra los resultados de la
distribución de los artículos que conforman la
muestra; así, se puede observar que existe en misma
cantidad, 15 artículos que representan el 34.1%,
de investigaciones cualitativas y documentales.
En menor cantidad artículos cuantitativos, 10 que
equivalen a 22.7%; y en menor proporción aún
el grupo de artículos con enfoque mixto que está
conformado por 4, es decir, el 9.1%.
Por otro lado, la Grca 2 muestra las cuatro
lneas de investigación identicadas en el anlisis
de artículos: la línea “Evaluación del contexto:
familiar, escolar y social en materia de inclusión”,
representada con la palabra “Contexto” de color
verde, constituye el 36% de las publicaciones;
Aplicación de estrategias psicopedagógicas para
las necesidades educativas especiales”, representada
con la etiqueta “Estrategias aplicadas” con el
color rojo, el 9.1%; “Análisis de políticas públicas
relacionadas con la inclusión”, con la etiqueta
“Políticas Públicas” con el color azul, el 43.2%; y
“Formación docente”, con la etiqueta “formación
de profesionistas” con el color anaranjado, el 11.4%
del total.
Como se observa, las líneas de investigación
más abordadas por los tres países con más
Gráca 2. Distribución de artículos
publicados por la línea de investigación
Fuente: elaboración propia.
Gráca 3. Distribución de artículos
publicados por el enfoque de investigación
Fuente: elaboración propia.
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El dEsarrollo dE línEas dE invEstigación En nEcEsidadEs Educativas EspEcialEs y su rElación con las políticas
públicas dE américa latina y El caribE - victoria Eguibar-ramírEz y andrEa pozos FlorEs
De esta manera, el 68.2% de las investigaciones
reportadas en los artículos publicados en los
buscadores académicos analizados son cualitativos
o de carácter documental. En menor proporción
(32.8%) son cuantitativos o mixtos. Además,
las líneas de investigación más abordadas son
“Evaluación del contexto: familiar, escolar y social
en materia de inclusión” y “Análisis de políticas
públicas relacionadas con la inclusión”, que
representan el 79.6% de los artículos analizados; en
menor proporción se han realizado publicaciones
en “Aplicación de estrategias psicopedagógicas
para las necesidades educativas especiales” y
“Formación docente”, que equivalen al 20.4%.
La región de ALC enfrenta, según el Tercer
Estudio Regional, Comparativo y Explicativo
[TERCE] diversas problemáticas en la región,
algunas son: 1) el rezago educativo, 2) la dicultad
de las zonas rurales para acceder a educación de
calidad, y 3) brecha en el logro de resultados de
aprendizaje que perjudican a estudiantes que
pertenecen a sectores vulnerables (Flotts et al.,
2016). La UNESCO (2020b) mencionó que la
inclusión y la equidad siguen siendo una tarea
pendiente en la región y con la crisis sanitaria actual
se ha vuelto más evidente y urgente, puesto que más
de 160 millones de niños y niñas no han podido
asistir a la escuela en América Latina y el Caribe,
esto profundiza las brechas educativas en distintos
países, ya que el 20% son pobres, aspecto que
diculta el acceso a las herramientas tecnológicas
necesarias para la educación a distancia.
Lo anterior devela una discrepancia respecto
al proceso inclusivo, ya que, aunque la UNESCO
proponga entre las necesidades incorporar el
paradigma inclusivo con el término diversidad, las
condiciones socioeconómicas y culturales de la
región podrían representar una limitante. Como se
observó durante la investigación, la mayoría de las
investigaciones realizadas continúan empleando el
paradigma de las necesidades educativas especiales;
prueba de ello es que en el periodo 2019-2020 se
identicaron 113 artculos que retomaban este
término y 44 de ellos conformaron la muestra
de esta investigación. Esto quiere decir que, solo
el 20% de las publicaciones identicadas estaban
encaminadas a revisar otros elementos incluyentes
del paradigma de la diversidad como atención a
comunidades indígenas e inclusión en materia de
género.
Además, las investigaciones no responden a
estas necesidades de la región de ALC, ya que no se
enfocan en reducir la brecha de atención; aunado a
ello, el 68.2% de las investigaciones son cualitativos
o documentales; y el 79.6% están encaminadas a
responder a las líneas de investigación “Evaluación
del contexto: familiar, escolar y social en materia
de inclusión” y “Análisis de políticas públicas
relacionadas con la inclusión”. La minoría restante
se encarga de revisar la capacitación a docentes
y la evaluación de la aplicación de estrategias
psicopedagógicas para las necesidades educativas
especiales.
Por otra parte, aunque en los países
analizados se creen políticas públicas encaminadas
a la atención a las NEE, su creación no responde a
las necesidades de la región; prueba de ello es que
las evaluaciones señalan una brecha signicativa
en el acceso a la educación, pues no se puede
reducir, tampoco se puede garantizar la inclusión
educativa y el logro de objetivos de aprendizaje de
los alumnos con NEE, ya que no se cuenta con los
87
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
brechas de atención que se plantean en la región, y
la mayoría de los artículos abordan problemáticas
relacionadas con las NEE y la revisión de políticas
públicas.
CONCLUSIÓN
En la región existen tres problemáticas principales:
1) el rezago educativo, 2) la dicultad de las zonas
rurales para acceder a educación de calidad, y 3)
brecha en el logro de resultados de aprendizaje que
perjudican a estudiantes que pertenecen a sectores
vulnerables, en el que pueden contemplarse a los
alumnos con NEE. La actual crisis sanitaria ha
incrementado los problemas detectados, puesto
que 20% de los estudiantes en educación básica
que habitan la región son pobres, aspecto que limita
su acceso a equipo necesario para la educación a
distancia y el acceso a docentes e instalaciones que
brinden una educación de calidad.
Para responder a las necesidades mencionadas,
los países han implementado políticas públicas
dirigidas a brindar atención a alumnos con NEE,
Chile es el país que más investigación en este tema
produjo en la región, puesto que, de la muestra este
país acapara el 47% de las publicaciones revisadas,
además, cuenta con un documento propio para
monitorear y proponer nuevas estrategias en
materia de inclusión educativa; empero, a pesar
de ello, según el informe TERCE (2016) en 2018,
pese a la Ley de Inclusión Escolar, Chile contaba
todavía con 2,027 escuelas especiales donde más
de 180,000 alumnos y alumnas con necesidades
educativas especiales (5.1% de la matrícula total), el
91% asistía a establecimientos privados.
recursos económicos ni de personal necesarios para
implementar un paradigma educativo orientado a la
diversidad.
De este modo, respecto a lo que menciona
García-Cedillo (2019), en América Latina y el
Caribe aún se contempla el enfoque de la educación
inclusiva moderada, puesto que en los artículos se
abordan autores que desarrollaron su trabajo en
torno a conceptos como: barreras de aprendizaje,
necesidades educativas especiales y adecuación
curricular. Tal es el caso de Ainscow (2003), Booth
y Ainscow (2006), y otros autores que se mencionan
en los antecedentes.
Así, la idea de conformar una inclusión
educativa radical o hacia la diversidad no es una
opción si antes no se satisfacen las necesidades
educativas de la región. Respecto a lo anterior
(“Principio de carácter preventivo”), incluso Cuba
y Chile aún mantiene un enfoque en inclusión
moderada a n de tener un carcter correctivo o
compensatorio, la formación y desarrollo integral
de la personalidad de los individuos con NEE.
En este entorno, Chile es el único país de
los analizados que cuenta con un monitoreo en
educación que permite delimitar logros con base a
las investigaciones recabadas por dicho documento:
“Informe Nacional de Cuenta Pública”; mientras
que para el resto de los países es necesario revisar
“El informe GEM de Regional Educación e
Inclusión”; además, este país cuenta con leyes
que directamente abordan las problemáticas de la
inclusión.
Finalmente, México es el único país que
propone políticas públicas en materia de atención a la
diversidad, pero sus investigaciones, documentales
en su mayoría, no están dedicadas a reducir las
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públicas dE américa latina y El caribE - victoria Eguibar-ramírEz y andrEa pozos FlorEs
internacionales y evaluaciones del contexto familiar
y escolar de los estudiantes con NEE. Empero,
los resultados no retroalimentan los reportes de
dichos países y no corresponden con los Objetivos
de Desarrollo Sostenible que buscan garantizar
el acceso universal a la educación de calidad y la
capacitación cualicada de los docentes en un
paradigma de atención a la diversidad, debido a que
las necesidades de la región obligan a mantener un
enfoque en la educación inclusiva moderada.
Además, al revisar los artículos se puede
encontrar un deslindamiento al área psicológica,
pues debido a los recursos limitados que existen
en estos países analizados, no es posible capacitar
de manera satisfactoria al personal en esta área,
pues se les da prioridad a otros elementos como
instalaciones e inmuebles, que si bien forman
parte de la inclusión educativa se deja de lado la
capacitación y actualización continua del psicólogo
que forma parte de la comunidad educativa.
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Respecto al resto de los países se menciona
poco en el informe TERCE (2016). Por ejemplo,
en Cuba sus políticas públicas se encaminan al
desarrollo integral de la familia contemplando las
NEE. México es el país que más ha promovido
el paradigma de la diversidad, pero las políticas
públicas no están enfocadas a disminuir las brechas
en el logro de objetivos o el rezago educativo de
sus países. En torno a las líneas de investigación,
alrededor del 80% está encaminada a la revisión
de políticas públicas y a la evaluación del contexto
familiar o escolar en el que se desarrollan los
estudiantes con NEE; además, en la misma
proporción las investigaciones cualitativas y
documentales conforman la mayoría de la muestra
analizada. En menor medida, se enfocan en la
capacitación docente o en la evaluación de las
estrategias psicopedagógicas aplicadas para la
atención de las NEE. En resumen, las cuatro
líneas investigadas son: “Evaluación del contexto:
familiar, Escolar y Social en materia de inclusión”
y “Análisis de políticas públicas relacionadas con
la inclusión” comprenden el 79.6% de la muestra,
Aplicación de estrategias psicopedagógicas para las
necesidades educativas especiales” y “Formación
docente”, el 20.4%.
Finalmente, de acuerdo con la muestra
analizada, no existe una relación entre las necesidades
educativas en materia de inclusión educativa de la
región de América Latina y el Caribe, las políticas
públicas implementadas por Chile, Cuba y México,
y sus líneas de investigación, ya que la aplicación
de las políticas no está encaminada a minimizar las
necesidades, puesto que no se evalúa el contexto
de cada país. Así, el desarrollo de las líneas de
investigación responde a la revisión de políticas
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Mendive. Revista de Educación, 17(2), 204-
221. https://mendive.upr.edu.cu/index.
php/MendiveUPR/article/view/1517
Sierra S., J. J. (2019). La educación inclusiva.
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Suárez Suárez, G., León González, J. L., Morales
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valores en la universidad inclusiva. Revista
Conrado, 15(69), 79-88. http://conrado.
ucf.edu.cu/index.php/conrado
Tapia-Benavente, L., Vergara-Merino, L.,
Garegnani, L. I., Ortiz-Muñoz, L., Loézar-
Hernández, C. y Vargas-Peirano, M.
(2021). Revisiones rpidas: deniciones
y usos. Revista Mdica Revisada Por Pares,
21(01), e8090. https://www.medwave.cl/
medios/medwave/Enero-febrero2021/
PDF/medwave-2021-01-8090b.pdf
Toledo-Manríquez, C. A. y Basulto-Gallegos, Ó.
F. (2020). Representaciones Sociales de
la Experiencia Educativa de Jóvenes que
Presentan Trastorno del Espectro Autista
en Chile. Revista latinoamericana de educación
inclusiva, 14(1), 161-176. https://dx.doi.
org/10.4067/S0718-73782020000100161
Valdés Valdés, I., Guerra Iglesias, S. y Camargo
Ramos, M. (2020). Las habilidades de
interacción social: un puente hacia la
inclusión. Mendive. Revista de Educación,
18(1), 74-88. https://mendive.upr.edu.
cu/index.php/MendiveUPR/article/
view/1646
94
El dEsarrollo dE línEas dE invEstigación En nEcEsidadEs Educativas EspEcialEs y su rElación con las políticas
públicas dE américa latina y El caribE - victoria Eguibar-ramírEz y andrEa pozos FlorEs
ANEXOS
Tabla 1. Categorización abierta de los títulos analizados para obtención de líneas de investigación
Artículo País
Categoría/ línea de
investigación
La corrección-compensación en niños sordociegos con alteraciones
motrices a través de actividades físicas adaptadas (Morales, Duque y
Cevallos, 2019)
Cuba Aplicación de estrategias
psicopedagógicas para las
necesidades educativas
especiales
Las TIC y Artes mediales: La nueva era digital en la escuela inclusiva
(Bernaschina, 2018)
Chile
Prácticas Pedagógicas y Transformaciones Sociales. Interculturalidad
y Bilingüismo en la Educación de sordos (Herrera y Calderón, 2019)
Inclusión de niños de 6 a 7 años con necesidades educativas
especiales (discapacidades sensorial, mental e intelectual) en una
escuela primaria con Unidad de Servicio de Apoyo a la Educación
Regular, en San Luis Potosí, México (Brunot, 2019)
México
La educación inclusiva. Su componente normativo desde los
organismos internacionales y las políticas públicas nacionales (Sierra,
2019)
Cuba Análisis de políticas públicas
relacionadas con la inclusión
Enseñanza del Derecho Cooperativo y Educación Cooperativa. ¿Un
par dialéctico? (Díaz, 2020)
Las neurociencias para la educación inclusiva en la formación del
profesional de la educación infantil (Puentes y Sánchez-Valdés,
2019)
Formación docente
Acciones pedagógicas de formación universitaria inclusiva para la
atención a educandos sordos con implante coclear (Castro-Pérez,
Fresquet-Pedroso y Carmenate-Figueredo, 2019)
La comunicación del educador de la infancia temprana en las
prácticas inclusivas (Alfonso-Amaro, Bermúdez-Monteagudo y
Borges-Fundora, 2019)
Modelo para la formación de valores en la universidad Inclusiva
(Suárez et al., 2019)
¿Racismo en la educación inclusiva? Una mirada desde la
interculturalidad (Delbury, 2020)
Chile
Inclusión Social/Educativa, en Clave de Educación Superior (Brito,
Basualto y Reyes, 2019)
El Legado de la Conferencia de Salamanca en el Pensamiento,
Políticas y Prácticas de la Educación Inclusiva (Blanco y Duk,
2019b)
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universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
Comprender La Educación Inclusiva Chilena: Panorama De
Políticas E Investigación Educativa (Manghi et al., 2020)
El reconocimiento de las diferencias como fundamento para la
educación inclusiva: la evaluación como barrera en el discurso
docente (Alfaro y Fernández, 2020)
De la Conferencia Mundial de Salamanca al Foro de Cali: 25 años de
lucha (Duk y Murillo 2019a)
Reexiones de los Aportes de la Declaración de Salamanca 25 Años
Después (Andújar-Scheker, 2019)
Conmemoración de la Conferencia Mundial de Salamanca y su
Inuencia en América Latina (Blanco y Duk, 2019a)
Cinco dimensiones claves para avanzar en la inclusión educativa en
Latinoamérica (Marchesi y Hernández, 2019)
Formación docente
Concepciones sobre el cambio educativo en docentes de escuelas
municipales participantes de un proyecto de desarrollo inclusivo
(Figueroa-Céspedes, Soto y Yáñez-Urbina, 2019)
Hacia un Sistema Escolar Inclusivo: Desde las Políticas a las
Prácticas (Luna-González, 2019)
Segregación Escolar y Meritocracia (Duk y Murillo, 2019b)
¿Qué Podemos Aprender de los Sistemas Educativos de Chile,
España y Finlandia en el Marco de la Declaración de Salamanca?
Inuencia de la Declaración de Salamanca sobre la Atención a la
Diversidad en México y Situación Actual (García y Romero, 2019)
México
A 25 Años de la Declaración de Salamanca y la Educación Inclusiva:
Una Mirada desde su Complejidad (Cruz, 2019)
Discapacidad y educación: Entre la corporalidad que discapacita y el
derecho a tener derecho (Cruz-Vadillo e Iturbide, 2019)
Las habilidades de interacción social: un puente hacia la inclusión
(Valdés, Guerra y Camargo, 2020)
Cuba Evaluación del contexto:
familiar, escolar y social en
materia de inclusión
La participación familiar en la inclusión socioeducativa de los
educandos con necesidades educativas especiales (Aguiar, 2020)
Diversidad y educación personalizada en las aulas. La esencia del
quehacer de la universidad inclusiva (Gil-Álvarez y Morales, 2019)
Interdisciplinariedad e inclusión escolar de niños con discapacidad
desde los relatos maternos (Gonçalves et al., 2019)
Indicadores diagnósticos para el estudio del proceso de inclusión-
exclusión educativa en la escuela cubana (Batista, 2019)
La superación del maestro ambulante que atiende educandos con
discapacidades físico-motoras por parálisis cerebral (Sánchez-Valdés
y Puentes, 2019)
Formación docente
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El dEsarrollo dE línEas dE invEstigación En nEcEsidadEs Educativas EspEcialEs y su rElación con las políticas
públicas dE américa latina y El caribE - victoria Eguibar-ramírEz y andrEa pozos FlorEs
El protagonismo de la familia en la atención temprana de
niños y niñas con Síndrome de Down, Chile (Andreucci-
Annunziata y Morales-Cabello, 2019b)
Chile
Voces y Culturas Estudiantiles en la Escuela: Una Reexión
Teórico-Metodológica desde Procesos de Autoexploración de
Barreras a la Inclusión (Figueroa-Céspedes y Yáñez, 2020)
Representaciones Sociales de la Experiencia Educativa de
Jóvenes que Presentan Trastorno del Espectro Autista en
Chile (Toledo-Manríquez y Basulto-Gallegos, 2020)
Gestión del tiempo, trabajo colaborativo docente e inclusión
educativa (Sagredo-Lillo, Bizarría-Muñoz y Careaga-Butter,
2020)
Discapacidad Intelectual en Primera Infancia: La Perspectiva
de los/as Hermanos/as de Niños/as con Síndrome de Down
(Andreucci-Annunziata y Morales-Cabello, 2019a)
Percepción inclusiva en estudiantes universitarios de Arica-
Chile (Alvarez-Cabrera, Lima y Molina, 2019)
Inclusión educativa en relación con la cultura y la convivencia
escolar (Jiménez-Vargas, López y Valdés-Morales, 2019)
¿De la Frustración a la Alegría o de la Alegría a la Frustración?
Signicados Sobre Inclusión Educativa Construidos por
Docentes a Partir de su Experiencia Emocional (Poblete-
Christie, López y Muñoz, 2019)
Validación de un instrumento de estrategias para fortalecer el
aprendizaje (Ramos-Estrada et al., 2020)
México
El tipo de participación que promueve la escuela, una limitante
para la inclusión (Ochoa, 2019)
Educar en y para la Diversidad de Alumnos en Aulas de
Escuelas Primarias de la Ciudad de México (Naranjo, 2019)
Educación inclusiva: contribuciones y retos en los niveles
medio superior y superior en San Luis Potosí (Hernández,
2019)
Formación docente
Fuente: elaboración propia.
Como se observa, del análisis de contenido se obtuvo una categoría adicional: “Formación docente”, esto
porque el número de artculos con esta vertiente era suciente como para que se considerase una categora
por sí misma, ya que no podía incluirse en otra.
97
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Instrucciones
para los autores
UNIVERSCIENCIA es un órgano de expresión
académica de la Universidad de Oriente, A. C., para
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y tecnología, previa revisión del Comité Editorial
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Artículos cortos: deben ser manuscritos
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exceder a 4. El número de palabras no debe
ser superior a 3,000.
Carta al editor: comentarios sobre artículos
recientemente publicados.
3. El artículo debe estar en formato Word. De igual
forma debe incluir: título del artículo, autor o
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ser lo más detalladas posible y deben incluir
universidad, ciudad y país. Además, todos
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El texto debe estar digitado en letra tipo Arial,
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4. La remisión del artículo debe ir acompañada de
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5. Escribir el artículo con una extensión máxima de
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Título: el título debe ser breve, conciso y
descriptivo. No debe contener referencias,
números compuestos o abreviaturas no
estandarizadas. En castellano y en inglés.
Resumen: el resumen debe ser de tipo
analítico (objetivo, metodología, resultados
y conclusiones), que no sobrepase las 200
palabras. El resumen debe describir brevemente
el propósito u objetivo del estudio, cómo se
realizó la investigación, los resultados más
importantes y las principales conclusiones que
se extrajeron de los resultados, respectivamente.
Se deben evitar las referencias y las abreviaturas.
En castellano y en inglés.
Palabras clave: se pide a los autores que
proporcionen de cuatro a seis palabras clave para
identicar las principales temticas abordadas.
Estas palabras clave se utilizan para nes de
indexación, para ello deben estar incluidas en
el Tesauro de la UNESCO. En castellano y en
inglés.
Introducción: los autores deben esforzarse por
denir el signicado del trabajo y la justicación
de su publicación. Cualquier discusión de
fondo debe ser breve y restringida al material
pertinente.
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Materiales y métodos: los autores deben ser
lo más concisos posible en las descripciones
teóricas y experimentales. La sección debe
proporcionar toda la información necesaria para
garantizar la reproducibilidad. Los métodos
publicados anteriormente deben indicarse con
sus referencias y solo deben describirse las
modicaciones relevantes.
Resultados: los resultados del estudio deben ser
claros y concisos. Restrinja el uso de tablas y
guras para representar datos que son esenciales
para la interpretación del estudio. No duplique
datos tanto en las guras como en las tablas. Los
resultados deben presentarse en una secuencia
lógica en el texto, tablas e ilustraciones.
Discusión: se debe explorar la importancia de
los resultados del trabajo, no repetirlos. Incluya
en la discusión las implicaciones de los hallazgos
y sus limitaciones, cómo los hallazgos encajan
en el contexto de otro trabajo relevante y las
direcciones para futuras investigaciones.
Conclusiones: pueden ser independientes y
estar vinculadas a los objetivos del estudio, con
nuevas hipótesis cuando se justique. Incluya
recomendaciones cuando sea apropiado. Se
deben evitar las declaraciones y conclusiones
no calicadas que no estén completamente
respaldadas por los datos obtenidos.
Referencias: es responsabilidad de los autores
garantizar que la información en cada referencia
sea completa y precisa. Las referencias deben
tener el formato correcto. Todas las referencias
mencionadas en la lista de referencias se deben
citar en el texto y viceversa. Se recomienda
que las fuentes bibliogrcas sean tomadas de
Scopus y Web of Science.
6. Enviar las guras, mapas e imgenes en una
resolución mínima de 266 dpi en formato jpg
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fuente(s) correspondiente(s). En las tablas se
deben usar únicamente líneas horizontales de
acuerdo a las normas APA, sexta edición.
7. Citar las fuentes bibliogrcas menores a 40
palabras dentro del texto del siguiente modo:
(primer apellido del autor, año, página). Ejemplo:
(Rodarte, 2011, p. 52). Las referencias que
tienen más de 40 palabras se escriben aparte del
texto, con sangría a ambos lados, sin comillas y
sin cursiva. Al nal de la cita se coloca el punto
antes de los datos ―recuerde que en las citas con
menos de 40 palabras el punto se pone después
y con comillas―.
8. Las notas a pie de página numeradas en
orden consecutivo se utilizarán tan solo
para aclaraciones, comentarios, discusiones,
envíos por parte del autor y deben ir en su
correspondiente pgina, con el n de facilitar al
lector el seguimiento de la lectura del texto.
9. Las referencias bibliogrcas se harn con base
en las normas APA, sexta edición. Recuerde que
todas deben de llevar sangría francesa. Así:
Libro:
Apellido(s), Iniciales nombre del autor. (Año).
Título del libro. Ciudad, País: Editorial.
Foucault, M. (1996). El orden del discurso. Madrid,
España: Las Ediciones de La Piqueta.
• Libro con editor:
Apellido(s), Iniciales nombre del autor (Ed.). (Año).
Título del libro. Ciudad, País: Editorial.
Shapiro, S. (Ed.). (2007). The Oxford Handbook of
Philosophy of Mathematics and Logic. Oxford, United
Kingdom: Oxford University Press.
• Capítulo de libro:
Apellido(s), Iniciales nombre del autor. (Año).
Título del capítulo. En Apellido(s), Iniciales nombre
del editor o compilador. (Ed.) o (Comp.). Título del
libro (pp. xx-xx). Ciudad, País: Editorial.
Beamish, P.W. (1990). The internationalization
process for smaller Ontario rms: A research
agenda. En Rugman, M. (Ed.), Research in Global
Strategic Management: International Business Research for
the Twenty-First Century; Canada’s New Research Agenda
(pp. 77-92). Stamford, USA: Jai Pr.
99
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
• Artículo revista:
Apellido(s), Iniciales nombre del autor. (Año). Título
del artículo. Nombre de la revista, volumen(número),
pp-pp.
Sharpley, R. and Jepson, D. (2011). Rural tourism:
A spiritual experience? Annals of Tourism Research,
38(1), 52-71.
• Artículo con DOI:
Apellido(s), Iniciales nombre del autor. (Año). Título
del artículo. Nombre de la revista, volumen(número),
pp-pp. DOI: xx.xxxxxxx.
Canelas, C. and Salazar, S. (2014). Gender and
ethnic inequalities in LAC countries. IZA Journal
of Labor & Development, 3(1), 18. DOI: https://doi.
org/10.1186/2193-9020-3-18.
• Artículo de periódico:
Apellido(s), Iniciales nombre del autor. (Fecha).
Título artículo. Nombre del periódico, pp-pp (si la
tiene).
El Economista. (12 de mayo de 2016). El chocolate es
mexicano, pero en Mxico se consume poco.
• Tesis de grado o posgrado:
Apellido(s), Iniciales nombre del autor. (Año). Título
de la tesis (tesis de pregrado, maestría o doctoral).
Nombre de la institución, lugar.
Díaz, M.A. y Landaeta, H. (2014). Diseño de un sistema
de aprovechamiento de aguas lluvia para la alimentación
de la planta de producción de Herrajes Dudi S.A.S en la
localidad de Fontibón (tesis de pregrado). Programa
de Ingeniería Ambiental, Universidad de La Salle,
Bogotá, Colombia.
• Online:
Apellido(s), Iniciales nombre del autor. (Fecha).
Título del artículo. Recuperado de: (URL).
Mincer, J. (1974). Schooling, Experience, and Earnings.
National Bureau of Economic. Recuperado de: https://
www.nber.org/books/minc74-1.
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Enfoque
y Alcance
Universciencia, revista arbitrada de divulgación e
investigación, se mantiene por más de 15 años en
la divulgación de conocimiento cientco con la
vocación de difundir y expandir la investigación de
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editorial, junto a las autoridades, se encargan
del proceso editorial y la revisión de los trabajos
siguiendo los parámetros establecidos en la revisión
de doble pares ciegos.
Universciencia se dedica a la publicación
cuatrimestral de artículos, resultado de
investigaciones originales en español e inglés que
abarcan una variedad de temas relacionados a la
investigación cientca, por lo que se la considera
una revista multidisciplinaria.
Universciencia es una publicación arbitrada
por la Universidad de Oriente que se mantiene por
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cientco con la vocación de impulsar la generación,
aplicación y desarrollo de investigación básica,
aplicada y frontera de América y el mundo. Su
consejo editorial, junto con las autoridades, se
encargan del proceso del diseño editorial y diseño
estructural de la revista, por ello los trabajos
postulados siguen los parámetros de revisión de
dobles pares ciegos.
Código de ética de
UNIVERSCIENCIA
Sobre el Consejo Editorial y la Coordinación
Editorial
a. La Coordinación Editorial y el Consejo
Editorial de UNIVERSCIENCIA
recibirán, evaluarán y dictaminarán las
contribuciones que hayan solicitado ser
candidatas a publicarse en la revista, a partir
de los criterios académicos y cientcos
acorde a la normatividad, temática y alcance
de la revista.
b. La responsabilidad nal de determinar
la publicación o no de un texto, descansa
en la Coordinación Editorial, así como
las recomendaciones obtenidas por parte
de los pares académicos que evalúan las
contribuciones. Para lo cual se informará a
los autores en caso de existir un fallo.
c. El proceso de dictaminación cientco ser
a doble ciego por pares, donde por lo
menos dos árbitros especialistas en las
temáticas de la revista, externos e internos,
den fallos positivos.
d. Los textos elaborados por autores
pertenecientes a la Universidad de Oriente,
serán evaluados por árbitros externos a la
institución.
e. La coordinación y el consejo editorial
resolverán aquellos casos donde se
presenten posibles plagios, diferencias en
el reconocimiento de derechos de autor,
conictos de interés y/o donde existan
posibles violaciones a este código, y/o a
los estándares internacionales de buenas
prácticas editoriales, entre otros.
f. El Coordinador Editorial de la revista será
el responsable de la absoluta
condencialidad de todo el proceso de
dictaminación.
101
universciencia - año 20 - núm. 59 - 2022 - issn 1665-6830
Sobre los autores
a. Los textos deben ser inéditos y no estar
sometidos paralelamente a otro proceso
editorial.
b. Todos los textos deberán contar con
una correcta redacción para garantizar su
legibilidad.
c. Los textos deben seguir las instrucciones
a los autores hechas públicas por
UNIVERSCIENCIA.
d. Los autores deberán sustentar sus textos
de forma clara y precisa de acuerdo a
las metodologías de su obtención de
resultados.
e. El autor seguirá una exhaustiva citación
y referenciación de los autores o fuentes
de información con las cuales elaboró su
texto.
f. El autor asegurará el anonimato y
condencialidad de los sujetos de estudio
en sus investigaciones, y evitará ejercer actos
de discriminación por cuestiones de raza,
género, ideología, religión, condiciones
políticas, económicas y sociales.
g. El autor evitará en lo máximo posible
presentar artículos originales con un uso
excesivo de contenido publicado por él
en el pasado, con variaciones mínimas o
extensas porciones de información.
h. El autor aceptará que sus textos sean
sometidos a procesos de dictaminación
doble ciego, y de valoración de pertinencia
temática y reglas gramaticales; y a efectuar
las correcciones que sean sugeridas por
los dictaminadores para su posibilidad de
publicación.
i. Los autores de los textos aceptados
para su publicación cederán sus derechos
patrimoniales para que éstos se publiquen
y distribuyan de forma física y electrónica.
Sobre los dictaminadores
a. El dictaminador deberá sustentar su
evaluación con rigurosidad metodológica
y argumentos académico-cientcos, de su
conocimiento en el campo de estudio de su
competencia, y no sobre bases personales
o ideológicas.
b. El dictaminador entregará por escrito un
informe de su evaluación al texto que le
haya sido asignado, en un formato para
tal efecto, donde contemplé todo aquello
relevante para asegurar el rigor cientco
y académico del texto, sugerencias para
mejorarlo y sus recomendaciones de
publicación o rechazo; y/o posibles
evidencias de plagio.
c. El dictaminador mantendrá absoluta
condencialidad en todo el proceso de
evaluación e informará cuando considere
que no es idóneo para evaluar el texto
asignado por desconocimiento del tema,
conicto de interés y/o motivos personales.
d. El dictaminador deberá mantener en
todo momento el anonimato del proceso
de dictaminación, y no podrá utilizar
información contenida en el texto que
dictamina para su propio provecho y/o
distribuirlo con terceros.
e. El dictaminador deberá hacer la revisión
del texto en un plazo estipulado y si
precisase más tiempo, lo informará de
manera adecuada y oportuna.
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Temática y alcances
La revista de divulgación cientca UNIVERS-
CIENCIA, es una publicación de la Universidad
de Oriente-Puebla, editada en la ciudad de Puebla,
Puebla, México, la cual se concibe como un espacio
propicio para presentar investigaciones empíricas,
reexiones teóricas o reseñas, que permitan
promover el dilogo académico-cientco continuo
entre los diferentes lectores de dicho contenido.
Esta revista es una publicación impresa
cuatrimestral, dirigida a investigadores, especialistas,
docentes, estudiantes de posgrado y público en
general, interesados en la investigación cientca en
los campos de las ciencias sociales y humanidades
ciencias de la ingeniería, diseño, arte y arquitectura,
así como de las ciencias exactas y naturales. Por
ello, se compromete a publicar trabajos escritos en
español e inglés, que sean producto de actividades
investigativas de calidad, relevancia y contribución,
para el conocimiento cientco y la divulgación de
la ciencia, a nivel nacional e internacional.
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